100 Días Para Enamorarlo.

Día 3.

Parte 2/2

Me acerque a aquellos chicos con cigarrillos y vasos en sus manos, pude notar como Ethan tenía moretones en alguno de sus brazos, la cara un poco hinchada y gran parte de esta cubierta de sangre al igual que su ropa.

— Ethan.— dije para que me mirara.

Logre llamar su atención pero al igual que él, los demás también miraron para luego dejar de empujar a Ethan y acercarse a mí. Un chico grande pelirrojo se acerco haciendo que retrocediera unos pasos atrás, este mismo se acerco a Ethan, lo tomo por el brazo y lo empujo hacia mí.

— Mira Ethan, otra de tus perras.— dice y todos sus amigos ríen.

El chico volvió a empujar a Ethan haciendo que cayera sobre mí, lo afirme para que no cayéramos a la arena pero apenas me lo podía, pesaba demasiado para, mis rodillas flexionaron un poco y Ethan trato de sostenerse sobre si mismo.

— Hey.— dice alargando la "e".— Cassie, pensé que no nos veríamos.— dice susurrando con una sonrisa en su rostro ensangrentado.

— ¿Estas bien?— le pregunté sacándole el cabello que le molestaba en la cara.

— Pues... — trata de decir cuando uno de los chicos lo patea nuevamente.

— ¡Idiota! ¿Qué te pasa?— grité y me puse delante de Ethan.

Miré a cada uno de los chicos, la luz de la luna era la única que me ayudaba a verles sus caras y ropa, al parecer Ethan igual los había golpeado a pesar de estar ebrio, ya que uno de ellos tenía un corte con sangre bajo la ceja, otro se le notaba cada vez más la hinchazón de su ojo y el pelirrojo quien tenia sangre en la mitad de su rostro pero a diferencia de los demás no sabia si la sangre era suya o la de Ethan.

— Imbeciles.— susurré.

— Hey niñita.— dice uno de los chicos.— Déjame explicarte algo...— pude verlo de más cerca y el corte de la ceja pude notar que era profundo.— Este marica se acostó con mi hermana siendo que le dije que no lo hiciera.— dijo apuntándolo y sentí la risa de Ethan tras de mi.— ¿Es gracioso imbécil?— le patea las costillas a un lado de mi que logre sentir un poco de esa patada.— Los amigos no se acuestan con las hermanas.— dice y vuelve a patearlo.

— Escucha.— le dije volviendo a ponerme frente a él.— Soy de las personas que le gusta arreglar los problemas con palabras y no con golpes.— intente sonreír pero de lo nerviosa que estaba mi boca tiritaba.— ¿Porqué mejor no hablan sobre esto en un mejor momento?¿Tal vez sin golpes y cuando él este sobrio? — dije apuntando a Ethan.

— ¿Como dijiste que te llamabas?— pregunta el pelirrojo.

— No he dicho mi nombre.— dije y Ethan me mira riendo.

— Su nombre es Cassie.— responde por mí.

— Cassie.— dice el pelirrojo acercándose con una sonrisa.— Te advierto que nosotros golpearemos a este imbécil con o sin ti.— hace un gesto y su amigo el callado me empuja con su pecho.— Te aconsejo que te vayas para que no veas todo lo que le haremos.— vuelve a empujarme.

— Llamaré a la policía.— dije rápido.

— No soy de golpear mujeres pero si sigues molestando te golpearé...— me mira enojado.

— Hazlo y tendrás una demanda.— levante un poco mis pies para verme más alta.

— Ni siquiera sabes mi nombre.— responde con una sonrisa torcida.

— Yo sí, te llamas Robert.— dice Ethan riendo nuevamente y sentándose en la arena.

— ¡Cállate! — grita el pelirrojo y lo golpea en la cara para que luego vuelva a caer sobre la arena.— Mira niña solo lárgate.— dice ya un poco cansado.

Me empujó con una sola mano haciendo que dé unos cuatros pasos atrás. Camine lento alejándome de ellos sin dejar de mirarlos, Ethan me miro y trato de sonreír pero uno de los chicos con el cabello castaño volvió a golpearlo sin que él se diera cuenta y fue cuando corrí hacia ellos golpeando al que se llamaba Robert quien era el que más cerca estaba de Ethan. El chico era alto, tenía músculos y era imposible, trate de subir a su espalda y comencé a golpearlo por detrás en la cabeza, uno de sus amigos trato de agarrarme pero tome la piel de este haciendo que gritara y en el mismo instante sentí como el codo de Robert chocaba en mi boca.

Caí a la arena junto a Ethan y pude ver como él se acercaba a mí preocupado ya un poco menos enrio y sin sonrisa en su rostro. Tomo mi cara despacio y de pronto sentí como Robert nuevamente me levantaba afirmando mis brazos para que no hiciera nada.

— ¡Te dije que te fueras! — gritó.

Otra vez caí al piso y tomaron a Ethan por la espalda otra vez para sujetarlo y golpearlo, estaba paralizada, jamás me habían golpeado, lo más cerca de una pelea había sido en jardín de niños en donde una chica me había quitado mi juguete y yo le había jalado el cabello. Este no era así, estaba metida en un lío, sentía como mi cuerpo me dolía y podía sentir como mi labio inferior sangraba.

Unos minutos más tarde, Ethan estaba sangrando junto a su camisa manchada en sangre y casi sin poder moverse tirado en la fría arena. Los idiotas ya se habían ido, me acerque lentamente a Ethan y acaricie su cabello.

— Llamaré una ambulancia.— dije sacando lentamente mi teléfono, no quería que él notara como mi cuerpo estaba aún temblando.

— Solo llévame a casa.— dijo tomando mi mano y bloqueando mi celular.— Llama a mi hermano, dile que estas en la playa conmigo.— susurra.— Búscalo en mis contactos, su nombre es Grayson.— dice mostrando su pantalón en el que se podía ver la sobra del celular dentro de su bolsillo derecho.

Desbloquee el celular ya que este no tenía contraseña ni nada, busqué en sus contactos el nombre que me había dicho y llamé. Luego de unos diez o quince minutos más tarde, un chico igual a Ethan se acercaba corriendo.

— No... no quis... que llamara... a... a una... una ambulancia.— tartamudee.

— ¿Sabes quienes fueron?— pregunta el chico y yo niego con mi cabeza.

— Solo sé que uno de ellos era pelirrojo llamado Robert, otro era cast...— estaba temblando y tartamudeando, estaba al lado de otro Ethan y al menos yo no sabía que tenia un hermano tan idéntico.

— Los universitarios, el chico de la hermana australiana.— dice Ethan y su hermano hace un gesto de decepción para luego ayudar a levantar a Ethan.

— Lo siento tanto...— dije nerviosa.— No pude hacer nada...

— La golpearon Gray.— dice Ethan y el chico me mira sorprendido.

— ¿Estas bien?¿Donde te golpearon?— pregunta preocupado.

— No, yo estoy bien.— dije mirando a Ethan.— Él necesita un hospital.

— Ha estado peor.— lo mira y comienza a caminar lento, mientras que Ethan con la ayuda de su hermano caminaba ya un poco más normal como si los golpes no hubieran sido duros.— ¿Necesitas ir algún lado? Tengo un auto, te puedo llevar.

— No, estoy bien. Gracias.

Los miré extrañada ya que era como si les pasara seguido. Me detuve a observar como se iban mientras que el chico llamado Gray de vez en cuando miraba hacia mí hasta que desaparecieron al cabo de unos minutos.

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