Forever and Always (Baji Keisuke♡) FINALIZADA

𝓯𝓲𝓿𝓮♡

Pov's Sayuri.

Desde lo ocurrido con Baji, no he tenido oportunidad de hablar con él, de hecho, he intentado ir a su casa, pero no está, al igual que le he mandado miles de mensajes y solo me ignora, Dios, ¿qué ocurre con él?

Sin dejar de sobrepensar todo, aprovecho que mi jornada escolar ha terminado y trato de ir a casa lo más pronto posible, tanto Baji como Chifuyu no han asistido hoy a clases, lo cual me parece aún más extraño. Mi objetivo de hoy es poder conversar directamente con él, sin importar que.

Me despido de mis amigas, y continuo mi camino, a paso calmado avanzo y avanzo, hasta que de pronto, algo a lo lejos termina por captar toda mi atención, o más bien, alguien que algo...

¡Oh por Dios, mis sospechas eran ciertas!

Kazutora finalmente había salido del reformatorio.

Entonces, reconozco a la persona que va junto a él; Takemichi Hanagaki, el novio de mi amiga Hina. Fruncí el ceño extrañada, ¿A dónde se dirigían?, ¿Cómo se conocían?, no entiendo absolutamente nada, es como si cada vez se tornara más y más extraña la situación. Aún así, estoy decidida a saber que mierda es lo que esta ocurriendo.

Manteniendo una distancia prudente, camino tras ellos, siguiéndolos paso a paso, resguardándome que no puedan notar mi presencia, aunque por otra parte, si le sumamos que no puedo oír acerca de qué van charlando estoy en una clara desventaja de saber que es lo que realmente pasa.

Finalmente, el camino nos ha llevado hacia una especie de centro de juegos abandonado, puedo divisar a lo lejos que tiene un angel sin cabeza pintado, entonces, cuando de una vez por todas los muchachos se adentran el recinto, solo puedo decir que mi curiosidad va en aumento, tal como si de una bala se tratase.

Decido esperar afuera, ya que no saben que los estoy siguiendo, y por muy extraño que suene, la vibra de ese lugar, no me da buena espina, así que por esta vez, decido hacerle caso a mi intuición, y velar por mi seguridad.

...

Las nubes pasan y pasan, honestamente no hay mucho en que pueda entretenerme en estos momentos más que mirar al cielo, o jugar el juego de la serpiente en mi celular, he pensado en desistir de mi objetivo y retirarme a mi casa, sin embargo, no puedo hacerlo, no puedo evitar sentir que hay una razón por la cual no puedo irme.

...

Continúo aguardando, aprovechando de tomarme un jugo que recordé que traigo en mi bolso, ojalá el sabor del bebestible haga más amena la espera.

...

No sé cuanto rato ya ha transcurrido, pero ya me aburrí de esperar, no me interesa que clase de gente hay ahí dentro, me mantendré firme en mi decisión, nada ni nadie me va a impedir saber que es lo ocurre, por las buenas o malas, voy a saber.

Quien tiene miedo de vivir que no nazca.

A pasos agigantados me dirijo hasta la entrada, empuñando mis manos, como si eso me transmitiera más fuerza o coraje para adentrarme en aquel sombrio interior. Sin embargo, cuando estoy a tan solo segundos de poder llegar a la puerta, mi misión se ve interrumpida.

–Oh Dios mio –es lo único que puedo decir al observar la imagen frente a mi–

Mi ceño se frunce al máximo, y mis ojos pareciera que se iban a salir de su orbita. Takemichi llevaba cargando en sus hombros como podía a Chifuyu, quien venía totalmente herido, lleno de sangre, ¡¿qué puta mierda fue lo qué pasó?!.

Ni siquiera lo dudo, me alejo de la puerta y me dirijo hacia ellos, con un claro rostro de preocupación, observo a Takemichi, quien de inmediato se dio por aludido acerca de que estoy esperando una clara explicación de por qué mi amigo está en este estado.