ㅤㅤㅤㅤㅤ🧶⌇ ˚ ༘ˀˀ ꒰‧ 𝗱𝗼𝗰𝗲 𝗺𝗲𝘀𝗲𝘀 !i
ㅤㅤㅤㅤ─ 𝘀𝗮𝗶𝗸𝗼 solamente te bastó un año
ㅤㅤㅤㅤㅤpara poder romper mí corazón.
ㅤㅤㅤㅤㅤaquel corazón que siempre te
ㅤㅤㅤㅤㅤperteneció a ti, mí agridulce
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ𝘀𝗮𝗶𝗸𝗼.
ㅤㅤㅤㅤ ▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂
ㅤㅤㅤㅤㅤ!i los...
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Cuando Manjiro se fué, Saiko entró a su casa. El suelo aún tenía pedazos de vidrio rotos y botellas tiradas por todas partes. Las manchas en la pared cada día se hacían más grandes, el olor más fuerte. Su casa ya no era su hogar.
Caminó lentamente hacia la cocina, allí vió a un oficial de policía junto a una mujer que desconocía. La mayor expulsó el humo del cigarro de su nariz para luego hablar. ─ Saiko, hasta que llegas.
La menor arrugó el entrecejo algo confundida. ─ Disculpen, pero podría saber que hacen en mi casa.
La mujer de figura delgada y alta se levantó de la rechinable silla y se dirigió hacia ella. ─ Mi nombre es Leiko Katō, soy la mujer de tu padre.
Para Saiko ella era alguien desconocida. ¿La novia de su padre? Tal vez ella era la razón del porque su padre desaparecía hasta semanas para luego volver como si nada.
El oficial se acercó a ellas agachándose hasta la altura de la adolescente. ─ Saiko, ¿Sabes dónde puede estar tu padre? ─ interrogó con una sonrisa que ocultaba el cansancio.
Las sonrisas siempre ocultan tus verdaderas emociones.
Saiko solo negó con la cabeza. ─ Mi padre suele irse de casa, lo máximo que ha estado afuera fue una semana.
