Cap 5

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Una semana había pasado desde que descubrir que aquellas hermosas flores de cerezo lo estaban matando lentamente pero indolora por el momento.
Tenía decir que mi corazón dolia un poco más, al igual que mis pulmones, pero no podía quejarse en absoluto, ya había tomado la decisión de morir en vez de olvidar, ahogarme en vez de confesar mis sentimientos y ser rechazado por ellos dos.

¿Era doloroso verlos con otras personas? Por supuesto que lo era, pero también estaba feliz de que ellos pudieran tener un momento feliz aunque fuera ahora...antes de la gran tormenta.

No seria la primera vez que me enfrentaba a la muerte, a lo largo de todos los viajes que había echo para salvar aquellas personas importantes para mi, había muerto como 3 o 4 veces... de maneras diferentes, de menos violentas a más, esto era realmente suave en comparación a morir atropellado por un tren.

Tan despistado estaba que no me di cuenta que me encontraba a centímetros de chocar con una persona,  pero tenía tantas cosas que pensar, demasiado tormento y angustia que me importaba bien poco el resto.

Caer al suelo hizo que apoyará la mano al suelo con la consecuencia de oír un leve crujido y un dolor latente en la muñeca, mis ojos se aguaron rápidamente a punto de desbordarse y que yo negué dejar caer.

–Hanagaki. –Aquella voz era la de un niño pequeño, conocida sin duda y se notaba molesta y llena de asco.

–Naoto.... –Susurre con suavidad al levantar la mirada.

Había chocado con Hinata, la muchacha estaba haciendo ligeras muecas de dolor gracias a la caída y entonces si me sentí algo arrepentido por no ir más atento por la calle. Pasé de la frialdad de Naoto y camine rápidamente hacia Hinata para ayudarla...rápidamente fui rechazado, dio un manotazo a mi mano y se levantó sola.

Sabía lo dolida que estaba después de haber cortado nuestra relación, fue duro para ella pero también lo fue para mí...estuvimos tanto tiempo juntos y la rompí por un enamoramiento con dos hombres. No hubiera sido justo ni para mi ni para ella seguir con esa relación, le estaria mintiendo en la cara y también a nuestros corazones.

–No necesito nada de ti...eres un traidor. –Hinata de mostró fría y lista para arremeter con sus palabras. –Eres un homo...me has engañado com dos hombres.

Me encogí brevemente al sentir la mirada juzgadora de toda las personas que había en el lugar, obviamente había gente que aún no aceptaba la relación entre dos hombres y menos si eran un trío...un obstante yo no estaba saliendo con ninguna de mis dos personas favoritas.

Los susurros crueles comenzaron a llenar la estrecha calle, la tensión el ambiente se hizo cada vez más insoportable y sobre todo cuando pude ir ciertas risas desagradables.

Mis ojos se aguaron de nuevo, aprete las manos en un puño a pesar del dolor sordo de mi muñeca, una mueca suave comenzó aparecer en mi rostro y la necesidad de huir se hicieron presentes.

¿Estaba mal salir huyendo ahora? ¿Sería un cobarde?

Tenía la respuesta a esas dos preguntas que rondaba mi mente pero...obte por salir rápidamente de allí a pesar de las burlas de Hinata, la risa de la gente y las crueles palabras...pero no me dejaron ir.
El fuerte agarre de un hombre se hizo presente en la muñeca lastimada, el tirón dado me hizo casi gritar si no fuera por que morir con fuerza el labio inferior.

Me negué a darles el gusto de verme llorar, ya que serían aún más crueles y eso...era una de las cosas que no quería.

–Vamos a jugar con la mariposita~ –Rie uno de los chicos de allí.

–Eso sería demasiado gay. –Comenta otro. –Aunque esa boca tiene pinta de hacer maravillas.

El miedo comenzó a establecerse en todo mi ser, rápidamente comence a tirar del fuerte agarre sin importarme en absoluto si me lastimaba o no.

–¡Ayuda por favor! –Grite.

Risas se oyeron y no sabía si realmente me había escuchado alguien que pudiera ayudarme...

Patee, grite y exigi que me soltara pero nada funciono, cerre los ojos deseando que esta cosa pasara rápido y no dejara en paz...eso fue hasta que el agarre se fue y al abrir los ojos me encontré con aquellos ojos lavandas llenos de preocupación.

Un puchero apareció en mis labios y rápidamente me lance encima de Mitsuya para abrazarlo. Los sollozos se hicieron presente y sin ninguna advertencia o queja me cogió entre sus brazos y comenzó a caminar lejos del lugar.

Las caricias que me regalo solo me hicieron llorar aún más, aunque esta vez era de puro alivio y era a lo único que podía aferrarme en ese mismo momento.

–Shh...tranquilo Takemitchy. –Susurro con suavidad llena de tranquilidad y cariñosa, como una madre a su niño. –Todo irá bien.

–Ellos...ellos....

–No debes decirlo, Takemitchy. –Comento mi amigo. –Las acciones de esos idiotas no están justificados.

–Me duele la muñeca...

–Te voy a dejar en el suelo y te la voy a mirar, ¿vale? –Pregunto.

El me dejó en el suelo sentando, se arrodilló frente mía y comenzó a observar y tocar la zona afectada, el miró mi rostro, supongo que debía tener una mirada llena de dolor.
El más alto hizo una mueca suave y luego solto un ligero suspiro.

–¿Mitsuya? –Pregunte al verle suspirar.

–Puede ser que tengas la muñeca rota, te llevaré al hospital y que allí te atiendan.

–¡No! No quiero preocupar a nadie más....

–Tienes que ir.

Agaché la cabeza al oír como la voz cariñosa cambió a una severa y solo atiene asentir con la cabeza. Me dejé guiar por el joven hacia aquel horrible lugar y me acurruco cerca del costado del chico.

Estoy...aliviado.







Fin del capítulo.

°°°°°°°°

¡Hola a tod@s!
Ya esta aquí el nuevo capítulo de esta historia, espero que sea de vuestro agrado y lamento la tardanza.

Aah...Mami Mitsuya se hizo acto de presencia en este capítulo  🥺

¡Gracias! ❤🦊

~Small petals~ (Draken x Takemichi x Mikey) ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora