Capítulo 5

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Doyoung se encontraba con una sonrisa incómoda en su rostro, y solo pensaba que Jaehyun era un maldito, ni siquiera le aviso que iba a soltar la bomba, no se encontraba preparado. El pelinegro posó su vista en Jaehyun, quien sólo lo veía divertido.

-¡¿Qué?! Felicidades hijo! ¡Doyoung!. - dijo la madre de Jaehyun con una sonrisa en la cara, acercándose a ambos chicos para darles un abrazo.

-Gracias mamá- dijo el castaño, regresándole el abrazo. A su lado Doyoung, cruzaba los dedos para no tener que darle abrazo a nadie, sin embargo, soltó un pequeño suspiro al ver a la señora acercándose a él-

-Gracias, señora- dijo en un hilo de voz

-Nada de señora, llámame suegra- dijo Yangmi felizmente. Jaehyun a su lado, soltó una carcajada, ganándose un golpe por parte de Doyoung

-Mamá! .- dijo Jaehyun con un puchero- Míralo, me está golpeando, protégeme!- Yangmin rodó los ojos

-Jaehyun, cállate, Doyoung no te hizo nada malo- dijo la abuela Jeon desde su asiento- Mejor traigan el champagne

Jaehyun y Doyoung se encaminaron a la mesa donde se encontraban las botellas, recibiendo felicitaciones en el camino.

-Así qué, ¿esa fue tu idea del momento adecuado para decirles?- preguntó el pelinegro incrédulo, tomando un vaso de champagne y tomándoselo todo de golpe.- Porque fue el momento perfecto- dijo sarcásticamente. Jaehyun a su lado lo miraba divertido, últimamente se encontraba haciéndolo muy seguido y si le preguntabas la razón, no sabría explicar el por qué.

-Jaehyun, hola- se escuchó una voz desconocida para Doyoung, quien posó su mirada en el dueño de aquella tranquilizadora voz.

Se trataba de un chico un poco más bajo que Doyoung, delgado, nariz y mandíbula perfilada, ojos muy lindos, y cabe resaltar, muy atractivo. Vestía sencillo, unos jeans de mezclilla, con una camisa a rayas negras y blancas. Volteo a ver a Jaehyun, quien le estaba dedicando una sonrisa muy grande al chico, haciéndolo fruncir el ceño.

El pelirosa se veía como una persona muy amable, sin embargo, Doyoung solo quería que se fuera y los dejara a los dos en paz. No le gustaba para nada esos pensamientos a Doyoung, porque, seamos sinceros, esto se trataba de un arreglo en el que ambos tendrían beneficios, y Jaehyun no le gustaba, en lo absoluto.

Nadita, nada, no.

-Tae, hola, hola, wow- dijo Jaehyun alegremente. Doyoung rodó los ojos, se veía idiota. - ¿Cómo has estado? No sabía que estarías aquí.

- Tu mamá probablemente quería que fuera una sorpresa, así que, sorpresa- movió sus manos de un lado a otro.

¿Manos de jazz? ¿Será bailarín?, pensó Doyoung.

-Si, wow- dijo Jaehyun algo atónito

-Y...

-Estamos siendo completamente groseros- añadió rápidamente cuando noto a Doyoung a su lado con cara de pocos amigos- Doyoung, este es Taeyong, mi ex

-Puedes decirme Tae- le dijo extendiendo su mano en forma de saludo, con una sonrisa en el rostro.

-Hola- le dijo con una sonrisa forzada. Solo quería maldecir, ¿su ex? Era guapísimo. ¿Que todos en este pueblo eran guapos? Primero los mejores amigos de Jaehyun y ahora su ex que parecía modelo.

No era que Doyoung no tuviera confianza en el mismo, pero sabía admitir cuando alguien era más atractivo que el, y dudas comenzaron a aparecer, ¿será que la familia de Jaehyun pensara que era suficiente para el?  ¿Estarían hablando a sus espaldas? ¿Lo estarían comparando?

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