TODA LA GRASA QUE OCULTO

Capítulo 2: Paso a paso

Me había costado dormir, sentía cierta pesadez después de haber comido más de lo usual. Y era raro que muy dentro de mi, por primera vez me sentí libre, me gustó sentirme lleno... Estoy algo confundido ¿Realmente es lo que quiero?

En fin solo fue un pequeño gusto que me quise dar, para que darle más vueltas. Debía vestirme para ir al colegio. Me puse la camisa, la chaqueta, el pantalón y amarre los cordones de mis zapatos. Bajé las escaleras, realmente no quería desayunar, pero habían unos panqueques que olían muy bien. Mi madre me sirvió mi porción a la que añadió crema batida.

- Yyyyyy dos panqueques más, porque mi niño debe alimentarse_ dijo sonriente mientras añadía más comida.

La verdad no me quejé, de todas formas ayer ya rompí la dieta, un día más sin cuidarme no hará ningún efecto.

- ¡Gracias ma! ¿También me puedes hacer huevos fritos con bacon?_ grité desde el comedor para que logrará escucharme.

Hace tiempo que no comía tocino, volver a saborearlo sería glorioso.

- ¡Claro! ¿Cómo te diría que no? Sabes que siempre te cocino lo que quieres cariño.

No demoró más de 5 minutos cuando en la mesa puso 2 huevos fritos y 3 trozos de tocino, que se veía jugoso, listo para comer. Tomé un bocado y ahí fue cuando recordé porque deje de comerlo, eran tan grasoso ¡sabía tan bien! Era mi debilidad en el desayuno.

Al terminar lave mis dientes. Tomé agua y me despedí de mamá. Papá y mi hermana aún dormían. Por lo que me fui sin decirles nada.

Ya en el colegio no hubo nada de nuevo, solo conversé con mi mejor amiga, Scarlet siempre le da color a mi vida. Desde que éramos pequeños, me mostró su lealtad, su gran forma de ser, simplemente encantadora. Al salir al receso, estaba pensando en que debería pedir, me quedé parado un momento mientras decidía. En lo que de repente Sacrlet dijo.

- Bien le darás muchas vueltas. Yo compró la comida y tú solo siéntate a esperar.

- E-esta bien... Pero _ cuando lo dije ya era muy tarde, fue directo al mostrador a ordenar.

Fui a sentarme en una de las bancas del patio. Revisando mi teléfono en espera de la comida. Cuando Scarlet llegó en sus manos tenía dos trozos de pizza. Realmente ella nunca ha Sido tan saludable... De hecho es algo gorda, si lo he dicho GORDA. No estoy seguro de canto pese, pero empezó a agarrar peso desde que entramos a la secundaria, nunca le he preguntado el por qué o el cómo. De alguna forma se ve adorable así.

- ¿No te la vas a comer? Si no es así me la como yo_ dijo sin tan siquiera dejar que respondiera. Tomo la rebanada y se la comió en pocos mordiscos

- ¡Bien gracias por dejarme sin comida!_ exclamé algo molesto

- Ay si miren como se enoja jajaja ¿Desde cuándo te importa que me coma tus cosas? Siempre dices is qii tingi qii hicir diiti.

- Desde que me he dado un descanso de eso... Solo quiero disfrutar un poco de la comida

- ¿Un descanso? Suena geniaaaaal ¡Al fin saldremos a comer hamburguesas y papas y y y helado! ¡Wuuuuu!_ gritó de emoción alzando sus brazos como si fuera un logro.

- Solo es por hoy, no te emociones tanto. En fin solo quiero mi pizza... iré a-

- ¿¡Qué espera, solo por hoy!? Diablosss, pero podríamos hacer muchas cosas sin tus restricciones.

Hice como si no escuché y me fui al bar para ordenar mis trozo de pizza, lo comí mientras caminaba hacia la mesa en la que estaba. En medio del camino me pregunté si debería estar haciendo esto, comer de esta forma, era satisfactorio y dudoso a la vez.

- Creo que tus planes se cancelan, solo hoy me estoy dando estos "lujos" de comer de esta manera. Aparte tengo que entrenar_ dije sonando algo serio.

- ¿Lujos? Solo es comida... ¡Que dramático! ¿Y acaso no sabías que suspendieron al entrenador? Bueno más bien lo despidieron y no habrá entrenamientos hasta que encuentren a alguien que esté a la altura.

No habrá entrenamientos... Lo tomaré con calma.

- Okey okey hagamos lo que quieras, después de clases directo a tu casa.

- Advierto prepara ese estómago debilucho ¡mi familia es de preparar almuerzos potentes! _sonó como si bromeara, pero cuando se trata de ella hay muy pocas cosas que se deben tomar a la ligera.

Después de clases fui directo a su casa. Fuimos caminando, Scarlet empezó a fatigarse, intente cargarla y a pesar de mis esfuerzos no lo logré, realmente se volvió más pesada desde la últimamente vez que la levanté. Mis intentos fallidos hicieron que soltará unas risitas y se sonrojara. Con mucho esfuerzo logro caminar hasta llegar al portón de su casa.

Abrió la puerta y entramos, solo estaba su padre.

- Buenas tardes señor Cooper, siempre es bueno verlo

- Tan educado como siempre Xtian, ven aquí_ dijo con una característica voz gruesa, dándome palmadas en las espalda_ ¡Has crecido unos centímetros más! Que maravilla, y pensar que eras más pequeño que mi Scarlet. Bueno basta de charla, vamos siéntate, el almuerzo está delicioso.

Scarlet y yo nos sentamos mientras su padre servía los platos, era una sopa que no lucía tan bien, sin embargo al saborearla estaba ¡buenísima! Apenas y terminé pedí otro pensando que sería lo único que comeríamos, la reacción de Scarlet me daba indicios de que estaba haciendo algo mal. Su padre me sirvió otro plato y algo confundido por la expresión de Scarlet, está vez comí más despacio. Ella también terminó y no se había levantado de la mesa. Cuando en ese momento, su padre trae platos de spaghetti a la bolognesa.

Me quedé frío por un momento ¿podría pon eso? Mientras yo pensaba, Scarlet comía sin freno, por lo que empecé a imitar su comportamiento. Y aún faltaba el postre, era una tarta de chocolate con mermelada de mora. El señor Cooper lo dejo ahí diciendo que si queríamos nos lo acabaramos. Tomé la iniciativa tomando un trozo, y agarrando otro más para Scarlet.

- Tengo una idea, hagamos una competencia, toma la mitad del pastel y yo tomaré la otra. ¡Quien acabe primero gana! ¿O acaso no eres tan bueno en todo como dicen? _ Scarlet en definitiva me estaba retando, olvide por completo la dieta y me centré en ganarle.

- ¡Bien, te voy a demostrar que también soy bueno comiendo! ¿!Y sabes que?! Dámelo todo.

Tomé su parte y la mía, comencé a tragar trozo por trozo, cada vez más rápido. Empezaba a llenarme, tenía la boca manchada de mermelada y cuando lo ví no había más pastel...

- ¡Viste! Te gané_ dije frunciendo el ceño. Por dentro estaba a punto de estallar el mínimo movimiento sería fatal. Ella solo me veía con asombro, era la primera vez que me veía comer así.

- Y-ya lo comprobé si eres el mejor... ¿O sea como? Eso fue rápido_ no tenía palabras para describir la rapidez con la que termine el pastel_ Bueno eso solo demuestra que alguien si que tiene hambre. Ven vamos a mi habitación esto apenas comienza.

¿Apenas comienza? En qué carajos me metí ahora...

A lo largo de la tarde comimos golosinas y para la cena repetimos el spaghetti. Realmente Scarlet parecía que me estaba dando comida a propósito, aunque no le di mucha atención. Era tarde y era hora de volver a casa mis padres estarán preocupados.

Me despedí y fui lo más rápido que pude.  Llegué y menti diciendo que el entrenamiento se alargó, lo que basto para despreocupar a papá. Lo que no había planeado es que mamá me daría la cena, me había preparado ensalada con aderezo. Y ahí caí más bajo

- Me decidí tomar un descanso de la dieta, ¿no hay algo más... Ya sabes, grasoso?

Abrió sus ojos con gran sorpresa.

- Pedimos Mcdonald's, pero te diré algo Xtian, luego no digas que soy yo la que te alimenta mal.

- Si mamá, no te preocupes todo bien.

Repetí la cena, una Big Mac y papas fritas.

Al terminar solo subí a mi habitación. Mi estómago estaba a reventar, desabotoné mi camisa y me ví al espejo, un bulto se formaba en mi estómago. Los pantalones también me ajustaban y me gustaba eso... Me encantaba...