Capitulo 1

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En una cabaña lejos del pueblo Franco observa a Sara rendida entre sus brazos, acariciaba sus cabellos oscuros y pensaba en una forma romántica y original para pedirle que lo acompañe por el resto de su vida, deseó que todos sus despertares fueran tan dulce como ese, con Sara sobre su pecho, con ese sentimiento de felicidad plena, con las sabanas como únicos testigos de su amor, era obvio que ni siquiera sospechaba la presencia de Olegario en la ventana.

        Olegario había seguido a Sara desde que ella y su caballo dejaron la casa de su madre por la tarde, la vio alejarse y como iba despacio la siguió hasta La Boca del Diablo, el bosque pantanoso al que nadie entra, pensó que ella no se atrevería a entrar sola y tenía razón, Franco llegó a su encuentro en un caballo blanco para acompañarla, confirmando las sospechas de Doña Gabriela. Franco y Sara entraron con sus caballos al bosque, Olegario no quería seguirlos, pero sabía que de no hacerlo sería el fin de su vida en la Hacienda Elizondo, así que los siguió.

        Los caballos iban muy despacio y seguían una especie de laberinto, era obvio que ellos conocían muy bien el bosque y que se dirigían a algún lugar dentro de el, y al llegar a la cabaña pudo darse cuenta.

        Franco ayudó a Sara a bajar del caballo y después lo amarró, entraron bazuqueándose a la pequeña cabaña y se sentaron en un sofá, Olegario se preguntaba como diablos habían construido esa cabaña ahí y como la amueblaron. Él tenía la intención de marcharse rápidamente así que cuando vio que Sara se sentó sobre Franco en el sofá, lo besaba como nunca vio a una mujer besar a un hombre mientras él la desvestía fue prueba suficiente para él, así que tomo el camino por el que creyó había venido.
Sara y Franco siguieron haciendo el amor en el sofá, después se fueron hacia la cama estando ya desnudos, se metieron bajo las sabanas y empezaron a acariciar sus cuerpos nuevamente y solo se detuvieron cuando ya no les cabía más amor. Sara se abrazó a Franco en la cama.

S: amor, estoy agotada, vamos a descansar un rato, si? Después nos vamos

F: como quieras amor

S: pero no me dejes dormir mucho, no quiero que mi mamá sospeche nada

F: no te preocupes amor, yo no me voy a arriesgar a perderte, no soportaría alejarme de ti otra vez

S: ni lo menciones!- se arropa y cierra los ojos para dormir un poco.

        Olegario daba vueltas en el La Boca del Diablo, estaba perdido, no encontraba la salida ni la cabaña, pero escucho a uno de los caballos relinchar y se acerco y así volvió a encontrar la cabaña y se acerco a la ventana a ver que hacían Sara y Franco y los vio en la cama, vio que Franco le acariciaba el pelo a Sara que estaba dormida.

        < Pobres muchachos, no saben lo que les espera> Pensó Olegario para sí.

Espero le gusten este fanfic, sólo contará con 18 capítulos. Pará que disfruten 🤍

Tu Maldito - Sara y Franco Donde viven las historias. Descúbrelo ahora