Encuentros

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Afortunadamente, la exhibición de patinaje seguía en pie. Eso alegro bastante a los entrenadores y sus chicos. Se llevaría a cabo un viernes por la noche, mientras los jóvenes practicaban buscando impresionar a los dueños/inversionistas de diversas empresas que asistirían, buscando su patrocinio. Además de que se transmitiría por televisión para calmar a la gente.

En una enorme mansión, específicamente, una biblioteca

- ¿Una exhibición de patinaje? – hablo una mujer de facciones algo toscas - ¿y aceptaste que fuéramos?

- Si, pensé que te gustaría Lilia

- Aunque son similares, la danza y el patinaje son distintos Yakov

- ¿Cómo en qué? - la mujer solo bufo, mientras su esposo solo sonrió

- ¿Y Viktor acepto ir?

- Prácticamente lo obligue, además el sabe que es su deber asistir ya que, junto a Mila y Georgi, son representantes de nuestras empresas desde que nos retiramos.

- ¿Y Yuri?

- El también debe ir, como futuro heredero de una de nuestras empresas – Lilia frunció el ceño

- Sabes que eso jamás pasara

- Lo sé, pero la prensa sabe que tu y yo tenemos cuatro hijos adoptivos. Por lo que debemos seguir como siempre lo hemos hecho

Por su parte, en su habitación, una emocionada Mila elegía que vestido ponerse, mientras su cama estaba sepultada bajo montañas de su ropa hasta que un bulto se movió

- Puaf... oye vieja bruja – saliendo bajo la montaña de ropa - ¿Por qué estoy aquí?

- Ay Yuri, ¿apoco no te emociona esto?, ver a esos chicos bailando sobre el hielo... imagino lo hermoso que debe sentirse

- Eww – haciendo malos gestos – esas cosas solo me hacen vomitar. Además, ¿Qué tiene de emocionante ver a un grupo de idiotas haciendo saltos y piruetas sobre una alberca congelada?

- ¿Cómo osas decir eso? – se escuchó fuera de la habitación

La puerta de Mila se abrió de golpe mostrando a un joven delgado y alto, cabello negro corto y ojos color turquesa, haciendo una entrada dramática.

- Yuri... el patinaje sobre hielo no solo es hacer brincos al aire o piruetas sobre el hielo – moviendo sus brazos como si recitara un poema – también es una muestra de mostrar sus emociones mediante bellos movimientos inspirados en la danza y... ¡Yuri! – viendo al menor revisando su celular

- Si, si, lo que digas. Además, ¿Por qué tengo que ir?, la invitación fue para los ancianos.

- Pero iremos todos – hablo Mila – lo quieras o no, los socios nos conocen como hijos adoptivos de Yakov y Lilia, además de que Viktor, Georgi y yo somos la imagen de las compañías que forman FelBara. Y tú como el hermanito menor – cargándolo – debes ser presentado como un futuro propietario

- ¡Bájame, vieja bruja! – pataleando

- Además de eso, quien sabe y encuentres a alguien que te guste – guiñándole el ojo

- ¡Cállate vieja bruja!

Un aura depresiva comenzó a surgir de Georgi, Mila sonrió nerviosa

- Georgi, lo siento – viéndolo temblar - olvide que...

- Esta bien... ya he superado a Anya... - expreso mientras lloraba

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