Mi día a día (Azumaya Junta)

Día 204

Sonreí al ver mi celular y ver que tanto mi amado Takato-san al igual que yo somos tendencia en todas las redes sociales, tanto por nuestros personajes de Romeo y Julio, como nuestra vida real

Hay muchas fotos de nuestra boda cómo de la proposición que le hice, cuando le pedí que se casará conmigo, incluso en nuestras citas, realmente es extraño, todo mundo está siguiéndonos

Y de nuevo puedo observar que tenemos mucho apoyo, que la mayoria de las personas están de acuerdo con nuestra relación y nos defienden de aquellos que nos critican, son tan buenos al apoyarnos

Vi a mi amado y sonreí, él parece otra persona, siempre logra trasmitir cada emoción, cada personaje que hace son únicos y dejan un gran sabor de boca, querer poder observarlo cada día

Camine hacía él y lo tome de la cintura

Estamos haciendo una escena dónde nos encontramos en un bar latino y comenzamos a bailar al ritmo de la música

Su mirada seductora, su voz, el acento que está manejando me enloquece por completo

-Romeo, más te vale que no sigas de coqueto con la mesera

-Mi amado Julio, solo era cortes con ella

-Pues sigue como vas y no dormirás conmigo

-Mi amor

-Además empezaré a bailar con ese hombre fuerte, apuesto y...

No lo deje terminar porque lo bese apasionadamente, al separarnos, lo tome del mentón e hice que me viera a los ojos

-Eres mío, solamente mío -dije con seriedad

-Enserio, ¿según quién? -pregunto con altanería

-Según yo Julio Montesco

-Entonces convénceme Romeo Capuleto -sonrió ampliamente

-Te lo demostraré con palabras -susurre y metí mi mano por debajo de su playera- y con mi cuerpo

-Eso me gusta muchísimo más -rio

Lo giré y comencé a besar apasionadamente bailando al ritmo de la música, mezclándonos entre los demás, realmente el ambiente es tan cálido, tan excitante, solo provoca que quiera hacerlo mío hasta el amanecer

-Vamos a la habitación -susurre en su oído

-Iría al mismo infierno si es necesario -comento y me beso

-¡¡¡CORTE!!! -exclamo el director

No quería soltar a mi amado, deseaba tenerlo en mis brazos, poder tomarlo, pero no es el momento ni el lugar, así que a duras pernas lo solte

-Deberías de darme una recompensa por mi autocontrol -le susurre a mi Takato-san

-Baka, maldito ángel pervertido

-También te amo