Parte 3: Algo de paz.

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Entró a la tina, yo me recorrí para que se pusiera detrás mío, se sentó.
-¿Cómo te sientes?-me dijo preocupado mientras esparcía espuma por mi espalda.
-Estaré mejor, lamento que estés involucrado en esto.-dije cansada, yo recorría su pierna con mi mano.
-Lo hiciste por mi, me salvaste la vida...-
-Te amo bastante.- dije y me voltee para besarlo.
El me siguen el beso, cada vez subía de tono, él decidió meter su lengua en mi boca, Dios, besaba espectacular, no se como me tomo de la cintura y ahora estábamos frente a frente, mis piernas lo rodearon, sentía su paquete en mi feminidad, sentía como cada vez se ponía mas dura. Empecé a besar su cuello, sabia que ese era su punto débil, el masajes a mis senos, de una manera sensacional. Una de mis manos bajo para poder tocarle, pero antes de que pudiera hacerlo me levantó un poco y sé introdujo en mi, sentía como nos movíamos primero lento, después muy rápido el sostenía mi cintura y hacía que rebotará en el también pasaba su lengua por mi cuello y subía hasta mi oreja. Yo apretaba los músculos de su espalda, sus brazos torneados subieron a mi cuello y me planto un beso apasionado. Sentía como iba terminando, gemimos por ultima vez, lo abrace tan fuerte como pude, estábamos exhaustos.
Lo vi a los ojos, esos hermosos y grandes ojos azules, los mismos que me volvían loca.
-Eso fue sensacional.-dije con la voz entrecortada.
-Lo repetiría cada día de mi vida-dijo mientras me abrazaba.- te amo.
-Y yo a ti.- dije sonriendo, anda salgamos.- dije mientras me levantaba y me enredaba en una toalla.
Eleazar salió cinco minutos después de mi. Yo me estaba vistiendo, me puse una blusa de tirantes negra y unos jeans ajustados. El se puso una camisa blanca con cuello V, unos pantalones negros y sus vans del mismo color de su pantalón.
-¿Quieres ir a comer corazón?-pregunte.
-Claro, vamos por una pizza.
Salimos en busca de la pizzería más cercana, fuimos caminando, mientras avanzábamos pasamos por un parque había una pareja de prometidos en un picnic. Eso me hizo recordar la dichosa propuesta que me hizo mi novio.
-Oye...
-¿Qué pasa hermosa?
-La propuesta que me hiciste en el lago...
-Preciosa, algún día no muy lejano seremos marido y mujer, solo espera a que consiga un buen trabajo.-me dijo con una sonrisa y en seguida me beso.
Llegamos a la pizzería.
Nos sentamos y llego la camarera y nos dejó dos menús.
-Una pizza grande de peperonni y una pasta mediana.- dijo mi pareja.- y dos refrescos de uva.
Ella se fue y regreso con los refrescos. Cuando se volvió a retirar, Eleazar me quería ver reír así que me empezó a contarme sus anécdotas de cuando era niño. La televisión nos interrumpió.
"ENCUENTRAR CUERPO FLOTANTE EN EL LAGO DE LA CIUDAD."
Esa noticia nos quito el apetito, estaba aterrada, mi novio me vio con la misma expresión. Pasaron al señor que nos había visto <<estaba solo, bueno, también había una pareja de enamorados, el joven le había propuesto matrimonio a su bella novia, no creo que estén involucrados>>
Comerciales...
-Demonios, demonios- dije aterrada...
-La policía no tiene como contactarnos, no te preocupes.- me dijo Eleazar tratando de tranquilizarme- disculpe señorita, la pizza nos las llevaremos.
Cuando salimos de ahí no sabia que pensar, estaba aterrada.
Llegamos a casa, Eleazar se metió a la casa, yo me quede afuera iba a checar el correo. Entre el correo había una carta no tenía remitente decía:
"Se lo que hiciste, me das asco, te delataré."

Dos caras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora