9

19 3 0
                                    

Las horas habían pasado, el reloj de la sala marcaban pasada la medianoche. Chan resultó ser un chico muy platicador al igual que Felix, por eso las horas pasaba sin darse cuenta.

Los ojos somnolientos de Felix y los bostezos del rubio anunciaban su cansancio, era hora de dormir, muy temprano Chan debía hacer algo con la puerta de su apartamento, debía dormir aunque sea un poco.

ㅡCreo que deberíamos dormir-sugirió el mayor, viendo como a Felix se le cerraban los ojos por el sueño.

ㅡMhn, vamos, te diré en donde vas a quedarteㅡdijo el menor levantándose del sofá, caminando en dirección a la habitación de visitaㅡTe quedarás aquí, ¿no es genial?ㅡpreguntó con una sonrisa dejando a la vista la bonita habitación.

ㅡMuy genial, yo realmente pensé que iba a quedarme en el sofáㅡrió el rubio, entrando a dicho lugar.

ㅡNo cabes en mi sofáㅡse burló FelixㅡYa vuelvo, veré si tengo algo que puedas usar para dormir.

Felix caminó rápidamente hacía su habitación, rebuscando en su armario algo que pudiese quedarle a Chan, pero estaba siendo difícil, el era más delgado que su vecino. Le dio una ojeada a la ropa de Changbin, pensando en que tal vez podría quedarle, pero no, definitivamente no, no iba a prestarle la ropa de Changbin, tendría que darle una de las suyas aunque sean ridículas y le queden un poco cortas.

Luego de tanto buscar, encontró la ropa de dormir más grande que tenía ya que a veces le gustaba usar ropa que eran tallas más grandes que las de él.

Al llegar donde Chan lo encontró revisando algunos cuadros decorativos de la habitación, riendo por lo curioso que era. Tocó la puerta un par de veces para llamar su atención.

ㅡPuede que te quede un poco apretada, pero no tengo de tu talla.

ㅡNo hay problema, solo es para dormirㅡsonrió, aceptando la ropa que se le estaba entregando, dándose cuenta de que tenía varios dibujos animados, dándole un aspecto divertidoㅡ¿Esto es tuyo?

ㅡNo te burles, me gustan los dibujosㅡhizo un puchero, haciendo que el mayor se distrajera en ese pequeño gestoㅡEn fin, ponte cómodo. Si necesitas algo, la otra habitación, obviamente, es la mía.

ㅡGracias.

Felix asintió, saliendo de esa habitación para dirigirse a la suya, estaría mintiendo si decía que no estaba jodidamente nervioso, sabía que en la mañana de seguro ya no iba a estar ahí.

ㅡCálmate, Felix, solo duermeㅡse dijo a sí mismo, metiéndose entre sus sabanas para así por fin poder dormir.

Alrededor de las tres de la madrugada, Felix estaba inquieto en su cama, moviéndose demasiado, pero no estaba del todo consciente, seguía dormido. Su frente estaba llena de sudor al igual que todo su cuerpo, fruncía el ceño inconscientemente. Estaba teniendo un mal sueño.

Se levantó sobresaltado, sintiendo su corazón latir rápidamente, sus manos temblar. Salió de su cama, sus ojos estaban levemente abiertos, pero no del todo, parecía que no estaba consciente de lo que estaba haciendo. Y es que no es primera vez que le pasaba, desde la muerte de Changbin había desarrollado un desorden en el sueño, haciéndolo tener pesadillas e incluso hacía cosas sin darse cuenta, y debido a eso, se encontraba caminando con dificultad hacía la habitación de invitados en donde evidentemente no recordaba que Chan estaba.

Muchas veces había amanecido en esa habitación, incluso en el sofá, aunque esos episodios no eran algo de todos los días, justo ese día tenía que pasarle.

Con cuidado, se metió entre las sabanas que cubrían el cuerpo de Chan, dándose cuenta de que le estaba dando la espalda, pero no le importó, se pegó al cuerpo del mayor, pasando sus delgados brazos alrededor del otro y pegando su mejilla en su espalda, sintiéndose más tranquilo. La sensación de estar con alguien le resultaba reconfortante.

let you goDonde viven las historias. Descúbrelo ahora