Capítulo 1

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imposible

El alfa solo podía observar con una mirada sorprendida, al que se supone que sería su omega. El alfa había pensado que todo había ido bastante bien, eran compatibles en todo tipo de cosas, incluso en el sexo, quería a ese omega para sí mismo, pero ahora ese simple omega venía y decidía romper con él.

— ¿Por qué? – cuestionó atónito

— No eres lo que busco en un alfa, lo siento – se disculpó pero la pequeña sonrisa en su rostro demostraba que no estaba para nada apenado

— ¿Cómo que no soy lo que buscas? ¿Acaso tienes en cuenta todo lo que he gastado en ti? Te he dado todo lo que has pedido ¿y así crees que me puedes dejar como si nada? – cuestionó molesto

— En primer lugar, esos regalos no te los pedí, tú me los diste – señalo con calma – Por algo son regalos. En segundo lugar, no tenías que darme nada, nadie te obligo a hacerlo, lo hiciste porque quisiste. En tercer lugar, no tengo la obligación de seguir contigo solo porque me diste un par de regalos caros – explicó

— ¡¿Qué?! – exclamó

— Lo que escuchas, no tengo la obligación de tenerte como alfa solo porque me compraste un par de cosas, yo no te quiero, me he aburrido de esto, así que ten una buena vida – se levantó mientras se despedía

— ¡¿Qué mierda?! ¡Ven para acá! – exclamó con la voz de alfa haciendo bajar la cabeza de la mayoría de omegas en el lugar

— Esta es la gota que rebalsó el vaso – suspiró dando la vuelta – Con esa actitud de mierda ¿crees que alguien se va a fijar en ti? Te aguante todo lo que pude, pero simplemente ya no puedo más – negó molesto – Un alfa que tiene que escudarse detrás de su estatus y de su voz para hacer que los omegas se sientan más débiles. Ese tipo de alfa, son los que más detesto y repudio – gruño molesto – Más te vale alejarte de mí, no soy cualquier omega y si te atreves a meterte conmigo, lo vas a lamentar

Todos veían sorprendidos como aquel omega salía del lugar sin siquiera sentirse mal, ningún omega podría resistirse a la voz de alfa. Era una situación horrible, muchos omegas odiaban eso, pero aquel omega simplemente se dio la vuelta como si nada hubiera pasado.

El alfa veía como aquel omega se iba sin más, era imposible que algún omega pudiera resistirse a su voz. Ese omega simplemente no era normal.

El omega simplemente iba caminando como si nada, enserio era terrible que sus hermanos tuvieran que meterse con ese tipo de alfas. Los entendía, un rato de diversión siempre era bueno, pero simplemente no entendía porque todos los alfas tenían que ser tan imbéciles.

Pero no había querido que sus hermanos se enfrentaran a dicho alfa, claro que ellos también eran fuertes, pero eso no quería decir que los dejara como si nada, no se perdonaría el que algo malo les pasara. Su teléfono sonó y contesto de inmediato.

— Hola, Julián – saludó al contestar

¿Lo lograste, Type? – cuestionó con cariño

— Claro que sí, no fue fácil, pero lo logré – asintió

Bien, Gulf ya está aquí y estamos preparando la cena – explicó

— No estoy tan lejos, llego en unos diez minutos – aclaró

Nos vemos, hermanito

— Nos vemos

Tal y como lo había mencionado, estuvo en menos de diez minutos en su departamento. Era pequeño pero acogedor, los tres vivían en ese lugar y estaban bastante bien. Al entrar, observo a sus hermanos sentados en la mesa con una olla en el medio y la televisión encendida con una película en pausa.

Lo que realmente quiero... MEWGULF FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora