PRÓLOGO

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Crecemos entre mitos y leyendas, historias antiguas que no tenemos la certeza de saber si realmente son ciertas, aunque exista duda en nuestras mentes hay un sentido que nos hace creer un poco en lo que pudo haber sucedido. Las historias de los Dioses griegos son unos cuentos increíbles, la Iliada y la Odisea son relatos fantásticos, son de mis favoritos. Aún así existe la gran duda, en el fondo, se que nada de eso sucedió pero desearía con el corazón que todo hubiese sucedido como lo escribió Homero. Si hablamos tal vez de relatos de horror, leyendas inventadas por la urbanización, pensamos en lo ridículo que se escucha, pero ese sentido común nos hace querer ignorar por completo el lugar por donde se supone existe el alma maldita. Nuestra mente nos juega muy sucio aveces, y el cuerpo humano está condenado a obedecerla.

El pequeño poblado de San Jacinto, un pobre pueblo, donde el trabajo predominante es la pesca, viven muy pocas personas, y la convivencia es un poco lejana, el egoísmo los atrapa y los consume, y las ganas de ser mejor que los demás los mantiene estancados en la misma miseria en la que están. En este pequeño pueblo existe una costa, los lugareños hablan de esta costa, como una costa maldita, donde nada prospera, donde los animales no van a divertirse, y que tal vez pueda ser peligrosa.

"La costa del silencio"  tiene esta infamia debido a una historia muy antigua de un barco español que desembarcó en estas aguas para abastecerse, que, con la embarcación viajaba una hermosa damisela, los lugareños mencionan la posibilidad de ser la hija de Juan Ponce De León, quien había descubierto las Floridas pocos años atrás. Aura De León, como se llamaba esta Damisela, viajaba al lado del capitán de la embarcación, líder del frente de un ejército español, y prometido de ella, hicieron grandes alardes de sus riquesas. La tragedia comienza cuando un pueblerino se enamora de Aura, y a la fuerza intenta arrebarla, el pobre joven estaba sumido en locura, y un día, hambriento de Aura la asesinó a sangre fría. El joven de 17 años, fue sentenciado a la horca en una gran roca que se extendía por la arena y tocaba la playa, que tenía un pequeño arco que atravesaba hasta el otro lado de la playa. De esta manera Aura fue enterrada en esa hermosa playa, y el joven jamás fue bajado de su ahorcamiento, las gaviotas lo consumieron, con el pasar del tiempo sus huesos cayeron al suelo, luego el tiempo los hizo polvo y desaparecieron.

Todo esto es solo la simple historia de los lugareños, jamás se ha escuchado un relato Similar sobre Ponce De León, debido a este invento, la costa del Silencio se ganó una infamia que ha perdurado por más de 500 años. Hoy en día es una Costa tan solitaria y sucia, que ningún lugareño se atreve a pisarla, dicen que la mala suerte te invade si visitas la costa, otros dicen que la costa es quien tiene el pueblo tan mísero, pero todo son parte de supersticiones y leyendas urbanas, que con los años cambian o desaparecen.

LA COSTA DEL SILENCIO. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora