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Capítulo uno: La casa

Después de un largo día de prácticas en la universidad de criminología de Sacorfin,Tom y Abby que soy yo, cenamos una hamburguesa con patatas y nos fuimos a dormir en nuestra gran cama rosa con algunos toques de color dorado. El móvil de Tom sonó, con una bonita melodía. El como estaba disfrutando tanto de dormir, supongo que estaría soñando algo bonito. No contestó el teléfono, pero le llamaron de nuevo, así que supuso que era importante o simplemente sus amigos pesados que querían jugar algún juego de noche o algo por el estilo.De repente Tom gritó.

-Tom: Que pereza levantarme a contestar el teléfono, tengo sueño y mañana tenemos que ir a estudiar criminología, voy a coger la llamada.

-Abby: Ya a ver quién llama.

Antes de coger la llamada,Tom dijo: -Ostia,es del departamento de policía de Sacorfin así que igual es algo importante aunque aquí no suelen pasar crímenes o algo por el estilo. Al coger la llamada, Un agente de la policía de Sacorfin comenzó a hablar:

-Buenas noches, os llamo para contaros que ha habido un asesinato hace 10 minutos aproximadamente, un padre con sus amigos mataron a sus hijos, probablemente tendrían algún tipo de trastorno mental. Este crimen sucedió en una casa abandonada, al oeste de Sacorfin.Necesitamos ayuda para investigar quiénes fueron las personas que mataron a los hijos del señor.

-Tom: Vale ahora vamos jefe.
-Daniel: Gracias Tom.
-Abby: ¿Qué paso cariño?
-Tom: hubo un asesinato en una casa abandonada y tenemos que irnos.

Salimos de nuestra gran mansión blanca de siete pisos, y nos dirigimos al garage. Allí cogimos nuestro Lamborghini color rojo y nos dirigimos al oeste de Sacorfin. Mientras escuchabamos la radio.

Al llegar a la dirección vimos una casa vieja, de madera y fea que estaba rodeada de cinta de crimen. Allí se encontraba la policía de Sacorfin que nos preguntaron a Tom y Abby que quien éramos y que hacíamos aquí.

-Tom: Buenas agente somos del departamento de investigación de crímenes de Sacorfin, nos llamaron de la policía.
- Contestó Tom con miedo.

-Agente: vale puedes pasar, Tom. Nosotros estamos esperando que venga la ambulancia y el resto del equipo de la policía. Tener cuidado no sabemos lo que puede aver dentro de la casa.

-Abby: Gracias agente, tendremos cuidado.

Abrimos la puerta con un mango gris y feo. Dentro había un montón de sangre reciente y dos cadáveres de una niña y un niño.Junto a un hacha ensangrentada.

Tom exclamó ¡ostia!
Abby: ven conmigo vamos a explorar el perímetro.

Fuimos por aquella casa tan tétrica, donde no encontramos nada relevante. Espera- exclamó Abby.
¿Que es esto?- pregunto Abby.

Había una gran sábana gris tapando algo bastante grande y con aparente forma rectangular.

Tom dijo- Mi amor,¿Deberíamos de destaparlo? Quizás es peligroso no se?
Abby: Claro, mi vida -dije sonriendo.No te preocupes que podría pasar, bebé

Tom con sus manos venosas y delgadas destapó la gran sábana color gris, dejando a la vista una gran máquina de videojuegos adornada de color rojo carmesí, que decía "Rotten" ¿Qué es esta mierda? Pregunto Abby.
Tom: No lo sé amor.

Deberíamos enchufarlo y jugar ya que nunca vi un juego como éste y además los demás agentes y la ambulancia todavía van a tardar en llegar- dijo Tom emocionado.
Abby: Vale hagamos travesuras como en los viejos tiempos.
Tom: Exacto bebe.
Yo adoraba cuando Tom me decía bebe.

Al enchufar aquella extraña máquina de vídeojuegos.La pantalla mostraba un gran título que decía "Rotten" era un juego de saltar obstáculos para al final liberar a un dragón rosa pastel, que escupía fuego, pero de repente se iluminó todo con un gran destello de color rosa y tuve mucho miedo así que Tom me abrazó y me dio un beso en la frente. Literal amaba a ese chico de repente sentí como si mi cuerpo hubiera sido agarrado con fuerza hacia dentro de la máquina, seguro eran ilusiones debido a que no había dormido o tal vez por el crimen, luego me empecé a encontrar mal.