❝𝗠𝘆 𝗙𝗿𝗶𝗲𝗻𝗱𝘀 𝗗𝗼𝗻'𝘁 𝗨𝗻𝗱𝗲𝗿𝘀𝘁𝗮𝗻𝗱 𝗠𝗲❞ ᵀᵃᵉᵏᵒᵒᵏ⁻ᴬᵈᵃᵖᵗᵃᶜᶤᵒ́ᶰ

Eight

Es el quinto día que falto a la escuela. Cinco días en los que no he salido de mi casa por nada del mundo, mi madre ya se ve preocupada, así que decidí salir a una fiesta que se haría en la noche, la cual era organizada por mis propios compañeros de clase.

Camine solo por las calles hasta llegar a aquel lugar no salía ir seguido a ninguna fiesta, pero esta ves quería sentirme uno mas del montón. Quiero sentir que no tengo preocupaciones.

Entre a aquella casa, no sabia de quien era, y tampoco me importaba mucho. Algunas personas me saludaron, solo mantuve una sonrisa falsa y caminé a alguna parte donde hubiera alcohol. Me senté en un sofá a tomar una botella de cerveza.

Una chica se sentó al lado mío, era obvio que estaba ebria, quizás hasta drogada. Me ofreció el cigarro que ella misma estaba fumando, y lo acepte. Ella se sentó tan cerca de mí que podía oler su perfume.

Estaba riéndose con su grupo de amigos, aunque con el tiempo cada uno de ellos se fueron de aquel lugar. No me di cuenta de cómo, pero entablamos una conversación, probablemente sin sentido ya que ambos estábamos ebrios. La acompañé a buscar más alcohol, pero por alguna razón terminamos besándonos en la cocina, rodeados de personas que no nos prestaban la mínima atención. Ella tomo mi mano y me llevo a una habitación. Me tumbo en la cama mientras se sacaba la blusa. Yo simplemente seguí besándola, tratando de no pensar mucho en mis acciones.

Me saqué mi camiseta, y cuando estaba por volver a besarla, oí gritos en el pasillo. Inmediatamente reconocí aquella voz.

—¡Cierra la boca, imbécil!— dos chicos peleaban y gritaban en frente de las habitaciones.

—Lo siento, tengo que irme.— le dije a la chica, quien intento besarme nuevamente.

—¿Qué pasa lindo? ¿no te estas divirtiendo?— la empuje suavemente hasta dejar en la cama, tome mi camiseta y volvía ponérmela mientras ella me miraba con un puchero en sus labios.

—Lo siento, no es tu culpa...— me retire de la habitación y mire hacia donde se oían los gritos.

Taehyung estaba siendo sujetado de cuello de su chamarra por un tipo mayor, aunque no más alto que él.

—¡Hyung! Sálvame de esta bestia.— Taehyung reía, obviamente estaba alcoholizado.

—Lo siento, por favor déjalo, me lo llevare de aquí.— trate de persuadir a aquel tipo y arrastre a Taehyung lejos.

Él simplemente reía mientras yo trataba de llevarlo lejos de aquel lugar. ¿Por qué? ¿Por qué tenia que aparecer en el mismo lugar en el que yo estaba? Él nunca iba fiestas, no le gustaban, y tampoco te gustaba tanto el alcohol, ¿Cómo era posible que ahora estuviera ebrio?

—Va a sentarte en ese banco hasta que puedas caminar correctamente, luego te llevare a tu casa y vas a comportarte.

Estábamos en un parque, eran aproximadamente las tres de la madrugada y nadie pasaba por allí. Te deje sentado en la primera banca que vi, te acostaste sobre ella y me aleje de ti. Si no fuera tan considerado, te hubiera dejado aquí, solo.

—¿Por qué te alejas, hyung?— pregunto repentinamente.

No supe a que se refería realmente, así que no respondí a su pregunta.

—¿Puedes acercarte, hyung?— te sientas correctamente y me tiendes tu mano, esperando a que yo la tome.

Y lo hago, tomo tu mano y camino hacia ti, hasta que quedamos frente a frente. Estas mas bajo que yo debido a que estas sentado. No pudo evitar pensar en lo hermoso que te ves ahora, en la noche. A pesar de que noto rus ojeras y tus ojos están rojos por el cansancio y ebrio que estas... Tu piel brilla, tus labios se ven tan bonitos, como si pidieran ser besados, y tu cabello pintado de azul se ve tan suave.

—Eres tan lindo hyung...— una de tus manos pasa por mi cuello hasta mi mejilla... Tu toque se siente tan cálido.

—No...— trato de quitar de quitar tu mano, pero tu insistes, no entiendo porque lo haces esto... Se que luego vas a lastimarme, pero, aun así, tu cariño sigue sintiéndose tan necesario.

—Por favor...— parece que vas a decir algo, pero te quedas callado y tiras suavemente de mí.

Nuestros rostros están muy cerca, nuestras narices rozan y las respiraciones se combinan. Tus manos toman mi rostro, acaricias mis mejillas mientras me miras a los ojos, luego mis labios, pero no pareces decidido a besarme.

Mis ojos se ponen llorosos, quiero decirte tantas cosas.

—Taehyung... Yo...— tengo miedo de seguir y ponerme a llorar, o de decir cosas de las cuales me arrepienta.

—Dime, hyung.

Pero no puedo seguir, así que simplemente te beso.

Te beso y paso mis manos sobre tus hombros, abrazándote, deseando esto nunca termine, desenado que recuerdes esto cuando tu ebriedad pase... Deseando que sientas lo mismo que yo.

Tu abrazas mi cintura, tan fuerte que no queda espacio entre nuestros cuerpos. Me gusta despeinar tu cabello y escuchar tus suspiros en medio del beso. Todo se siente tan cálido, tan hermoso...

Me separo del beso, pero automáticamente me abrazas aún más fuerte, como si no quisieras que me valla, como si no quisieras quedarte solo.

Pero no entiendo, Taehyung. Nunca, jamás, podría abandonarte. Porque no se si realmente, en algún futuro, podría dejarte de amar.

☁️