Capítulo 1

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15/01/2015

Blake

Me encontraba tumbado en el pasto del instituto,junto a mi skate, esperando a que las clases terminaran, me negaba a entrar.
Estoy cansado de aguantar las constantes miradas detrás de los hombros, los profesores gritándote, y repitiendo las mismas frases,y esas de ciertos profesores, de, "nunca vas a ser nada en la vida si sigues así", Es mi vida, mi decisión, y aunque no lo crean, la salud mental sí afecta a los estudios. Los timbres del instituto sonando a cada hora, la gente empujandote por los pasillos...-pensé cabreado

-Blake-susurro Ruder Williams .

Mi mejor amigo de la infancia, siempre estuvimos juntos,nos apoyábamos mutuamente.

-¿que pasó Rudu? -Así le llamaba desde el jardín de infancia-Alze una ceja curioso

-Alex nos ha invitado a una fiesta, la hará el viernes en su casa, sin padres y con mucho alcohol, ¿vendrás? - me preguntó Ruder.

-¿Es enserio?¿me preguntas eso?¡¿A mí?! -contesté cabreado - Él sabía de todos mis problemas y de mi forma de ser, no sé porque me lo preguntó, sabe que no me gusta salir.

-No sé, tal vez podrías salir un poco de tu casa y divertirte, llevas sin salir desde el curso pasado, venga porfa ven conmigo-me suplicó

-Tal vez - contesté con una risa burlona.

Acto seguido de aquella charla sonó el timbre de las 15:00, por fin me iría a mi casa.
Cogí mi skate y fui directo a mi casa dejando a Ruder con sus demás amigos.
No me caían bien, Alex era risueño y simpático, me gustaba como conjuntaba su ropa, Nico era lindo,se la pasaba bebiendo y eso no me agradaba, al parecer estuvo con una chica durante 1 año y medio y no lo supera, y por eso recayó en el alcohol, o eso escuché.

Cuando llegué a mi casa escuché a mi padre hablando por teléfono, parecía cabreado, seguro que hablaba con el tío Peter, para que me fuera con él. Podría estar equivocado en muchas cosas, pero estaba seguro que mi padre no me quería en absoluto.

-¡Patterson!-gritó mi padre pegándome en la parte inferior del ojo con un trapo que sostenía en sus manos, de limpiar las manchas de alcohol de la mesa del salón.

Desde que mi padre se fue huyendo aquel día de New York hasta aquí,Stowe,Recayó en la droga y el alcohol, algunas veces incluso traficaba para ganarse algo de dinero.

Le miré confuso del golpe que me pegó.
-¿Cuando te vas a largar?, sabes que no me conviene tenerte aquí, y lo sabes perfectamente - me grito mientras se cambiaba de ropa para ir a tomarse una cerveza al bar.

Estaba acostumbrado a sus acciones y sus palabras de todos los días, pero no podía evitar sentir dolor. Me fui a mi habitación, sin decir ni una palabra me coloqué los pequeños auriculares en mis oidos, y me asomé a la ventana para fumarme un cigarro.

Consecuencias de ser feliz(en curso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora