☕Capítulo 16

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El pelinegro caminaba por los pasillos de la escuela junto a su Team, estos hablaban de una próxima fiesta que se hará en su casa.

Este no podía entender del todo como se habían recuperado tan rápido de la pérdida de alguien del Team, era como si Tweek no hubiera sido tan importante para ellos como lo fue para él pero claro, esos eran pensamientos posiblemente falsos de lo que realmente pensaban sus amigos.

-chicos, voy a comprar algo a la cafetería- hablo con un tono de voz serio y melancólico.

-De acuerdo, te estaremos esperando en el salón de clases-.

Tal y como dijo Craig este se dirigió a la cafetería que a esa hora de la mañana se encontraba vacía.

Compró una lata de café en una de las máquinas expendedoras y se sentó en una de las mesas.

-Cariño... tengo tu café- Al fin el de ojos verdes estaba sonriendo.

Frente a él se sentó Tweek también con una sonrisa y aceptó el café el cual no demoro en abrirlo y beber de este.

-Aún no puedo entender cómo es que puedes seguir ingiriendo alimentos estando muerto- Dijo con un tono de voz divertido mientras observaba a su rubio con cariño.

-Lo sé, las reglas de esto son extrañas- Dijo Tweek para después agarrar la mano de Craig.

-meses atrás-

-Hasta que los encuentro, los llevó buscando por todos lados- El tono de Craig era claramente molesto pero este se calmo de inmediato.

Dejó el libro que los góticos le prestaron en el suelo y se sentó al lado de estos esperando que ningún profesor se le ocurra ir detrás de la escuela ya que si veía que estaba cerca de los góticos probablemente pensaría que estaría fumando o algo peor cosa que en la escuela estaba prohibido.

-¿Te funcionó?- El tono de voz de Henrietta no demostraba mucho interés.

-¿Porque creen que estoy aquí? Mi novio se me apareció en su propio funeral pero este tenía una apariencia espantosa, cuernos, cola ¿patas de animal? No se parecía a mi chico, ni siquiera se si era mi Tweek- reclamo este.

-entonces si funciono...esto es asombroso- a pesar de que la expresión de Pete era algo seria a la vista de los góticos este se veía realmente emocionado.

-¿Asombroso? Invoque a un demonio, él ni siquiera debería ser uno, es el mejor chico que eh conocido- Craig sobo su rostro con frustración, aun le costaba creer todo lo que sucedía.

-Creeme, no te gustaría que sea un ángel, estos son seres peores que los demonios- Dijo con desagrado el de mechón rojo pero lo único que recibió de Craig fue un fulmino con la mirada.

-Explicame que esta pasando-

-Bien pero dejate de actuar como un estúpido conformista depresivo- soltó un suspiro -Obviamente invocaste a un demonio, un demonio que es Tweek, suena cursi y típico de película pero este no se irá si no concedes un deseo de él, se supone que Satan les da una oportunidad a los demonios invocados para podes descansar en paz o liberarlos de sus pecados, depende demasiado pero que cuesten distintos tipos de demonios, el que te hice invocar no debería ser poderoso o algo parecido, debería ser completamente ordinario, sería más bien como un espíritu-

-Claro y los espíritus tienen patas de animal- Craig se cruzó de brazos, a pesar de que estaba obligado a creerle aún lo sentía como una mentira.

-Pueden tener distintas formas, incluso es posible que la apariencia que les dan sean como castigo a sus pecados, agradece que lo vez con patas de animal y no con una apariencia monstruosa y ahora vete de aquí conformista, te dije ya lo que debes hacer-

Los demás góticos habían ignorado toda la conversación de estos dos, estaban más metidos en sus poemas.

-Bien, gracias Pete-

-Actualidad-

-Aún me cuesta creer que me aceptaste a pesar de lo horrible que me veo- Dijo Tweek acariciando la mano de su novio, cuando estaba vivo no podía hacer eso por los nervios que le daban.

-Lo admito, me costó aceptarlo pero sigues siendo mi Tweek, no podría rechazarte- Una leve sonrisa se formó en su rostro -Cariño ¿aún no me dirás cuales fueron tus pecados como para que termines en el infierno-

El cuerpo de Tweek se tenso y lo miró en silencio por unos segundos para después desviar su mirada y negar con la cabeza, no tenía pensado decirle pues no quería arruinar nada y mucho menos quería saber que este se entregó a los brazos de otro chico.

-Lo lamento Craig pero no tengo permitido decirlo- Lo volvió a mirar y le sonrió para después sentarse a su lado y abrazarlo.

-Lo entiendo cariño, no importa, te voy a seguir queriendo sin importar cual sea aquel pecado- Correspondió su abrazo comenzando a acariciar su cabello.

Ambos ya se habían perdonado aquellas peleas y pensamientos que tuvieron cuando Tweek aún estaba vivo y para ellos fue la mejor desicion que tuvieron pues ahora podían amarse sin ningún tipo de problema, ningún problema sin contar el signo que quedó en el suelo de la habitación de Craig cuando este invoco a Tweek, ese problema decidieron ocultarlo con una alfombra.

Lo que no tenía cuenta Tweek es que este tenía un límite para estar con Craig, este no era corto pero a pesar de eso no quería pensar en qué algún día tendía que dejarlo y claro, no podría descansar en paz porque ni siquiera se acordaba de aquel deseo que tanto deseaba en vida, cuando su tiempo se agote tendría que volver al infierno.





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Espero se encuentren bien y que pasen un buen año nuevo, nos vemos en el próximo capítulo.

infierno / Creek Donde viven las historias. Descúbrelo ahora