Two

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Edward vivió tranquilo sus primeros dos años de vida. Ambos, madre e hijo disfrutaban de una vida tranquila en una casa alejada de la ciudad sin ningún vecino al rededor.

Ella se llamaba Camila, era la segunda hija de una pequeña familia formada solo por sus padres, abuelos y hermano. Todos ellos murieron años atrás debido a no poder pagar la droga que su padre consumía, como consecuencia mandaron a unos matones a por ellos y todo salió de la peor forma posible.

El padre murió a golpes, mientras que la madre y el hermano murieron a causa de balazos al intentar salvar a Camila. Ella, por suerte logró escapar y huir de su país. Ahora se encontraban en California, y Edward supuso que estaban en Trinidad gracias al clima y a otros factores importantes.

Ambos descansaban al lado de la chimenea, bebiendo un delicioso chocolate caliente y mirando la televisión local, hablaban sobre política y demás, cosa la cuál le interesaba a Edward. En los dos años que estuvo con vida descubrió en algún punto que estaban en en año 1993, y que había nacido en consecuencia un 24 de diciembre de 1991.

Ver la televisión le hizo estar pendiente de todo aquello que pasaba en el mundo. Su madre pensó que era un niño curioso y que estaba tan enfrascado en las noticias porque no estaba en contacto con otras personas que no fueran su madre y el señor Roger, el presentador del canal.

Unos golpes contundentes sonaron en la puerta principal. Camila agarró a su hijo y corrieron hacia la cocina a la vez que se escuchó como la puerta que anteriormente estaba siendo golpeada se rompía. Abrazó con cuidado a Edward mientras corría hacia la puerta trasera. Respiraba desordenadamente a la vez que sentía que empezaba a sudar, se escondió detrás de un árbol mientras intentaba controlar su respiración. Tres hombres corpulentos los buscaron por los alrededores durante horas hasta que se cansaron y se alejaron.

Camila aseguró a su hijo en su pecho mientras comenzaba a alejarse silenciosamente de la casa a la vez que maldecía internamente por no haber podido llevar su móvil con ella.
Edward analizó la situación con calma, los estaban persiguiendo unos hombres que determinó que eran del sur de California, dónde vivía anteriormente su madre, ellos posiblemente estarían buscándola por su deuda con las drogas, bueno, concretamente la deuda de su abuelo con el LSD.

Se ve que la deuda era mucho más grande de lo que había pensado en un principio ya que, no se habían cansado de buscar a su madre durante todos estos años.

Después de horas caminando llegaron a una carretera, y al final de esta vieron un pueblo. Ella tenía un plan, iba a hablar con él. Era demasiado peligroso mantener a su hijo con ella por el momento.

...

Camila colgó la llamada. Había podido contactar con él después de haber podido llamarlo a través de una cabina telefónica. Él era el único recurso que le quedaba, y esperaba que su hijo pudiera vivir feliz con en el orfanato de Watari, pero todo aquello tuvo un costo, si Edward no mostraba suficientes capacidades de deducción e inteligencia no se lo llevaría. Literalmente estaba jugando a la ruleta rusa con el destino ya que nunca supo cuales eran las capacidades del niño.

-Edward escúchame. En nada vendrá un señor llamado Watari, él es bueno y le he pedido que te proteja, pero para ello tendrá que hacerte una pruebas. Por favor Edward, da lo mejor de tí.

Edward asintió, pero se sintió confundido. Watari era es pseudónimo de un personaje de Death Note, ese manga mundialmente conocido que le apasionó cuando lo leyó. Sí mal no recordaba, su nombre real era Quillsh Wammy. Todo pareció alinearse en su mente. En la televisión hablaron de una cadena de orfanatos que habían abierto a lo largo del mundo, y que uno de ellos se había incendiado, pero milagrosamente no hubo heridos.

El nombre de esa cadena de orfanatos era La Casa de Wammy.

||Orphanage|| Death NoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora