Mi último cambio (1# bilogia Último)

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Meli

Ayer cuando acabamos de comer nos fuimos a dejar las cosas a la casita donde celebraría mi fiesta y por la tarde salimos a dar una vuelta con los demás.

Me levante, me mire al espejo y me vi, pero no vi a mí yo de ahora, no, vi a mí yo de antes, la que sufría por su peso y pensaba que la gente la dejaba de lado.

Mi lágrima comenzó a caer, recordar esa época, es doloroso, recuerda como mis uñas se marcaban en mi mano causando pequeñas heridas de tanto apretarlas no me gustaba mucho e intentar vomitar la comida y no conseguirlo mucho menos. Tan tonta era que ni siquiera había conseguido eso, así que si, no me gustaba, lo odiaba.

Me seque la lágrima y me aparte del espejo, me dirigí a la cocina y desayune mientras veía una serie que había comenzado la noche anterior, hoy seria día de sofá, manta y serie.

Bea: Melisa, vístete nos vamos que ver a unos amigos de tu padre que han llegado al pueblo.

Meli: Porque tengo que ir yo? Ir vosotros por favor, estoy cansada

Bea: No unieras llegado tan tarde ayer que te pasaste todo el día con tu novio.

Meli: Ya te he dicho que Eric no es mi novio mamá

Bea: Os vi besados no me digas que no es tu novio Rosa

Meli: 1.º no es mi novio y 2° no me llames Rosa

Bea: va, vístete por favor, si no lo haces...

Meli: Lo pillo mama, ahora voy

Bea: Ah, otra cosa ponte algo elegante, son una familia importante y nos han invitado a pasar el día, por lo que tu padre me ha comentado primero iremos a un museo de arte, así que por favor, no hagas el ridículo

Meli: Vale mama - dije sintiéndome inútil

Me levanté del sofá rodeando mi cintura con una manta y volví a mi habitación en busca de algo que ponerme, tras varios minutos de observación me quedé estancada entre dos, cogí mi móvil y llamé a Lu.

Lu: Que pasa, que requiere de mi atención un domingo a las 10 de la mañana?

Meli: Tengo una duda existencial

Lu: No sabes que libro empezar a leer?- se burló de mi

Meli: No, no te burles, esto es importante, lo digo enserio, mi madre me ha fastidiado mi día de sofá y encima quiere que vaya a pasar el día con unos amigos de mi padre a, y no te lo pierdas, tengo que ir arreglada, porque al parecer son una familia importante, mi plan deseado para pasar un domingo

Lu: Tampoco será tan malo, con suerte puedes evadirte del mundo leyendo Wattpad, también puedes llamarme a mí o escribirme y...no se algo más se te ocurrirá

Meli: Si, talvez no sea tan horrible como lo pongo

Lu:. ¿Claro que no, bueno que querías?

Meli: Mierda, casi se me olvida- saque mis dos opciones, un vestido azul marino corto ajustado a mi cuerpo con una tela brillante y escote abierto, por otra parte, como a segunda opción un vestido rojo corto con escote en forma de corazón de la misma tela que el anterior- cuál te gusta más?

Lu: El primero resalta con tus ojos

Meli: Vale, perfecto- me aparte de la cámara ye lo coloque- que te parece?

Lu: Esa es mi amiga, diosa

Meli: Gracias- dije sonrojándome

Cogí mis tacones a conjunto (altos y del mismo color que el vestido) y me los puse me dirigí al tocador me hice el pelo, me maquille y me quiero puse un colgante de oro que años atrás mi abuelo me había regalado, me puse delante de la cámara y le pregunté:

Meli: Como me veo?

Lu: Espectacular

Meli: Si?

Lu: Si

Meli: Bueno pues te dejo que me tengo que ir, después te escribo

...

El hotel era precioso, parecía sacado de una película, era precioso.

¿- Hola- nos saludó un hombre de mediana edad- es usted el señor Walker?

- Si soy yo- respondió mi padre

- Por favor seguirme, el señor Grouwn

Seguimos al señor que nos llevó a la última planta donde nos señaló la puerta de una habitación. Mi padre se acercó a la puerta y pulso un botón situado al lado de la puerta, tras varios minutos, un señor de la edad de mi padre no abrió la puerta y lo saludo.

-Pasar por favor

Entramos en la habitación y entendí lo que decía mi madre, era un suite, una puta suite, dios mío estaba en una suite, esos señores estaban forrados.

- Bueno, i qué tal estáis?- sentaros si queréis, mi mujer y mi hijo tardarán unos minutos aún

-Meli: Tu hijo?- me vi preguntándole

¿-Ho sí, veo que tus padres no te lo han dicho, mi hijo también vendrá, que edad tienes?

-Meli: 17

-Mmm mi hijo tiene 19, casi tu misma edad, con suerte os llevaréis bien

-Meli: Si - dije queriendo salir corriendo, lo último que quería, era tener que pasarme el día hablando con un pijo creído

¿- Ahí que tonto- dijo golpeándose la cabeza- que mal anfitrión, no os he ofrecido nada, queréis algo?

-Beatriz: No tranquilo- respondió por todos- estamos bien, impacientes por conocer a tu esposa y tu precioso hijo

-Yo también quiero que los conozcáis ja, lo siento por la tardanza, es que mi hijo ayer llegó tarde y ...

-Beatriz: Pues como aquí la señorita

-Meli: Mama- le susurré avergonzada

-Beatriz: Meli, no puedes avergonzarte de tu madre, Mikel, lo ves normal?

-Hay Beatriz, mi hijo hace lo mismo, siempre avergonzándose de su padre, con la gente que me querrá tenerme como progenitor

Adam: No me acordaba que fuera tan creído- susurro mi padre

Yo solté una pequeña carcajada me erguí en mi asiento

-Meli: Perdona el servicio?- le pegunté

- Tercera puerta a la derecha- dijo señalando un largo pasillo de lujos

Recorrí el pasillo y me adentré en el servicio hice mis necesidades, y cuando iba a salir, vi una foto, una foto de un niño Rubio con ojos azules e imaginé que sería él, el hijo de Mikel, salí del baño y cuando entre del salón un chico rubio de aproximadamente mi edad ocupaba mi haciendo, si , el de la foto era el de pequeño, tenía los mismos ojos y seguía siendo igual de guapo.

-Hola- me ofreció mi silla