Fighting For Love

CAPÍTULO 2: Fiesta de Graduación

FIESTA DE GRADUACIÓN

Mi vestido para fiesta era estilo coctel, color negro, su tela es de terciopelo, se agarra al cuello en forma de cruz, es ajustado, elegante y bastante sexy. Lo había comprado, porque el día de hoy, tenía pensado arreglar las cosas con José, de una manera atrevida, el sexo de reconciliación es bueno, pero esta vez quería que fuera más que sexo de reconciliación, quería que hiciéramos el amor, que todo volviera a como era antes.

Me decidí ondular mi cabellera, algo no tan elaborado, para que se viera de una manera informal. El vestido de Elayne era un vestido péplum blanco con encaje negro, la hacía ver formal y sexy a la vez, además que le resaltaban sus pechos, si algo tenía que envidiarle a ella, era eso, sus pechos, ella es talla 36B mientras que yo soy 34A, lo bueno es que siempre los hacía lucir de una forma, sin llegar a verse vulgar como las otras chicas, creo que eso fue lo que me gustó siempre de ella, se viste sexy sin verse vulgar. Sus zapatos son con un diseño con tacón con destalles destrass, con un tacón de aguja, estilo Louboutin. Y los míos son Ravel casi de unos 7cm de altura, con suela de plataforma y multicorrea, con detalles de joyería clásicas que le dan un toque de elegancia.

Cuando terminamos de alistarnos, nos fuimos en su nuevo Nissan platina k plus 2006, se lo dieron sus padres de regalo de graduación hace dos semanas, pero esta sería la primera vez en que me suba con dirección para ir a una fiesta.

Elayne decía que lo íbamos a estrenar el día de hoy, aunque ya lo habríamos utilizado desde que se lo dieron. Puso música electrónica y andamos a lo que sería nuestra venganza, o más bien mi venganza.

Cuando llegamos a la fiesta, no eran más de las 9 y ya estaba a reventar, no pareciera que fuera una fiesta de graduación, sino más bien una fiesta cotidiana.

Entramos al evento y saludamos a nuestros compañeros, no vi rastro de José, pero no importaba.

Nos pusimos a bailar o si a eso se le llama bailar con Alberto y Felipe, compañeros de nuestra generación, yo sabía que Felipe quería salir conmigo, él era un chico promedio medio en la preparatoria, creo que compartíamos varias clases durante los tres años, era alto, bastante debo decir, mide aproximadamente 185cm, sus ojos son cafés y su cabello negro chino. Así que me aproveche, sé que no debía de hacerlo, porque Felipe no se lo merece, pero tenía que dar una cucharada de su propia medicina a José.

Además, que, aunque no es justificante, tenía ganas de salir con él algunas veces. Di una mirada a mi reloj de mano, y vi que eran las 22:43, había pasado tiempo suficiente para que viniera José, supongo que no vendrá, me sentí un poco mareada.

Poniendo de justificante el alcohol que corría por mis venas decidimos ir a tomar un poco de aire, mientras que Elayne y Beto se quedaban en la pista. No había sentido que hiciera frío cuando estábamos dentro, y mi abrigo lo había dejado en el carro de Ela, que tonta.

- ¿Mae? ¿estás bien? – ¿por qué todos me hacen la misma pregunta el día de hoy?

- Sí, claro, me la estoy pasando bien Feli – le respondí con una sonrisa, no era falsa, esa sonrisa era sincera, porque a pesar de todo, si me la estaba pasando bien con él. Pero mi voz fue un poco brusca, cortante, me desconcierta esa pregunta.

- ¿No tienes frío? – no tuve tiempo de contestarle, se estaba quitando su chaqueta y me la estaba poniendo, no me negué porque en serio si tenía frío.

- ¡Oh...! – Así que por esto era la pregunta, mierda, yo y mis paranoias – Feli gracias, me estaba congelando aquí a fuera, ¿pero tu estarás bien?