Sr yo:

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Anoche, en una visión inconsciente de mi mismo en el futuro, pude observar una versión completamente distinta a la que siempre estuve acostumbrado. Siempre me ví en ese típico sueño cliché de el chico rico, exitoso y brillante, donde mis escenarios eran perfectos, pero está vez me ví completamente distinto, ya no era un chico. En esta versión de mí pude notar las miles de arrugas que recorrían mi cuerpo, pude notar la dificultad que tenía al caminar, noté también que mi cabello estaba despigmentado, pero el cambio más doloroso que pude notar fue la soledad.

Ella estaba ahí a mi lado, sentada disfrutando del silencio de la mañana. Ella me veía moverme por la casa, escuchaba como cantaba para mantener la cordura, miraba como deliraba por las noches. Ella escuchaba como por dentro gritaba de dolor y desesperación.

En un pequeño parpadeo regresé 50 años al pasado, veía en tercera persona como mi yo de adolescente escribía esto. Con un alma llena de esperanzas, una mente muy brillante y llena de ideas, ese ingenuo chico predecía su futuro.

Pero ni yo mismo lo sabía.

Cosas que Pensé Una Vez.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora