Capítulo 5#

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Intro

Una vez que mi vengaza tomé forma
Sabrás de que estoy hecho y lloráras
Una vez que mi venganza tome forma
Te lo juró que te arrepentirás
No vas a levantar ni tu mirada
Mi adiós será tortura, tu maldición
En la ciudad te diran abandonado
Y de mi dirán que no tengo corazón
Con maldad tengo el alma
Por todo lo que la vida me golpeó
Una humillación dio en el blanco
Y esa inocencia me arrebató
Ya no te pertenzco
Y ese es tu castigo
No despertar ni una noche
Más tranquilo
Lo hecho, hecho está
De nada me arrepiento
Jamás pensé en gozar
De tu persona el sufrimiento
Sufre cómo yo sufrí ¡sufre!
Llora cómo yo lloré ¡llora!
Sufre cómo yo sufrí ¡sufre!
Llora cómo yo lloré ¡llora!
¡Llora! ¡llora! ¡llora!¡llora!....

Mi venganza

Después de haber decidido el traje de novia y de novio, Stratos regresó a la casa redonda y cuando ingreso a su habitación alguien llamó a su puerta. Al abrir se encontró con, su científico y mejor amigo, el señor Circunferencia quien vino para entregarle un portarretrato que le pidió arreglar por el incidente con los fantasmas. Stratos le agradeció a Circunferencia y cuando estuvo por ponerlo en la estantería el portarretrato se cae y el cristal se raja en dos llegando a separar en la foto a Stratos y Valerie.

En la noche, el equipo fantasmal estaban empezando a discutir por lo que estaban a punto de hacer.

Clyde: no creo que pueda hacerlo. ¡Me destroza por dentro tener que secuestrar a una persona! -se parte a la mitad-.
Blinky: ¡ya controlate! -une las dos partes de su amigo- nada de esto hubiera sucedido si te hubieras mantenido callado.
Pinky: Yo tampoco quiero hacer daño a esa mujer.
Inky: ¡ya basta ustedes dos, tenemos ordenes que seguir! Y tenemos que hacer que nadie sospeche de que fue secuestrada por fantasmas.
Blinky: si, y se como hacerlo. Vamos a amenazarla para que haga una llamada a su novio y que le diga que se va por una urgencia.

La joven Valerie ya estaba acostada cuando de repente oye unos ruidos que venían de afuera. Se levanto de su cama y es agarrada por tres fantasmas de pies y manos. Ella trató de liberarse, estaba realmente asustada.

Blinky: ahora escucha -le da su teléfono- vas a llamar a tu prometido y le dirás que tienes que ir a un viaje de urgencia o sino despidete de tu preciada vida.
Valerie: -asiente asustada y agarra su teléfono marcando el número, Spheros le contesta-.
Stratos: buenas noches mi amor, ¿por que llamas tan tarde?
Valerie: -soltando una lágrima dice lo siguiente- amor, perdoname, me tengo que ir de viaje por unos asuntos de mi trabajo.
Stratos: ¿sucedio algo malo? ¿estas bien? -suena preocupado-.
Valerie: si estoy bien, no te preocupes por mí. Voy a regresar dentro de un tiempo. Te amo -cuelga la llamada-.
Stratos: ¿Valerie, estas ahí?...¡Valerie! -dice preocupado-.

Blinky saca dos jeringas, una era un anestésico y la otra, que le dio el Dr. Pompis, con un antídoto que permite tener inmunidad a las tóxinas del Inframundo.

Valerie: ¡que me van a hacer! -dice asustada al ver las dos agujas-.
Blinky: tranquila, esto te ayudará a sobrevivir al lugar dónde te llevaremos -le inyecta las dos jeringas-.
Valerie: -cae dormida-.
Clyde: lo siento mucho -la mete dentro de un saco y la hecha en su espalda-.

Los cuatro llegando al Inframundo y se fueron al castillo de Betrayus. Una vez ya dentro del castillo el grupo fantasmal se dirigieron hacia la sala del trono dejando el saco a un lado. Valerie empezó a despertarse y al salir de aquel gran sacó vio un escenario muy diferente, todo era muy tenebroso. Decidió salir de allí pero la puerta estaba cerrada así que decide buscar otra salida subiendo por unas escaleras.

Mi vengazaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora