Thinking out loud (Lisa Cimorelli)

Capitulo 11

Empiezo a sentirme consciente de todo y abro los ojos poco a poco.En cuanto lo hago me da un dolor de cabeza muy fuerte.Me llevo la mano a donde me duele y en cuanto lo hago me doy cuenta de donde estoy.Yo no tengo una cama encima de la mía.Giro la cabeza a un lado y veo otra cama.Y una habitación muy desordenada.Una habitación que no es la mía.¿Dónde estoy?

Abro los ojos como platos ante la idea de haberme ido a casa de cualquiera.Levanto las sábanas y suspiro aliviada al ver que tengo pantalón y camiseta.Que tampoco son míos,pero bueno.

Intento recordar lo que pasó anoche,pero soy incapaz.Lo único que recuerdo perfectamente es entrar en una discoteca con Ricky y beber de su copa en cuanto se la dieron.Y supongo que a partir de ahí empecé a beber y a beber y a saber lo que habré hecho.Recuerdo algunas cosas sueltas,como una chica hablando conmigo en la barra y un viaje en coche.El problema es que no se si ambas cosas pasaron de verdad.

Me levanto con un poco de miedo por quien pueda estar fuera de la habitación.Me fijo en toda las cosas tiradas que hay por el suelo,entre ellas mi ropa.Salgo de la habitación y sigo por un pasillo hasta dar con las escaleras.Y en cuanto me asomo a ellas,me doy cuenta de donde estoy.En la casa de Lisa,pero,¿cómo narices he llegado aquí?

Bajo las escaleras poco a poco y voy por el sitio buscando a alguien.La primera vez que vine,que también fue la última vez que vine,la casa era muy ruidosa,pero ahora no se escucha nada.Bueno,algo sí,como el ruido que hacen las bolsas de patatitas y cosas así al abrirse.Sigo el ruido hasta una puerta blanca,la abro y allí me encuentro a una chica de mi altura más o menos.Ojos marrones,pelo castaño y despeinado...Esta era Lauren,la hermana de Lisa.La que me abrió la puerta hace dos días.

En cuanto abro la puerta,Lauren suelta lo que tenia en la mano,que era un paquete de galletas recién empezado,y me mira asustada.

-Siento haberte asustado.-me disculpo.

-No...No pasa nada.-dice nerviosa agachándose para coger el paquete de galletas.

-Em...Lauren,¿podrías decirme qué hago aquí?

-Yo...Eh...

-¿Por qué estás tan nerviosa?-pregunto frunciendo el ceño.

-Es que soy...Soy un poco tímida y tú pareces muy intimidante y ayer al verte así pues...

-¿Me viste?-pregunto preocupada,y ella responde asintiendo.-Siento mucho que hayas tenido que ver eso.

-Tranquila,no pasa nada.-dice.-Ayer lo que pasó...Fue que...

-Lauren.-digo acercándome a ella.-No te pongas nerviosa,no voy a hacerte nada.

-Vale...Pues ayer llegaste aquí con Lisa e ibas bastante borracha.Cuando te dormiste Lisa me dijo que te había visto con una chica caminando por la calle y que te trajo para casa.

-Ah...Qué raro.-digo.

-¿Por qué?

-Porque pensaba que Lisa me odiaba.

Lauren se ríe un poco y luego me mira sonriendo.

-Lisa es incapaz de odiar a alguien.-dice.-Y si pensaste en algún momento que no quería volver a verte más,estás equivocada.Sino no habría hecho esto,además me habló de ti,y parece que le caes muy bien.

-Oh...Genial.-digo sonriendo.-¿Qué te contó?

-Pues que no bebías y que ella también se asustó al verte así...Y que eras muy buena persona.Y graciosa,y simpática.Además de guapa.

-¿Dijo que era guapa?-pregunto.

-No,eso lo digo yo ahora.Pero ella también lo piensa.

-¿Cómo lo sabes?

-Porque dijo "Y tiene unos ojos...No se si son verdes o marrones,porque cambian de color cada día.Y está sonriendo todo el rato,es muy raro verla sin esa preciosa sonrisa".-dice,y no puedo evitar sonreír al escuchar eso.-Algo así dijo.

-¿Y tú sabías que Lisa y yo nos conocemos de hace bastante?

-No...Nunca nos habló de ti...Normalmente espera para presentarnos a sus amigos,porque ella siempre quiere asegurarse de todo,pero no se por qué no lo ha hecho aún contigo si parece que le caes tan bien.

-Oh...Creo que se lo que es.-digo poniendo los ojos en blancos.-Tu hermana no es la única que lo ha hecho.

-¿Por qué es?-pregunta con ganas.-¿No crees en Dios?

-Espera...Si no creyese en Dios,¿eso sería malo?O sea,¿a tu familia ya no le gustaría?

-No se...He tenido bastantes problemas hablando de este tema.-dice bajando la cabeza.

-Bueno,entonces dejemos de hablar de ello.-digo.-Después de que te conteste a la pregunta.

Lauren levanta la cabeza sonriendo,deseando que le diga lo que pienso.

-Creo en un Dios que ama a todo el mundo.Al que le da igual si una persona es judía,musulmana,cristiana,heterosexual o homosexual.-respondo.-El que acepta y quiere a cada persona por el simple hecho de serlo.

-Eso está bien.-dice.-Pero esperaba que me respondieses a la otra pregunta.

-Oh no,eso en su momento.-digo riendo.

Lauren se acaba el paquete de galletas que creo que eran Oreos y lo tira a la basura.Luego camina a mi lado y va por donde vine yo.Obviamente,la sigo,no voy a quedarme ahí sola como una idiota.Lauren se sienta en un banco que está al lado de una mesa enorme de madera.Me siento a su lado y la miro sonriendo.Ella me devuelve la mirada con una sonrisa tímida.

-¿Cuántos años tienes?-pregunto.

-16.-responde.-¿Tú?

-19.

-Tiene razón Lisa,ayer tus ojos eran marrones y hoy son verdes.-dice cambiando de tema totalmente.

-Depende de la luz y de mi estado de ánimo.Si hay menos luz y menos positivismo,son marrones,si hay más luz y más alegría,son verdes.

-Como mola...Los míos son marrones todo el rato.

-Pero son preciosos,como los de tu hermana.-digo sonriendo.-Por cierto,¿dónde está?

-Salió a comprar unas pastillas para ti,creo.-responde.-¿Qué tal te encuentras?

-Me duele la cabeza.-contesto encogiendo los hombros sin darle importancia.

Ambas oímos el ruido de las llaves metiéndose en la puerta y miramos como se abre.Entra Lisa con gafas de sol,el pelo recogido en una cola de caballo,unos pantalones vaqueros rotos,una camiseta negra y encima una camisa de cuadros negra y roja.Y así de simple esta perfecta.En la mano lleva una bolsita blanca,por la que se puede ver un poco lo que lleva dentro.Parece un paquete de aspirinas o algo así.