Día 15

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Quise planear una cita romántica con mi hermoso Takato-san, pero todo termino siendo un desastre, todo por querer que todo saliera perfecto, ya que quería que mi amado tuviera una velada inolvidable, aprovechando el poco tiempo que estamos juntos en este país


En verdad tuve un día pesado... mejor dijo tan mala suerte...


Dentro de dos días volveremos a nuestro hogar y de nuevo volveremos a la cotidianidad, rogando por poder pasar más tiempo con él, pero simplemente me debo enfocar en el presente, ya que el pasado no volverá y el futuro es incierto


Le dije a Takato-san que iría por él a su trabajo, después de mucho insistir él acepto, sé que mi amado tiene miedo de los comentarios que puedan decir los demás, pero lo más importante es el amor que sentimos


Se que en algún momento ambos estaremos siempre juntos, sin importar el que dirán, sin preocupaciones, solamente amándonos cada día


Mire mi reloj y me di cuenta que se me había echo tarde, así que me apresuré a salir de la habitación y subí al auto


Cuando estaba por llegar me di cuenta que no había traído conmigo la tarjeta de mi habitación y tampoco el regalo que le había comprado


Por quejarme casi choco con el auto de enfrente, me maldecía internamente todo lo malo que me estaba pasando


Cuando llegue al set, me estacione y baje del auto, me dirigí a la entrada dónde siempre espero a mi Takato-san, pude ver que pronto comenzaría a llover


Mi amado salió y lo abrace, él me dio un pequeño golpe en la frente mientras sonreía, caminamos hasta el auto y no podía abrir, me percate que las llaves se quedaron adentro y como si el día estuviera en mi contra comenzó a llover


Corrimos hasta resguardarnos de la lluvia en una parada de autobús, lamentablemente nos logramos empapar, así que tomamos un taxi a su habitación de hotel porque yo deje mi tarjeta en casa



-Lo siento mucho -susurre cuando entramos a su habitación

-Realmente eres un despistado

-No se que me paso Takato-san -murmure y lo vi entrar a su cuarto, cuando salió me aventó una toalla- toma, sécate

-Hai -susurre decaido

-Eres un tonto

-Sí -murmure

-Pero uno que quiero mucho -seco mi cabello

-¿Eh? -me sorprendí

-No he dicho nada -sonrió

-¡¡Takato-san!!

Mi día a día (Azumaya Junta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora