Así el día de nuestro casamiento llegó. Mi madre sonriéndonos, firmamos la libreta de matrimonio y la jueza nos declaró oficialmente marido y mujer. Nosotros más que felices, nos besamos.
Nuestros testigos nos aplaudieron y Joey me miró con destellos y yo le sonreí perdidamente.
<< Por fin eres mi esposa Stephanie, tal como siempre lo anhelé >>
Junto a la ventana, recordé una vez más el inolvidable día de nuestra boda, me llené de suspiros y me miré la preciosa argolla de casados en mi dedo.
Me sentía radiante. Me miré en el espejo y vi que la barriga me había vuelto a crecer y sonreí con dicha. Me la acaricié con amor pensando en Joey.
_ Oh amor mío. Nuestro bebe ha vuelto a crecer. Ahora sí que los ocho meses se han hecho notar
Sonreí y anhelé aquello.
<< Quiero que me veas mi amor. Que veas lo grande que ahora si está nuestro amado bebe >>
Busqué un dulce y bonito vestido rosa y me lo coloqué para él...
Le preparé un rico café cargado, como a él tanto le gustaba y quise llevárselo a su sala de estudio, aprovechando que ya era de tarde y él acostumbraba a trabajar allí por esas horas.
Caminé extraño por el jardín; sentí que las piernas se me abrían con cada paso que daba. De pronto me sentí más pesada de lo habitual y pensé en él con más amor.
Su sala de estudio estaba al extremo del jardín, como si fuera una cochera de la casa, pero esta era aún mejor, y muy cómoda. Joey la había arreglado muy bien.
Solo anhelaba verlo y llevando su café, toqué a su puerta.
Él concentrado, revisaba la letra de una canción y escuchó la puerta. Levantó la mirada y se sacó los lentes de lectura.
_ Adelante...
Fingiendo, siguió en lo que estaba, y yo entré toda radiante con su café frente a él.
Lo miré perdidamente y risueña, lo encontré tan guapo con esa chaqueta negra y playera blanca y me sentí que me enamoré más de él en ese momento.
El corazón se me salió por los poros, él tenía la vista fija en el notebook y yo me puse nerviosa.
_ Permiso amor... Te traje tu café preferido, porque supuse que ya tenías un poco de hambre...
Él sin levantar la vista, siguió escribiendo en su notebook.
_ Gracias niña mía. Oye ¿Me lo podrías traer aquí al escritorio por favor?
Le sonreí embelesada, me puse más nerviosa y me le acerqué lentamente con su café. Desconocía lo que pretendía y él sonrió con disimulo.
Llegué junto a él y más nerviosa, le pasé su café...
_ Aquí te traigo tu café mi amor...
_ Gracias amor...
Mi enorme barriga casi rozaba con su brazo y a él le fascinó sentir aquel dulce acercamiento.
Solo eso me dijo, me recibió la taza y siguió escribiendo. Yo me quedé ahí junto a él y esperé a que me mirará y se diera cuenta, pero eso no pasó.
Me dieron unas enormes ganas de llorar y sentí de pronto las pataditas del bebe y me miré la barriga. Sentí otra vez aquella gran pesadez y deseé sentarme cuanto antes.
<< Ni siquiera me miró >>
<< No me miró >>
Bajé la mirada y me alejé de él con lentitud. Sin darme cuenta, Joey volteó a mirarme y sonrió intenso.
ESTÁS LEYENDO
"Sueño de Primavera" { Joey Tempest }
FanfictionNuestro dulce acuerdo. Historia original mía. No se permite plagio o adaptación. Todos los derechos Reservados.