❝ ¡Fight! ❞
Hace unos días, Sadie y Millie tuvieron una pequeña pelea por culpa de una estupidez: Quien iba a la reunión de padres.
¡Era sumamente aburrida! Y más si trataba sobre la clase avanzada de Jason, sinceramente ninguna de las dos quería volver ahí y hablar con los padres millonarios e inteligentes, con suerte Sadie y Millie lograban que Michael se coloque sus pantalones.
Sin duda Sadie le había dicho muchas cosas que hirieron a Millie, y peor aún, Millie era muy dramática. En serio. La castaña había ignorado por unos días a Sadie y ella no sabía que hacer ya que sin su esposa, Sadie no vivía.
Y una noche normal, durmiendo en el sofá por cierto, la pelirroja se puso a imaginar en que comería mañana, digo, en cómo hacer para que Millie le vuelva a hablar. Lo pensó un poco y la forma más romántica era volver a conquistarla, así como una vez lo hizo cuando era joven, pero no pensaba en volver a derramar una bebida encima suyo.
¿O si?
Nah.
Bueno es de Sadie de quien hablamos.
Esperemos no preocuparnos.
Continuando con el plan de Sadie, ella necesitaría sin duda la ayuda de sus tres hijos, quienes al principio no accedieron ya que no querían meterse en asuntos de ellas, pero al ver que incluía dinero a parte dijeron que si. Definitivamente si.
— Okay, tu plan es volver a conquistar a Mamá. —hablaba Jason frente a un pizarrón donde idearían su plan.— ¿Que tienes en mente?
— ¿Que tengo en mente? —sus tres hijos asintieron.— Bueno... ahora mismo tengo en mente en por fin volver a mi preciosa cama mientras tomo helado y veo mi novela-
— ¡Mamá concéntrate!
— ¿Que? —los miró incrédula.— ¿Nunca vieron novelas latinoamericanas? María Juana García, ¡no te vayas con ese hombre! —imitó.
— Ahora entiendo porque duermes en el sofá.
Sadie rodó los ojos.— Bueno, ¿vienes a criticarme o ayudarme?
— Depende del dinero..
— Idiota. —Jason recibió un golpe por parte de su hermana.— Si eres amable y la ayudas recibirás más dinero, inteligente. No se como tienes todas esas medallas de cerebrito. —susurró.
— Oh.
— Si saben que estoy a su lado, ¿no?
— Bueno ya. Concéntrense.
— ¡tengo una idea! —dijo Sadie.
[...]
— ¡Pum pum! ¡Tururuntuntun! ¡Pum pum! ¡Turururuntuntun! ¡Pum pum! —Una melodía salía del piano de Jason mientras que sus dos hermanos, incluido él, estaban vestidos como la prehistoria.
— ¡He aquí damisela mía! Me ves luchando por tu amor, crucé lagos, volcanes, ¡pelee con dragones para venir a verte! Y espero que tu amor vuelva a ser mío, porque te amo.
[...]
— Nada que tenga que ver con tus novelas de amor raro. —Dijo Jason quitando a su mamá de su burbuja.
— Arruinas mis planes. ¡Quítenlo de aquí caballeros!
— ¿Sabes que? Me voy por mi cuenta, contigo no se puede. —Su hijo tiró el pincel que tenía para el pizarrón al suelo y salió de la habitación suspirando enojado.
— Okay ya fue el cerebrito, ahora me toca a mi. Y tengo una mejor idea.
[...]
— Y la última razón por la que debes perdonarme es por te amo, Millie. —dijo Sadie dejando los papelitos a un lado.— ¿Me perdonas?
— ¡Si, si!
— ¡Gracias! ¡GRACIAS! —un lindo beso ocurrió. — ¿qué dices si ahora vamos con Casey a comprarle lo que ella quiere? Fue ella la que me ayudó con su increíble idea. Le debemos comprar todo lo que quiera.
Todo.
Todo.
[...]
— Eso no va a pasar.
— Bueno me voy. —salió de la habitación dejando a Michael y Sadie solos.— Bueno... ¿ideas?
— Si.
— Dime.
[...]
— ¡Michael! ¡Michael! ¡Michael! —gritaban sus madres mientras entraban a su habitación con un enorme pote de helado.— Como tu idea funcionó te trajimos tres kilos de helado.
Michael ni siquiera pensó en un idea.
Él solo pensó en helado.
[...]
— ¡Menos!
— Entonces no se. —suspiró.— pídele perdón y ya. Tanto drama. —salió de la habitación.
[...]
— Millie.
— Sadie.
—Tenemos que hablar. —Dijeron al mismo tiempo.
— Tu primero. —dijo la pelirroja.
— Okay... quería decirte que lo siento por muchas cosas, he estado estresada últimamente y tus palabras colmaron el vaso así que actúe de forma dramática. Y se que no excusa para nada, pero te amo y quiero que vuelvas a la habitación conmigo.
— Wow.. eso.. yo solo te traje un anillo de caramelo. —quitó de su bolsillo y colocó el anillo en la mano de su esposa.
— Te extrañe mucho Sadie. —la abrazó fuertemente mientras la pelirroja festejaba en su interior, ¡ella volverá a ver sus novelas en su camita!
— ¡lo lograste, mamá! —sus tres hijos entraron a la habitación con unas enormes sonrisas.— siempre creímos en ti.
— es parte de la amabilidad, ¿no? —susurró Jason cerca de Casey, quien asintió.
— Mamá, nos debes 20 dólares a cada uno. —dijo Mike.— 20 D.o.l.a.r.e.s.
— ¿por qué les debes? —preguntó Millie rompiendo el abrazo.
— Ni idea. —dijo Sadie mirando amenazante a sus hijos.
— ¡Mamá Sadie no sabía cómo disculparse contigo y recurrió a nosotros con dinero y le dimos muchas ideas y gracias a nosotros ella está bien contigo!—dijo Michael rápidamente.— ¡CORRAN!
— ¡Pequeño chismoso mentiroso ven aquí!
— ¡Mami ayúdameeeee!
VOLVÍ.
Aquí les dejo un pequeño regalito por navidad, por Año Nuevo, por reyes y por estar inactiva mucho tiempo.
Disfruten.
BYE BYE.
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¡𝑴𝒂𝒅𝒓𝒆𝒔 𝒆𝒏 𝒂𝒑𝒖𝒓𝒐𝒔!
Random❥︎| Donde Sadie y Millie están desesperadas por ser las mejores madres para sus tres hijos. ❝ Cariño, somos dos mujeres y todavía no entiendo como tenemos tres hijos. ❞ ❝ Si.. yo tampoco. ¡Michael deja de jugar con el fuego! ❞ ꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦ - Sadie Sink...