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July llevaba unos minutos esperando al alfa, sus hermanos habían estado encantados con Mew, nombre que Kana había conseguido. Ninguno había tenido sexo con él, nada más allá que besos y Type unos cuantos toqueteos, pero nada más que eso.

No sabía cómo lo había logrado el alfa, pero sus hermanos no habían pensado en sexo, habían pensado solamente en lo divertido que era pasar el tiempo con el alfa. Ahora le tocaba a él, se suponía que con él todo debía terminar, después de follar tendría que decirle adiós, que ni él ni sus hermanos querían una relación formal.

Así era siempre, sus hermanos se cansaban y él debía deshacerse de los molestos alfas. No le molestaba ni nada por el estilo, pero por eso mismo se había ganado la fama de "chico malo", porque siempre era él quien terminaba de mala manera con sus ex parejas. Se había visto involucrado en una que otra pelea, pero prefería ser él a que fueran sus hermanos.

Se preguntaba a donde podría llevarlo el alfa, porque las últimas citas no habían sido nada demasiado extravagante pero habían sido citas adecuadas para hacer caer a sus hermanos ¿habría sido suerte del alfa? No lo sabía, pero suponía que con él no funcionaria, nada de lo que pudiera ofrecerle le haría aceptar una relación como sus hermanos.

Porque los alfas siempre eran así, un inicio bonito, regalos bonitos, besos, sexo y todo lo demás. Pero después llegaban a la fase de "ya me cansé, adiós" o "serás mío o de nadie" y de cualquier manera terminaban siendo unos completos imbéciles. No podría aceptar una relación con un alfa cuando sabía que terminaría mal, de alguna manera no quería terminar mal con Mew, porque con ese alfa sería demasiado doloroso dejarlo ir con una mirada llena de odio y asco como muchas otras que les habían dedicado.

— July – escuchó a su lado y ahí estaba el alfa con su bonita sonrisa

— Alfa – murmuró parpadeando rápidamente – Llegas tarde – le reclamó

— Lo siento, estaba terminando de concretar unas cosas con un amigo – explicó con un suspiro - ¿Vamos?

— Claro – asintió – Supongo que no me dirás a donde me llevas

— Supones bien, pero supongo que lo sabrás rápidamente – sonrió

July notó que Mew era bastante cliché, porque lo mismo que hizo con sus hermanos, lo estaba haciendo con él. Preguntando cosas básicas como a sus hermanos, pero para July era más difícil responder porque no tenía favoritismos en casi nada. Le gustaba bailar pero no era su pasión como lo era de Type, le gustaba leer pero no era un ávido lector como Kana y en términos de películas, casi no veía y las que veía y le gustaban, olvidaba sus nombres. Pero si podía aceptar que le gustaban mucho los programas de cocina o las series policiacas, además de los vídeos sobre crímenes resueltos y no resueltos.

Aunque a July le gustó mucho saber que Mew disfrutaba de cocinar, aunque a veces no tuviera tiempo, prefería cocinar por sí mismo a tener que comprar comida chatarra. Lo que no estaba muy claro era que, a pesar de que el alfa siempre hablaba sobre él, jamás hablaba sobre su familia y muy pocas veces hablaba de sus amigos. Quería preguntar, pero en las pocas veces que nombro a sus padres, noto un tono diferente, un tono con dolor y eso mismo lo hacía abstenerse de preguntar algo que hiriera los sentimientos del alfa.

En cuanto llegaron al lugar indicado, el alfa lo hizo entrar a lo que parecía una linda tienda de repostería y no entendía porque razón estaban allí, porque apenas y hablaban antes, el alfa no podía saber su pequeño hobbie ¿no es así?

— Mi amigo dará unas clases de repostería, es más como preparar pequeños cupcakes y decorarlos – explicó tomándolo de la mano – le pedí que me diera dos lugares y así entre

Lo que realmente quiero... MEWGULF FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora