QUIERO TODO CONTIGO

Primer encuentro

Choi Minho se quedó viendo al doncel frente a su porche.
Parecía demasiado bueno para ser verdad.
Una fantasía hecha carne, su hermoso cabello castaño, sus pequeños hombros cubiertos por una chaqueta de mezclilla. Era hermoso, pero su completa figura era verdaderamente una perfección de Dios.
Él trató fuertemente de no mirar de más,  pero no fue muy capaz de lograrlo. Vestía modestamente; usaba una playera púrpura por debajo de su camisa de botones a cuadros, pero el efecto era innegablemente sexy. Los jeans oscuros que usaba solo acentuaban sus caderas y su culo. ¡Y su rostro!, hermosas facciones, con una barbilla ligeramente puntiaguda y una boca que despertaba fantasías que él no había tenido en meses; también tenía unos ojos gatunos brillantes. Ojos que continuaban volviéndose más alarmados.
“¿Qué?” ladró él, molesto con él mismo por observarlo como si nunca antes hubiera observado a un doncel.
“¿Quién dijiste que eras? ¿Y qué haces aquí?”
Tomándolo por sorpresa y más que un poco ofendido, se irguió por sus completos 5 pies y cuatro pulgadas y dijo.
“Soy Kim Kibum, usted me contrató para ser un niñero, señor Choi.

La mandíbula de Minho se abrió de la sorpresa. “¿Te contraté para qué?”
Bueno, esto se estaba poniendo extraño.
Y Key empezaba a tener frio, su liviana chaqueta de mezclilla no era competencia para el viento de Jeju.
“Para ser un niñero,” reiteró. “Para sus hijos, KangHoon y WooJin”
Está bien, esto se ponía raro.
¿Cómo sabía los nombres de sus hijos?
“Nunca hemos hablado antes,” dijo él lentamente.
Quizás este precioso doncel estaba trastornado, pero no presentía nada peligroso en él. Había preocupación, sí, había incluso impaciencia y molestia, pero no peligro.
“No,” aceptó, repitiendo su tono y preguntándose si le faltaba un tornillo.
“Choi Sooyoung habló conmigo por Skype anoche.”
“¿Sooyoung te contrató para ser mi niñero?” Minho estuvo aún más impactado.
Su amiga tenía una tendencia irritante a actuar como su hermana mayor, lo hacía incluso más molesto el hecho de que él fuera más chico, pero ella nunca había llegado tan lejos.
“No, señor Choi,” dijo Key sarcásticamente.
“Ella solo mencionó que yo iba a cuidar de los niños, si tuviera que cuidar de usted, aumentaría mi tarifa."
Una sonrisa tan repentina como un amanecer apareció en su rostro, Key sintió que sus rodillas se debilitaban. Él parecía severo, pero aun así guapo.
Al sonreír, Choi Minho era impresionantemente bello, sus ojos se arrugaban en las esquinas y un hoyuelo apareció en su mejilla derecha. Sintió una sonrisa estirar sus labios en respuesta.
“Pasa, adelante,” dijo él, manteniendo la puerta abierta con una mano mientras recogía su maleta del porche con la otra.
“Te traeré algo de café y puedes contarme todo lo que Sooyoung y tú discutieron.