100 Días Para Enamorarlo.

Día 5

Domingo, día familiar en el centro comercial. Habíamos estado toda la mañana entrando a tiendas de zapatos y mamá ya se había comprado dos pares. Ya estaba cansada y aburrida. Papá se había ido a una tienda de música clásica y con mamá entramos a una tienda de vestidos elegantes.

— No me gusta el rojo mamá.— dije quitándole el vestido de la mano y devolviéndolo a su lugar.

— Cassie, a ti no te gusta nada.— rodeó los ojos enojada y volvió a buscar otros vestidos.

— Claro que si me gustan, pero sólo lo que yo elijo.— dije y me senté en uno de los sillones de la tienda.— Pero... ¿me puedes explicar que hacemos buscando vestidos?

— Tú tía Sally se casara en unas semanas y quiero que te veas linda.— sonríe emocionada.

— ¿Porqué no me lo habías dicho?

— No lo sé, se me había olvidado.— dijo como si nada.

— ¿Cuándo es?

— Hmm...— me mira.— Es el sábado, serian como seis días para encontrar algún vestido.— camina al otro lado de la tienda.

— Me dijiste que en unas semanas, mamá.— dije levantándome del sillón y siguiéndola.

— Hija, no me doy cuenta de los días.

Comencé a buscar algún vestido que me pareciera lindo, habían unos que tenían escote y otros que se podía ver el corte en uno de los lados, tome varios de estos y diferentes colores y camine hacia mamá en busca de su aprobación.

— En primer lugar, el color blanco no se puede, la novia es la única que puede ir vestida de ese color...— me lo quita y lo devuelve a su lugar.— Segundo, es una boda no un funeral...— me quita el vestido negro de las manos.— Y este...— mira el vestido azul marino en mis manos.— Pruébate ese, quiero verte con el.

Sin decirle nada para no llevarle la contraria, camine a los probadores y me puse el vestido azul marino con escote y corte en la pierna derecha. Me miré al espejo y no sabía que decir, aún estaba con los pantalones puestos entonces no combinaba en nada.

— ¡Es hermoso! — dice ella cuando salí a mostrárselo para luego buscar con su mirada a papá.— Iré a buscar a tu padre, quédate aquí y no te lo quites.— dice amenazando.

Miré unos segundos a la entrada de la tienda y pude ver como Ethan, sus padres, su hermano y mi padre entraban a la misma tienda. Él traía unos lentes de sol y a si lado se encontraba Grayson mirando su celular. En ese momento se les acerca mi madre emocionada y corrí nuevamente al probador para quitarme el vestido.

— Cassie...— dice mi madre desde fuera del probador.— Unos amigos de tu padre quieren conocerte.

«Mierda.» pensé.

— Me estoy quitando el vestido mamá.— dije sacándolo rápidamente.

— Cassie, quiero la aprobación de tu padre así que vuelve a ponértelo y sal de ahí.— dice ella enojada del otro lado.

Bufé e intente darme el valor suficiente para poder salir de ese probador. Pude notar como mi cara se sonrojaba cada vez mas y salí rápidamente sonriendo avergonzada. Ethan me quedo mirando y soltó una pequeña risa seguido por un movimiento para que su hermano dejara de mirar su celular y me viera.

— Cassie linda quiero presentarte al señor y la señora Dolan, estos son sus hijos...— los mira para que ellos digan sus nombres.

— Ethan y Grayson.— dice su madre.

— Este es el vestido que quería que vieras mi amor.— le dice mi madre a mi padre y él solo asiente con su cabeza sonriendo.— Ahora puedes ir a vestirte.— dice ella y volviendo a mirar a la familia Dolan.