ALL OF ME [Chris Evans]

Extra VII. La Tormenta

Advertencias⚠️: Sí, tengan a la mano su caja de pañuelos

Chris no se reconocía. 

Por primera vez en mucho tiempo, de verdad no lo hacía. No pensaba, no era ese hombre racional de cabeza fría, que a menudo salía cuando había que enfrentar situaciones difíciles. Tampoco era fuerte, no se sentía capaz de darle ánimos a nadie y mucho menos de pensar positivamente. Simplemente no podía. 

Todo su mundo se había vuelto oscuro en un segundo, al soltar la mano de Victoria; tuvo que dejarla ir y en el proceso se transformó en un niño asustado. Su cabeza se llenó de miedo, igual que su corazón. 

El actor no reaccionaba, no lo hizo mientras Robert intentaba contagiarle un poco de esa fe que le pidió tener, mucho menos lo logró cuando sintió las manos de su madre sobre su espalda. Seguía estancado en el momento en que todo estalló, lo único que podía ver eran las imágenes de Victoria bañada en sangre, escuchaba su llanto desgarrador y las miles de suplicas... el cómo rogó a sus bebés que por favor no la dejaran. 

—¿Tienen novedades? ¿Qué ha dicho el médico? — preguntó Lisa en un susurro. 

Inconscientemente, Chris volvió a mirarse las mangas del jersey gris que llevaba puesto. Las manchas negruzcas de la sangre ya seca lo aturdieron por completo, el peso de la realidad le cayó encima con más fuerza que antes y Downey lo notó. 

—No sabemos nada — respondió el castaño, sabiendo que su mejor amigo no podía. 

Escucharlo, hizo que Chris se replantease con más desesperación el largo período de tiempo que llevaban esperando. 

—No puedo más — se levantó de la banca donde estaba sentado y sin que nadie pudiera detenerlo, se acercó a la señorita que se encontraba en el cubículo de la recepción, detrás de la computadora. 

Scott le siguió de cerca, sabiendo que era mala idea dejarlo solo con la bomba emocional que cargaba en el pecho. 

—Disculpe — la morocha lo miró, sintiéndose en extremo sorprendida al reconocer su identidad y poco después, al reparar el estado deplorable de su atuendo — Hola, se llevaron a mi esposa hace bastante rato y nadie me dice nada, ¿Usted podría darme alguna información?