Guerra De Cielos - Citrus

Un Pasado De Infierno

Desde que tengo uso de la razón…

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                           

                                         

             

Siempre he sido entrenada por una única razón…

                                                       

                                                                                                               

                                                                                                                             

                                                                                   

 

Matar

 

 

 

Pero… a quien no..

 

 
E

sa estupida Guerra era algo por lo que hasta los más pequeños debían pelear.
 
 
Nunca me importaba eso, mientras eso ponía contento a todos, me dan igual eso.
 
Demonio: Eyy Yuzuko!
 
Una chica rubia de cabello rubio y ojos tan encantadores de color verde se fijo en el, que el sintió como un flechazo de fuego le atravesara el corazón, pero de la forma más reconfortante.
 
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Yuzu: si?
 
Demonio: Ehh, ahh, yo, yo, pues…
 
El demonio se había puesto tan nervioso y Yuzuko en seguida se dio cuenta.
 
Yuzu:* mmm, otro mas.. de verdad que odio esto..* - suspira – si no tienes nada que decirme, me largo.
 
En el momento en que se fue, el reacciono, y la rubia estaba en una esquina ocultándose de los demonios que la perseguían, estaba recargada a la pared apoyando un pie y sus manos cruzadas.
 
                                                                     
                                         
Desde que tengo uso de la razón, siempre a sido fácil enamorar a cualquiera, creo que es una de esas habilidades que nos dan que es aleatoria y única.
Era tan sencillo, solo con mi presencia, mi aura desata las hormonas de cualquier ser, sin importar que especie o animal sea, o que edad tiene o genero.
Aunque por una extraña razón las personas enamoradas no puede ser afectado.
 
Por eso, normalmente mis amigos me piden que los visite para ver si su pareja es fiel a ellos o algo haci. Por que si salen con otras la maldición funcionaria. Bueno.. yo le llamo maldición, pero mis amigas…
 
Himeko: Yuzu san, tu habilidades de demonio son asombrosas! – Dijo, estando ya en un restaurante.
 
Yuzu: si, por supuesto -dijo con sarcasmo – Lo digo en serio himeko, es la peor habilidad del mundo, no voy a saber quien esta conmigo por que le agrado o por que la maldición los afecta.
 
Himeko: No es una maldición, deja de decir eso.
 
Yuzu: Jo, te digo que lo es..
 
Himeko: Bueno, dime, cómo va tu entrenamiento? -Dijo con curiosidad.
 
Yuzu: Todo bien.. yo… derrote a Elen..
 
Himeko: Haaa?!! – Golpeo la mesa levantándose.
 
Yuzu: Baja la voz! – Dijo susurrando al ver la mirada de todos.
 
Himeko: Como que derrotaste a Elen, si el te gana por 300 años de batalla! – Dijo sentada susurrando.
 
Yuzu: Pues me duro 300 segundo derrotarle.
 
Himeko: Ala.. Lo digo en serio Yuzu san, tu eres la que rompe cada destino! Se supone que los hijos del Rey demonio deben de ser los mas fuertes, pero derrotaste con su guardaespaldas mas implacable.
 
Yuzu: Gracias – Dijo con una sonrisa avergonzada.
 
                                                                     
                                         
                           
Himeko era alguien que apareció de la nada cuando yo apenas podía caminar, no sabemos de donde viene, siempre fue muy reservada con eso, pero por alguna razón, no le afecta mi habilidad, por eso es una de las personas que mas aprecio, solo con muy pocas personas puedo ser yo misma, pero siento que necesito mas..
 
Todos nacimos del rey demonio, pero a los que le llaman “sus hijos” son los que los consienten mas, es lo mismo con Los Ángeles según escuchamos.
                                                       
                           
                                                                                   
                                                       
                                                                     
                                                       
             
                           
Un día, donde el sol ya no tocaba luz, y me encontraba en el lugar donde me vengo a relajar, para alejarme de todos, donde nadie sabe, llegue mas tarde de lo esperado, ya que duro mas el entrenamiento, me abrí paso ahí, sabiendo que por culpa del retraso iba a solo estar por unos minutos en vez de unas horas.
 
Pero sentí algo raro.. había una presencia, una presencia mas, una demoniaca, pero se sentía raro, me acerque sigilosamente y…
 
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Vean Miss Ángel and Miss Demon, ya que el personaje llamado Haki es.
 
 
Yuzu blando su mirada y la miro como si no pudiera respirar.
 
La chica de su edad, aunque parecía un poco más baja que ella, se quedo mirando a la chica y después de unos segundos después…
 
Yuzu: Waa!
 
Haki: Waaaa!
 
Yuzu: Ahhh!
 
Yuzu sonrojada se tropieza y cae de la isla flotante.
 
Yuzu sentía que estaba perdida pero, sintió que alguien le agarro de la mano.
 
Yuzu: Pero que..?!
 
 
Al voltear arriba se dio cuenta que la niña tenia unas alitas negras que la intentaba levantar para llevar arriba.
 
Yuzu: *Yo ni siquiera puedo controlar la materia oscura y ella sabe volar?*
 
La niña pelinegra logra llevarla y dejarla ahí y cuando la suelta respira agotada.
 
Yuzu: Cuan, cuantos años tienes?
 
Haki: So, Solo un siglo.. – Dijo ya recuperada.
 
Yuzu: Wow.. *Asi que ella tiene un año mas que yo*
 
Haki: O, oye como encontraste este lugar?
 
Dijo un tanto nerviosa.
 
Yuzu: Eh? Yo, Yo quería preguntarte lo mismo.. – Dijo bajando la voz cada vez mas, no entendía por que pero no le gustaba hacer cosas bruscas en su presencia,
 
Haki: Pero.. pero si siempre he venido aquí, es mi lugar secreto.
 
Yuzu: Pues, eso yo también creia.
 
Haki por accidente hace un pequeño puchero de no entender, y eso sonroja a la joven rubia.
 
Yuzu: Disculpa, tu nombre?
 
Haki: Eh?! Yo ehh.. Tu primero.
 
Yuzu: Yuzuko, y tu? – Dijo al instante por estar inmotivada por ella.
 
Haki: Me, me llamo Haki.
 
 
 
Después de eso, nosotras nos enteramos que teníamos cosas poco en común pero eso nos atraía curiosidad, teníamos solo 100 años después de todo (10 años para que entiendan)
 
Y Cada vez crecíamos mas… Haki era alguien que no le afectaba mi hechizo, pero sabia que en ambas creía algo que jamás experimentamos, yo y ella nos reuníamos a la isla donde era nuestro escondite, yo peleaba feroz mente en las batallas, ya que quería explorar el mundo con ella, que no quisiera ella pelear era una de mis razones, aunque ella también sabía que detestaba eso, por eso también se unió a las líneas del frente.
 
Se la presente a Himeko, y ella se le tomaba bromas diciendo, que éramos pareja y cuando iban a casarse. Siempre nos poníamos rojas, y yo la protegía de cualquiera. Puede que parezca en algunas ocasiones feas, pero siempre era un poco llorona con respecto a si se pone sentimental.
 
Aunque me pegaba un poco al querer hacerle bromas eroticas.
 
Cuando los años décadas, siglos pasaban, no importaba, ya que sentíamos que solo era un instante, un instante en que nuestras miradas percibían aquella chisma, un instante se siente, cuando nos comenzamos a enamorar.
 
 
             
             
Cuando nuestra apariencia se volvió de adolescentes, nos reunimos una vez, en cuando el ultimo rayo de sol iba a darse fin, no lo resistí, y ella no se negó, mas bien me quiso atraer, me enrede en su mirada, y ella en mis labios.
 
A paso lento escuchando levemente las pisadas que se acercaban, sonrojándonos por el sol y el calor.
 
Nuestras cinturas, nuestro pecho y nuestras piernas estaban pegadas, nuestras bocas estaban listas para juntarse y nuestros ojos se miraban mutuamente y después a los labios a cada centímetro que restaban, para asegurarse si la otra no se retracta.
 
Sin serrar los ojos estando con la mirada fija pero sintiendo que se sierran, nos besamos y cuando nos separamos no habíamos cerrado los ojos, pero a la siguiente, lo hicimos, y eran torpes, pero quien nos podía culpar, era la primera vez que hacíamos algo asi.
 
Paso no sé cuánto tiempo, años décadas o siglos, no se, pero cuando más pasaban, más se amaban, era embriagador, y eterno, un día se atoraron en una cueva, cuando ambas se escaparon para verse, y una tormenta apareció, quedaron  atrapadas pero pudieron sobrevivir, bromeaban eso de que iba a ser una prueba de ellas siendo esposas.
 
Haki: Oye, pero si vamos hacer esos, yo seré el hombre~ Dijo de broma
 
Yuzu: Que?! Yo seria mas capacitada para eso - dijo en puchero.
 
Haki: Si como no, por que lo creerías?
 
Yuzu: Simple, yo soy la mas fuerte, responsable y dominante de esta relación- Dijo con orgullo.
 
Haki: ohh en serio?~
 
Yuzu:  sip, no lo puedes negar, yo domino en..
 
Pero es tumbada por la chica más alta y sentándose en sus caderas.
 
Haki: Mmm en serio tu dominas?~ -Juguetona.
 
Yuzu: Yo, yo – Ya estaba nerviosa y como tomate hasta la frente.
 
Haki: Por que siempre pensé que era yo la reina no? La que domina – Dijo aprisionando sus muñecas acercándose peligrosamente.
 
Yuzu: Ha, Haki…
 
La pelinegra estaba a nada de besarla y la rubia cierra sus ojos ansiosa por su acto.
 
Haki: Gane, te exitaste – Dijo poniéndole un dedo en sus labios y. No sonrisa malvada.
 
Yuzu: Eres mala~ Dijo quejándose.
 
Haki: Que esperabas, soy un demonio – Dijo aun quitándose de encima – Pero sabes que, no creo que el hombre signifique ser el dominante y El Fuerte.
 
Yuzu: Asiente – Es verdad, creo que no es necesario el papel de un hombre para una relación, por que se dice eso entonces?
 
Haki: Mmm – Se ruboriza al tener la respuesta- Por que, es el quien le da a la mujer para tener un hijo?
 
Yuzu estuvo igual que Haki pero para quitar el silencio bromea..
 
Yuzu: Eso quiere decir que me quieres embarazar? – Dijo burlándose y la ojo morado voltea la mirada.
 
Haki: Ta, tal vez eso quiera.
 
Eso sorprendió a la ojo verde. Hubo un silencio y antes de que Haki hablara para arrepentirse de lo que dijo..
 
Yuzu: Ta, tal vez no me queje – Volteó la mayor y vio la mirada avergonzada de Yuzu que miraba sus pies.
 
Haki: Tal vez quiera un hijo – Se acercó a su lado la rodeó con sus brazos.
 
Yuzu: Tal vez quiera vivir en el mundo humano – se acurruco en el hombro de su chica.
 
Haki: Tal vez quiera una casa lejos de toda la guerra.
 
Yuzu: Tal vez eso me encantaría – Dijo mirándola a los ojos.
 
Haki: Tal vez quiera besarte – rodeando su cintura.
 
Yuzu: Tal vez eso quiera – dijo enredándose en su cabello y cuello.
 
Haki: Tal vez?- Estando a corta distancia.
 
Yuzu: Tal vez…
 
Se besaron y solo podía iluminar la fogata, pero presentían que el calor provenía de otra cosa, lo que era solo un juego, se convirtió en algo más profundo.
 
Es ahí, donde hicieron el amor…
 
 
                                                                     
                                                                     
                                                       
                                         
 
Yuzu: Nos queríamos más, y no importaba cuanto pase, nosotras no nos aburríamos como ustedes los humanos, era más profundo a cada día que pasaba. Pero…
 
 
Eleth: Pero?… -Dijo con temor.
 
Yuzu: Una vez, estuvimos en una batalla, y en un momento nos separamos peleando con Los Ángeles, escuche que había alguien que estaba peleando con la mujer que amaba, y cuando llegué….
 
                                                       
                                                       
                                                                     
             

No era demasiado tarde, murió en frente de mis ojos, por….

 

Mei

 

 
E

leth se cubrió la boca, enterarse de que el amor de tu vida muere, es una cosa, pero presenciarlo de esa manera, era algo horrible.
 
 
Yuzu: Ella y yo nos odiamos desde entonces, le le le tengo mucha rabia – Dijo enfurecida pero se calma un poco – No recordamos cuantos siglos o décadas pasamos juntas, pero cada año cada mes, cada semana, es un hoyo en mi corazón, difícil de olvidar o pasar desapercibido.
 
Eleth: cuanto tiempo van?
 
Yuzu: …
 
 
 
                                         
 
                           

2000 años

 
 

            
 
Eleth se quedó atónito, tanto tiempo?
 
Yuzu: A veces, me e preguntado si puedo seguir aun con mi vida, pero luego recuerdo esa furia como si fuera recién el evento, y se me quita la idea de arrebatarme la vida.
 
Eleth: ….
 
Hubo un largo tiempo que se quedaron en silencio, Eleth debía de procesarlo. Pero había una respuesta que tenia que escuchar. Aunque eso significará adentrarse mas….
 
 
Eleth: tu, de, de verdad mataste, a tantos..?
 
Hubo un corto tiempo pero..
 
Yuzu: Si.
 
Eleth quería preguntar por que, pero no salían palabras.
 
Yuzu: La razón – la rubia había notado su silencio haci que sabia que quería preguntar – Es que, solo he matado, a todos Los Ángeles que estaban presentes, todos los que habían matado sin razón a demonios de forma horrible, quise equilibrarlo.
Hace un milenio, ocurrió una masacre, queríamos negociar para que liberen a nuestros compañeros, pero cuando llegamos, presenciamos la muerte de ellos de forma traumática, los eliminaron con una bola de luz incapaz de salir.
 
Vi los rostros de mis camaradas, ver el sufrimiento, asi que tengo profundo odio hacia Los Ángeles, voy a eliminar a cada uno de ellos.
 
No quedara ni uno! – Dijo enojada derramando lagrimas – Hare el mundo donde Haki quería que viviéramos! -Dijo apretando sus puños y Eleth veía con tristeza – Por que no me va a importar ya nada, esta mas que claro que me voy al infierno, y ella al cielo, por que una mujer como ella no podría ser acompañada por una mujer tan despiadada como yo!
 
Siente unos brazos que la rodean, Eleth lloraba en silencio y la abrazo para que se reconfortara, para decirle que no estaba solo.
 
Eleth: Te acompañare entonces, no es por que vayas a salvar mi reino, si no por que ya entiendo por lo que pasas.
 
Yuzu: Eleth, se realista tu no puedes…
 
Eleth: Estoy siendo realista, lo digo en serio, por ahora vayamos a dormir.
 
Se quedan abrazados por un tiempo y se duermen, pero Eleth al verla dormir y mirar la luna por la ventana puso una mirada un poco triste.
 
Eleth: Si… debo ser realista… ya lo tengo bastante claro que no tengo oportunidad… porque tu corazón ya a sido robado, no?