Capitulo 2

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Llegada la noche, MC es dispuso a preparar sus cosas para ir al Aurora. Su sudadera la ayudaba a esconder las vendas que cubrían sus antebrazos, evitando cualquier infección que pudiera ocurrir mientras sanaban algunas heridas que se había hecho tras caerse de un árbol y rodar sobre unas cuantas piedras.

Su pantalón de mezclilla tenía un nuevo agujero en la rodilla pero fácilmente se confundiría como parte de la moda de hoy en día. Sus zapatos estaban algo sucios pero se debía al camino por el cual tenía que pasar para entrar y salir del bosque y a uno que otro atajo.

La capucha de la sudadera escondería la mayor parte de cabello negro como la noche, usaría una mascarilla para cubrir parte de su rostro, la parte descubierta la taparía un poco con ayuda de su cabello.

Su intención no era camuflarse con la noche ni mucho menos, lo único que quería era tapar la horrible cicatriz que atravesaba su ojo derecho, el cual estaba ciego, aquel que una vez fue un hermoso ojo de color negro, ahora había perdido todo brillo y el único color que se podía apreciar era el blanco lechoso.

Con todo terminado, tomo su móvil y salió de la cabaña rumbo al bar. Era una noche hermosa, la luz de la luna bañaba a los arboles del lugar, inspiraba la tranquilidad que siempre deseo. Le recordó al pequeño amigo que hizo la primera vez que entro al bosque hace 6 años en busca de un refugio y termino perdiéndose.

El pequeño amigo no era otro sino un pequeño cuervo que se posaba sobre la rama de un árbol, observándola, como si el humano que vagaba sin rumbo fuera la cosa más interesante. MC podía sentir su miraba aguda sobre ella, siguió caminando por el bosque hasta que decidió acercarse hasta el árbol en el que se encontraba y enfrentar a su pequeño observador.

"...Hola amigo"

"Llevas tiempo siguiéndome... así que me preguntaba si podrías indicarme una salida o al menos un lugar seguro" dijo MC mientras veía al pequeño cuervo ladear su cabeza.

Durante unos segundos no obtuvo respuesta, se estaba preguntando si realmente se había vuelto loca al preguntarle a un pájaro, que probablemente no la entendía, por una salida. Para su sorpresa el cuervo grazno en comprensión a su petición, batió sus alas para emprender vuelo y como si le dijera que lo siguiera voló sobre su cabeza en una dirección. MC no lo podría creer, el cuervo realmente la entendió y la estaba guiando, sin perder más tiempo corrió detrás del pájaro.

Luego de haber recorrido una larga distancia, MC llego a lo que aparentaba ser una cabaña, era pequeña pero era justo lo que buscaba.

Busco con la mirada al pequeño cuervo, lo encontró en la rama de un árbol cercano, se acercó un poco y agradeció por su ayuda, se despidió del curioso animal y entró a lo que sería su nuevo hogar.

Durante los días siguientes a ese encuentro, el cuervo volvía con MC a pasar el rato con ella, los días se convirtieron en semanas, las semanas en meses y los meses en años. Había aceptado al cuervo, al que llamó kuro, como parte de una familia a la que consideraba extinta, durante esos años también conoció al viejo. Él la había ayudado cuando se encontraba gravemente herida tras una pelea callejera casi a las afueras del pueblo, era una suerte que él pasara por ahí ese día. La había ayudado con sus heridas y le dio un techo y comida temporales mientras se recuperaba.

Tardo más tiempo del que pensaba en sanar sus heridas, al principio no le dirigía palabra alguna pero el tiempo logro que se abriera un poco al hombre que la había salvado de una muerte segura. El viejo también lo había admitido cuando su recuperación estaba casi lista, le dijo que si quería podía quedarse con él. MC quería aceptar tal propuesta pero el miedo a perderlo todo de nuevo la obligo a decir que no.

Detrás de la máscara (Duskwood)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora