Capítulo 4

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Me despierto y veo a Lucifer aún dormido, así que pongo mi cabeza en su pecho, pero al sentir el movimiento, se despierta y me habla

Me despierto y veo a Lucifer aún dormido, así que pongo mi cabeza en su pecho, pero al sentir el movimiento, se despierta y me habla

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—Buenos días, amor. ¿Cómo amaneciste? —dijo con un beso.

—Buenos días, mi amor —respondió con otro beso—. Muy bien, ¿y tú?

—Muy bien también. Oye, ¿qué te parece si vamos a desayunar a un restaurante y de ahí vamos a ver a Kiras?

—Me parece perfecto, mi amor. Vamos a bañarnos entonces, porque ya tengo hambre.

—¿Vamos? —dijo con una cara pícara.

—Bueno, cada quien...

—No, no, amor, yo me quiero bañar contigo. ¿Aceptas?

—Bueno, está bien, acepto.

—Vamos a bañarnos entonces.

Después de unos 20 minutos, salimos de bañar. Chloe tardó más en estar lista, pero después de un corto tiempo salimos rumbo al restaurante. Pedimos algo ligero para desayunar porque era temprano. Todo estuvo muy tranquilo; me encanta pasar tiempo con Chloe. Terminamos de desayunar, pagué y nos dirigimos a casa de Eda para ver a Kiras.

EN CASA DE EDA

Están llegando a la casa y ahí esta ella trabajando con unos papeles 

Están llegando a la casa y ahí esta ella trabajando con unos papeles 

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—Hola, Eda.

—Hola, Lucifer.

—Mira, te presento a mi novia Chloe.

—Chloe, ella es Eda, la mamá de Kiras.

—Hola, mucho gusto —dijeron al unísono mientras se daban la mano.

—Eh, vine por Kiras.

—Ah, sí, no será posible. Lo que pasa es que ahora está en la escuela.

—Oh, no lo sabía.

En realidad, esta chica es muy guapa, pero no creo que debería sentir celos. Seguro ya no sienten nada el uno por el otro.

—Ah, Lucifer, una cosa: mi hija no tendrá una madrastra, ¿entiendes? Yo soy su madre, no necesita otra.

—Un minuto —dijo Chloe.

—No estoy hablando contigo☝🏻.

—Ahahah...

—Lucifer, necesito hablar contigo en privado. Ahora, vamos.

La sigo para hablar porque no quiero que se vaya a armar algo aquí. Porque Lucifer la sigue, no voy a decir nada, pero cuando estemos a solas me va a escuchar.

—Oye, tranquila, tú eres su madre. Nadie te va a reemplazar. Además, yo tampoco estoy feliz de que MI HIJA tenga un padrastro, ¿eh?

—Es diferente. Ella conoce a mi novio desde que es muy pequeña y lo quiere mucho.

—Bien, entonces dejemos que ella decida si le cae bien mi novia o no.

—Ok, está bien.

—Bueno, adiós.

—Adiós.

Salimos de la casa y nos dirigimos a la comisaría, ya que Chloe tenía que hacer papeleo. Hay un silencio incómodo. Si las miradas mataran, seguro ya estaría de vuelta en el infierno.

—Amor, ¿qué te pasa?

—Nada —respondió cortante.

Pongo mi mano en su pierna.

—Quita tu mano de ahí —le quita la mano.

—Te das cuenta, dime, ¿qué pasa?

—Es que no sé por qué tienes que hacerle caso a ella —dijo enojada.

—Oye, amor, por favor, solo lo hice para evitar cualquier discusión, ¿entiendes? Ya sabes que yo solo te hago caso a ti, amor .

—Jaja, tonto. Te amo.

—También te amo.

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AMOR EN EL AIRE (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora