Dos caras.

Parte 2: ¿Qué pasará?

-Demonios, Lilyth ¡que has hecho- dijo Eleazar.
-Yo, yo solo entre en pánico y quise defenderte, ¡te iba a matar!- dije defendiéndome.
-No tiene pulso...- me dijo con seriedad.
No sabia que pensar, había matado un hombre, hasta la borrachera se me bajó, empecé a llorar, Eleazar se paró y me abrazó.
-Todo estará bien, tranquila, saldremos de esto juntos.- me susurró dulcemente.-Ven, ayúdame.
Enredamos el cuerpo en un cobertor, y como pudimos lo echamos en la cajuela del carro.
-¿Qué estamos haciendo? A dónde lo lleváremos?
-Al lago, le pondremos algunas piedras, para que se hunda... Ya no llores, eres muy valiente, duerme, yo me encargo del trabajo-me dijo.
Me dormí como dijo, desperté y apenas llegábamos.
El se bajo, dejó encendidas las luces del carro para poder ver, pues estaba todo obscuro.
Bajé del auto y le ayude.
-Pensé que estabas dormida.
-Acabo de despertar-dije mientras empujaba el cuerpo.
Vimos cómo el cuerpo se hundía, mi llanto volvió, mi pareja me abrazó tan fuerte y me decía que todo estaría bien.
-¡¿Quién anda ahí!?
Escuchamos el grito y escuchamos pasos, nos asustamos.
-Sigueme la corriente, no hay tiempo de huir.- me dijo.
-Querida Lilyth, ¿te casarías conmigo?- me dijo y me quedé perpleja, mire al otro lado y ahí estaba el señor que nos había gritado hace unos momentos.
-¡Oh Eleazar! Claro que si-lo abracé.
-Lamento interrumpir, pero esta es zona privada, por cierto, felicidades- dijo aquel hombre desconocido y después se marcho.
-Vaya, que ingenioso eres!- dije aliviada.
-Algún día será real... Sube al auto.
Durante el camino seguía en shock, todo lo que había pasado, como es que mate aquel miserable, como hice que el amor de mi vida se involucrará en esto, la propuesta que me había hecho. Estaba desanimada.
Llegamos a casa, subí las escaleras para finalmente llegar a mi habitación, Eleazar me siguió.
-Toma.- le di un reloj- te lo iba a dar después de hacerlo, pero las circunstancias no lo permitieron. Es tu regalo de graduación.
-Gracias amor, y no te preocupes, ya habrá más noches, superaremos esto-me besó la frente.-Te amo.
-Te amo más.
Fuimos a dormir, fue una noche larga para mi, soñé todo lo que había pasado cuando tenía 10 años, todo lo que me hizo infeliz, pero también me sentía culpable.
A la mañana siguiente la masculina voz de mi hombre me despertó.
-Despierta hermosa.- me dijo mientras ponía el desayuno en la mesita.- Vamos o tendré que comerme todo esto yo solo.
-Para ti eso no sería un problema.-dije riendo.
-Anda come preciosa- dijo entre risas.
Terminamos de desayunar aún teníamos ir ordenar la casa. Bajamos con toda la actitud, limpiamos cada parte de la casa, solo faltaba la entrada.
-Eleazar...-lo llame, estaba paralizada.
-¿Qué pasa?, oh...- vimos un poco de sangre en el piso.
-Yo lo limpio hermosa.
-No, yo lo hago.
Limpié lo mas que pude, como si así pudiera borrar el recuerdo.
Estaba exhausta, fui a darme un baño con agua caliente.
-¿Puedo entrar?-dijo aquel hombre al que tanto amaba.
Me asomé y vi que estaba completamente desnudo, mordí mis labios y solo salió de mi boca un "claro"...