ᴅᴇ ʜᴏᴍʙʀᴇ ᴀ ʜᴏᴍʙʀᴇ // 𝑺𝒊𝒏𝒈𝒕𝒐𝑲𝒓𝒊𝒔𝒕 ♡ 3 ♡

CAPÍTULO 5

Krist se rio cuando Singto volvió a entrar en la habitación, con una simple camisa de algodón azul en sus manos. - Pensé que el plan era que me compraras otra camisa, no que me dieras una de las tuyas. -Aunque, Krist no podía pensar en nada que le gustara más que usar la camisa de su pareja.

Olía como Singto.

-¿Estás diciendo que no quieres usar mi camisa?

-No-dijo Krist mientras negaba con la cabeza y tomaba la camisa. Se la puso por sobre su cabeza y la bajó por su pecho, alisando el material con sus manos mientras la miraba hacia abajo -Me veo bien usando tus cosas.

-Te ves mejor usándome a mí - respondió Singto, dejando escapar una risita.

Incluso después del muy satisfactorio encuentro sexual que habían tenido juntos, Krist aún podía sentir su rostro sonrojarse de la vergüenza. Se volvió aún más rojo cuando Singto se rio y se inclinó para acariciar con su mano la mejilla de Krist.

-Eres tan lindo.

Krist puso los ojos blancos. -Di eso dentro del alcance auditivo de alguien y descubrirás cuán lindo puedo ser -lo amenazó. Aunque las palabras de Singto lo hacían sentirse bien, no quería que nadie más le escuchara decir la palabra "lindo". Era vergonzoso.

-¿Lo prometes?

Krist apuntó con el dedo a Singto. -Tienes una veta humorística en ti, Singto Prachaya -se volvió y caminó hacia la puerta, sonriendo a sí mismo cuando vio que la mandíbula de Singto cayó-Vamos a tener que hacer algo al respecto.

-¿No te gusta el humor?

Krist sonrió. Podía oír la confusión en la voz de Singto. Cuando llegó a la puerta, Krist se detuvo para mirar por encima del hombro a Singto, mostrándole al hombre una gran sonrisa mientras batía las pestañas.-Me encanta el humor, pero la venganza puede ser una verdadera perra. Di que soy lindo frente a alguien y podrías despertar con las uñas pintadas de rosa.

Krist se apartó de la cara de asombro de Singto y abrió la puerta. Mientras caminaba a través de ella, podía jurar que escuchó a Singto murmurar en voz baja.

-Me gusta el rosa.

Casi tropezó por las palabras de Singto.

¿En serio?

¿A su gran y musculoso compañero le gustaba el rosa?

Empezó a reírse. Él en realidad podría hacer valer su amenaza y pintar de rosa las uñas de los pies de Singto. O de rojo.

Krist seguía riéndose un momento después cuando llegaron a la planta baja. Podía oír las voces provenientes de la cocina y fue en esa dirección, con Singto pisándole los talones.

-¡Krist!

Krist parpadeó un poco ante el fuerte grito de su hermano. Off estaba de pie en la cocina con Gun,Perth Nakhun, quien era el segundo ejecutor de la manada y ayudante de alguacil de Off.

-¿Sí?

Off se giró para mirar a Krist en el momento en que ellos entraron en la cocina. -Voy a llevar a Gun al círculo. Quiero que vayas a buscar a papá mientras Perth informa al resto de la manada. Quiero que todos se reúnan con nosotros en el círculo. Es tiempo que esta manada actúe y proteja a uno de los suyos.

Wow, ¿de qué se había perdido?

-De acuerdo, Off, ¿pero estás seguro que quieres que nos vayamos? ¿No nos necesitas también aquí para proteger a Gun?-preguntó Krist. A Krist realmente no le gustaba la idea de Gun quedando sin protección considerando que Oab estaba involucrado en lo que fuera que estuviera pasando con el Profesor.