give me a kiss ☾︎ hyunmin

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En la casa no había nadie más que Seungmin, acostado en su habitación a oscuras, mirando el techo y pensando en que fue lo que hizo.

En serio le gustó Hyunjin como para hacer eso, pero en qué estaba pensando, claramente en nada porque su mente solo podía mostrarle los labios de Hyunjin y sus ojos achicandose cada que sonríe.

No sabía que sería tan fácil con Hyunjin, es decir hizo cosas así varias veces pero siempre fue con chicas, y no es que fuera un heterosexual negado a la realidad, él era abiertamente bisexual pero jamás le había atraído lo suficiente un hombre como para intentar algo hasta ahora.

Creyó que Hyunjin actuaba su personalidad en la escuela, normalmente los chicos bonitos de esa escuela fingen una personalidad inocente y atontada. Tal cual Hyunjin solo que sin fingir.

Quería salir a pasear con él y hablar durante horas pero también quería tenerlo debajo de él gimiendo su nombre y gritando por más.

Y ni hablar de besarlo, quería que los labios de Hyunjin fueran de su propiedad, que Hyunjin fuera su propiedad.

Y con ese pensamiento se quedó profundamente dormido.

-¡Seungmin!- Gritó su amigo Felix quien se acercaba corriendo hasta él y lo abrazaba cariñosamente.

-Lix ¿que pasa?¿Te molestaron?

Felix al ser extranjero lo molestaban mucho y cualquier cosa que le gustara o tuviera para el resto era un defecto del cual pueden burlarse, eso a Seungmin le molestaba más y por eso la mayoría de veces estaba en peleas.

Pero esta vez el menor negó y sonrió.

-Cuentame que pasó ayer.-Refregó su cara contra el brazo de Seungmin como si fuera un gatito.

-No aquí y no ahora.-Escuchó a Felix quejarse de que jamás le quería contar nada de sus "conquistas" mientras sacudía su brazo pero en cuanto vió a Hyunjin pasar le dijo a su amigo que le diera un momento.

Caminó despacio hasta acercarse a Hyunjin lo suficiente para poder tirar de su brazo y llevárselo dentro de un salón vacío.

-Hola, Seungmin.-Evitaba mirarlo a los ojos y sus piernas ya se sentían como gelatina.

-Mirame a los ojos, Hyunjin.-Lentamente el pelinegro levantó su vista hasta fijarse en los ojos de Seungmin.

-Ahora, dame un beso.-Hyunjin negó con la cabeza.-¿Por qué no?

-Nos pueden ver.-Seungmin no veía eso como una razón válida para que no lo bese.

-Hazlo.-El más alto suspiro y tímidamente juntó sus labios a los del contrario.

Lamió los labios de Hyunjin, repasando su grosor y disfrutandolo, imponiendo un poco de fuerza con su lengua para que abra su labios y poder sentir su gusto una vez más, un gusto del que fácilmente podría volverse adicto.

Introdujo su lengua y fue directo a la del pelinegro para juguetear con él, Hyunjin se sentía tímido respecto a eso pero se dejó ser y quiso disfrutarlo también, intentando seguirle la corriente, chocando sus lengua e investigando la boca contraria.

Esta vez Seungmin se apiadó de él y lo dejó ir más rápido pero esta vez él que quería más era Hyunjin, quiso acercarse una vez más pero el castaño le recordó el lugar donde se encontraban y que tenían que ir a clases en poco tiempo.

Primero salió Hyunjin del aula para irse a su clase, Seungmin se quedó en ese salón unos diez minutos más hasta que se dignó a ir a clases.