Loco Por Ella [Kageyama Tobio]

IV

Despues de que el primer partido del Karasuno terminara mi idea era buscar a los chicos para felicitarlos. Pero dos personas se interpusieron en mi camino, y me encuentro en la entrada del recinto tomando helados con Oikawa e Iwazumi.

- Vuestro equipo ha pasado, el pequeño Tobio lo está haciendo bien- Comenta Oikawa después de contentar a unas fans regalándoles una sonrisa.

- Si tu lo dices -Me encojo de hombros.

- Con los años que hace que nos conoces me parece insultante que no te hayas interesado lo más mínimo en el vóley -Recrimina Iwazumi.

-Pues siéntete insultado.

Ambos hacen el amago de levantarse de sus sillas para molestarme, pero al ver que estaba dispuesta a empezar a chillar como una condenada lo dejan estar- Maldita enana- Maldice Iwazumi.

- También te quiero -Le contesto acabándome la bola de helado.

-¿Seguro que está bien que estés aquí con nosotros y no con tus compañeros de clase? -Inquiere Iwazumi, mientras Oikawa está intentando llamar su atención de la forma más ridícula que pueda encontrar.

Me encojo de hombros -Saben cómo soy, y no sé quejan. Bueno, o al menos los de tercero lo saben.

-¿Vienes a ver nuestro próximo partido pues?

[...]

-¿Pero dónde está? -Daichi suspira tocándose la sien e intentando evitar cometer un homicidio en medio de campeonato de vóley.

-Tanaka, como te he repetido las ultimas veinte veces, no lo se. Así que deja de preguntar -Suplica ya cansado de la insistencia del menor.

- Pero ella dijo que vendría -Es ahora Nishinoya quién apoya la causa.

- Si tanto queréis su aprobación id a buscarla -Les ofrece Suga intentando aligerar un poco el ambiente.

- ¿Podemos hacerlo? -Pregunta emocionado Hinata.

- Creo que eso no hará falta- Interrumpe de nuevo el capitán del equipo, para seguidamente señalar una pequeña figura que camina por las gradas a la derecha de su posición- Está allá.

Algunos muchachos del equipo intentan agudizar la vista y poder reconocer a la muchacha, pero solo lo conisguen cuando esta se queda quieta en la primera fila de las gradas delante del campo donde se supone que está por empezar un nuevo partido.

-¿Qué hace allí? -Inquiere Tanaka

-No lo se -Es Daichi ahora el que se encoge de hombros.

- ¿Alguien sabe quien se supone que jugará en ese campo?

Pero antes de que alguien pueda añadir algo más a la conversación observan como el equipo de la Seijoh aparece en el campo empezando a entrenar. Pero lo que sorprende a los de segundo y primero es que el capitán de dicho equipo y su estrella vayan directos a hablar con Carina, que ahora está apoyada en la baranda manteniendo una animada conversación con ellos.

- ¿Que? - Musita Kageyama.

Pero antes de que se forme un alboroto mayor Asahi interviene- Ella fue con ellos en la escuela, y según lo que nos ha contado eran relativamente cercanos, es normal que sigan manteniendo contacto.

[...]

Karasuno🖤 + Carina😏

Hoy

Yo: Dónde estás?

762309671: En la entrada sur

Yo: Gracias Hinata, bonito

[...]

De camino a la salida sur me encuentro con Kageyama saliendo de los vestuarios. Este se me queda viendo, pero no dice nada-  Felicidades por las dos victorias.

No responde, mas bien empieza un tic nervioso en sus manos y un notable sonrojo aparece en sus mejillas- ¿Estás nervioso? -Inquiero.

-No- Murmura- Me da verguenza.

-¿Verguenza? ¿Te da verguenza verme después de nuestra conversación? -Pregunto acercándome más a él, y así consigo que entremos ambos al vestuario dónde para mi grata sorpresa ya no hay nadie- Porqué a mi no, de echo, a mi me pone que te excitaras con una foto mía.

Sus manos temblorosas se posan sobre mi cadera, atrayéndome hacia él- Toda tú es un pecado Carina. No puedo evitar mirarte todo el tiempo.

Mis de dos acarician lentamente sus mejillas y me permito el placer de observar todos y cada uno de los detalles de su cara. Sus precisos ojos azules más profundos que el mismo mar, esa nariz respingona y los perfectos y besables labios rosados.

- Mírame Kageyama, mírame todo el tiempo que quieras -Le susurro sobre los labios antes de impulsarme un poco a mi misma y darle un Casto beso encima de estos.

Al principio se sorprende un poco, incluso hace el amago de apartarse, pero cuando su cerebro procesa la información vuelve a acercarse manteniendo la distancia mínima -Yo realmente no se como hacerlo.

Me causa tanta ternura su confesión que mis mejillas se tornan sonrojadas y siento cosquillas por todos los rincones de mi cuerpo- Esta bien, siempre hay una primera vez para todo. Pero temo decirte que hoy no es el día, lo siento guapo me están esperando fuera.

Y antes de definitivamente irme de allí vuelvo a susurrarle los ojos- Si prometes que vas a ganar los partidos voy a dejarte que sigas mirándome y puede, que tocándome, todo lo que tú quieras guapo.