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La muerte...la muerte es algo que está normalizado, algo que todos sabemos que en algún momento puede pasar, pero así como estamos tan acostumbrados a ella es difícil de aceptar.

Estaban todos en la playa reunidos alrededor del hueco que Jungkook, Yoongi y Namjoon habían cavado para enterrar el cuerpo de su difunto amigo. Se habían encargado de dispararle en la cabeza para prevenir alguna conversión.

Jisoo estaba en estado de shock, ella aún no podía creer lo que estaba pasando y por más que sus amigos la abrazaran y le dieran palabras de aliento ella solo quería que fueran los brazos de Hoseok quien la sostuvieran y le dijeran que todo había sido un mal sueño. Yuna no había parado de llorar, grandes ojeras adornaban su rostro al no haber podido pegar el ojo en toda la noche, era...era como si su cuerpo estuviera allí pero su conciencia no, en ese momento se sentía como un mordedor.

-Sé como te sientes.- Jisoo levantó la mirada al oír la voz de Onda. Aquella muchacha que conoció en el refugio de Yeosu, sonriente y con su cabello naranja/rojo ya no existía. Su rostro ahora denotaba cansancio, el tinte de su cabello empezaba a desaparecer dándole paso a las raíces castañas, y estaba delgada, más de lo que ella era-. Yo...yo perdí todo lo que tenía y sinceramente no sé porqué sigo aquí.- una sonrisa triste se formó en sus labios-. Sin embargo, sé que si Hongjoong estuviera aquí querría que yo siguiera adelante. Me va a costar hacerlo, pero daré todo de mí para lograrlo y tu debes hacer lo mismo. Hoseok no querría que Yuna y tu detuvieran su vida por él.

Onda le apretó el hombro con cariño para luego darse la vuelta e irse a donde estaban Taehyung y Seokjin.

Jisoo sabía que la muchacha tenía razón, incluso se sabía de memoria como tratar a una persona que estaba pasando por una perdida, pero en ese momento todo lo que aprendió y todo lo que sabía no le servía de nada.

Después de que varios dijeran unas palabras para Hoseok se regresaron al refugio y cada uno continuó con su vida, por supuesto, se podía sentir el aura triste y pesada. La peor parte para Namjoon y Seokjin fue tenerle que explicar a Seung lo que había pasado con su "Tío Hobi" el menor claramente no se lo tomó para nada bien.

Jungkook estaba caminando por uno de los pasillos completamente solo, a pesar de que su relación con Hoseok en un principio no fue muy buena le iba a hacer falta tener al policía de su lado.

-¡Jungkook!

El mencionado se dio la vuelta al escuchar su nombre, y rápidamente se arrepintió de haberlo hecho.

Mina corrió hasta llegar a su lado y comenzar a caminar con él.

-¿Qué quieres?- preguntó de mala gana.

-Solo...uh...quería decir que lamento mucho lo que pasó con Hoseok Oppa.

-En todo caso a quien deberías de decirle eso es a Jisoo, no a mi, pero gracias.- trató de caminar más rápido para deshacerse de la rubia, pero no lo logró.

-¿Y tú cómo has estado?

-Eso no te importa.

-Lo sé, pero me preocupa tu bienestar y me gustaría que...

-¡Jungkookie!

Jungkook sonrió. Esa era la única voz que le gustaba.

Taehyung frunció el ceño al ver quien estaba al lado de su novio.

-Mi amor.- Jeon lo abrazó con cuidado de no lastimarle el brazo-. ¿Qué haces aquí? Pensé que estabas descansando.- dijo dándole un beso en los labios.

-No quiero dormir solo...- un puchero se formó en sus labios.

Mina apretó la mandíbula y sin más se dio la vuelta para irse dejando a la pareja sola en el medio del pasillo.

SURVIVANTS | 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora