La música empezó.
De forma lenta y marcada, acompañada de las rítmicas palmas de la instructora y el sonido casi imperceptible de varios pares de pies golpeando el suelo de madera.
La elegancia y gracia en el salón era apreciable a simple vista, un grupo de jóvenes chicas dando saltos, piruetas y moviendo su cuerpo delicadamente al compás de la melodía orquestal que llenaba el lugar entero.
Gráciles, finas, delgadas y con aire intocable, parecía estar admirando a la imagen clásica de princesas en un cuento infantil.
¿Podían seres así existir en el mundo?
Dahlia estaba absorta observando cada movimiento que hacían las chicas. Pero había una que resaltaba entre todas las demás, se encontraba rodeada del resto de chicas, no estaba ahí para llamar la atención, más bien parecía oculta, sin embargo era imposible apartar la vista de ella, aunque el resto la cubrieran, quizás sea debido a la diferencia de estatura o por su piel del color de una fina porcelana que se veía en perfecta armonía con su cabello castaño por el cual pasaban rayos de sol y lo hacían ver un poco rubio, en comparación a las demás no era alta ni extremadamente delgada, sin embargo tenía una figura pequeña y tonificada, dando movimientos seguros y llenos de energía al bailar, totalmente concentrada.
La pequeña apertura de la puerta por la cual observaba no era suficiente para apreciar en su totalidad todo el escenario, sin embargo tenía una amplia visión de lo que ocurría.
La música empezó a ir más rápido, lo cual provocó un fugaz cambio de ritmo en los movimientos de las jóvenes bailarinas. Saltando y dando pasos más rápidos sin perder el aura de elegancia, parecía más bien...dramático. Dando cada vez más giros de forma consecutivas y con el sol filtrándose por la ventana, el cabello que estaba perfectamente fijado en un moño poco a poco empezó a desvanecerse cayendo casi perfecta y desordenadamente hasta sus hombros, casi dorado debido a la luz.
La música se detuvo y en el momento exacto, sus miradas se encontraron.
Dahlia tenía una imagen casi onírica al frente, la chica que había capturado totalmente su atención la miraba fijamente, con grandes orbes color miel, cubiertos de unas largas pestañas, sus mejillas llenas de un hermoso rubor y sus labios rojizos entreabiertos, intentando tomar aire. Algunos mechones rebeldes de cabello se pegaban a su cara debido al sudor, esta se aparto uno de ellos hacía atrás de la oreja, dejando ver un pequeño lunar bajo su ojo derecho, sin despegar su mirada en ningún momento de la joven pelinegra que la observaba a través de la puerta del salón.
—¡Daphne, presta atención!
La mencionada frunció el ceñó y sus miradas dejaron de estar conectadas, Daphne (el cual descubrió era su nombre) salió de su vista, dejando en un estado de completo shock a Dahlia, que se aparto de la puerta y caminó hasta la salida de la institución donde se encontraba, haciendo el camino a casa en inercia e ensimismada, intentando procesar aquella hermosa imagen y las emociones inexplicablemente fuertes que estaba sintiendo en ese momento.
[FIN]
NOTA:
este es un pequeño universo alternativo donde todo es más lindo¿ apartir de aqui había desarrollado otra historia, pero al final decidí desecharla y solo salvar este texto, eso
gracias por leer <3
pd: los extras no tienen ilustración, pq me salieron bien de la vrga y quería publicarlos de una vez, dudo que las haga, maybe someday.
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Gardenias (Girls love)
RomanceEn ese preciso instante hubo un big bang en el interior de Daphne, esa primera impresión fue la explosión que detonaría la creación de un universo entero. ----------------------------------------------- -Threeshot girls love con un poquito de angst ...
