SeokJin levanto la vista del documento que acaba de leer, observó a JungKook con una ceja arqueada.
—¿Es en serio?— JungKook asintió sin dejar de teclear en su computadora.
—Jenifer manifestó que le gustaría trabajar contigo, si no quieres dedicarte a la fundación, en esa lista hay varias opciones de las cuales puedes elegir, aligerarías mi carga de trabajo si me ayudas.
—Por supuesto— contestó Jin con sarcasmo, se detuvo, había decidido comenzar de nuevo, por lo menos llevar la fiesta en paz durante estos dos años, menos de una semana y ya estaba agotado. —Gracias— dijo sinceramente. Estudio la lista —¿Arte y subastas?— En la lista, aparte de la fundación, existía una variada cantidad de empresas y negocios pequeños. Desde una editorial hasta la gestión de venta y compra de antigüedades. No eran negocios millonarios como la empresa Jeon, pero eran inversiones variadas que aportaban capital desde varias ramas de inversión.
—Las galerías de arte tienen su atractivo— comentó JungKook. Jin rio. Era una risa sincera. Recordaba a JungKook decir en el instituto que no lograba comprender a los artistas y sus pinturas raras.
—Puedo ocuparme de toda la lista— dijo Jin.
—Sé que puedes— JungKook lo miró a los ojos y vio la sinceridad en ellos.
Era un nuevo día, inevitablemente, una nueva esperanza. Hacía un día precioso, el sol brillaba y no había nubes en el cielo. Poco después de que JungKook se marchara, Jin se puso a trabajar, organizo todo en la lista y decidió por donde comenzar. Dos horas después decidió que tenía que hacer unas visitas importantes tanto a la editorial como a la galería de arte, deliberadamente dejaría la fundación y a la agencia de modelaje hasta el final. TaeHyung y HoSeok eran la razón. NamJoon se presentó en el momento en que Jin acababa de anotar todos los pendientes en su agenda.
—Cuando quiera.
—Cinco minutos— tenía que recoger el ordenador, el móvil y sus notas.
—Voy a traer el coche— De camino a la editorial, Jin revisó su lista.
Estaba muy emocionado por comenzar, tenia tantos planes, tantos proyectos que podía implementar, estaba tan emocionado, al menos hasta que descubrió que la primera para era en el edificio de oficinas de Jimin. El ánimo que había tenido, cayó en picada después de que NamJoon le informara que tenían que recoger los nombramientos que lo acreditaban como nuevo apoderado de JungKook en los asuntos en los cuales se había comprometido a trabajar. Era lógico, no podía presentarse de buenas a primeras a la editorial, o a la galería de arte simplemente a mandar. Necesitaba el poder legar para tomar decisiones. Cosa en la cual él no había pensado. Pero JungKook si, él era muy inteligente, asusto y hábil, al menos en la cuestión laboral, porque en otras cuestiones al parecer no era bastante listo, hasta ahora parecía que el hombre no se había dado cuenta que Jimin y Jin no se llevaban precisamente bien.
Jimin lo recibió con cortesía, era profesional en su trabajo, le explico claramente en que consistían los nombramientos y poderes que JungKook le otorgaba, aclaró con toda calma y claridad todas sus dudas, nuevamente le demostró, que era un buen abogado, pero eso no hacia nada por agradarle más.
—¿Conoces a HoSeok y a TaeHyung?— Preguntó a Jimin mientras firmaba la pila de documentos. El abogado levanto una ceja.
—¿Crees que somos amigos para que me preguntes esas cosas?— La voz de Jimin era tranquila y para nada había cambiado su semblante de abogado profesional.
—Es obvio que no, ya dejaste claro que no te agrado.
—No necesitas agradarme— comentó recargándose en su silla —TaeHyung y HoSeok no son personas de las cuales debas preocuparte, no son competencia para ti.
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Esposo Por Contrato [KookJin] | Adaptación |
عاطفيةCuando era joven, SeokJin tuvo expectativas y esperanzas, tuvo sueños y proyectos, era una persona alegre, positiva y... un idiota. Su vida fue de mal en peor hasta que llegó a tocar fondo. Estaba resignado a sobrevivir en el mundo sin llamar demas...