1: Ravena Soux

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¿Cómo crees que se siente un conejo en una jaula? ¿Asustado? ¿Acostumbrado a ese estilo de vida?, podría decirte detalladamente cómo se siente ya que he pasado toda mi vida en una maldita jaula

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¿Cómo crees que se siente un conejo en una jaula? ¿Asustado? ¿Acostumbrado a ese estilo de vida?, podría decirte detalladamente cómo se siente ya que he pasado toda mi vida en una maldita jaula.

Te preguntaras ¿Como es eso posible?
Bueno para empezar me han tenido encerrada para evitar que me escape y así poder manipularme a su antojo, subestimando mi inteligencia y mis habilidades.

A quien mas estoy acostumbrada es al científico que se encarga de mi monitoreo, él cree que por mostrarse vulnerable voy a mostrarme igual, quiere ver si puedo sentir como una persona normal.

-Buenos días Ravena - una enfermera entra con un carrito lleno de jeringas cosa de todos los días

-¿Qué me darás hoy? - husmeo

-Lo de siempre aunque te subimos las dosis - señala la jeringa color rojizo cada una de esas jeringas arden como si hubiera una araña en mis venas, ya no tengo casi sensibilidad en mi cuerpo gracias a ellas

Los guardias entran por la amplia puerta y traen los amarres, sí suelo ser un poco agresiva cuando me inyectan no me gusta que lo hagan por lo que mi cuerpo reacciona por inercia.

Me atan a unas barras de metal y Murcia la enfermera entra en el espacio con una sonrisa ¿Cómo diablos puede sonreír a esto?, Esto debería ser ilegal pero estoy segura de que ya lo es así como poco parece importarle

Recuerdo la primera vez que me inyectarla la jeringa tenía un líquido verde brillante y poco natural yo era muy pequeña tendría alrededor de unos cinco años y recuerdo el dolor que pase al sentir esa jeringa atravesar mi piel.

Nunca me dicen que contiene cada jeringa supongo que es porque no lo saben o les gusta mantenerme en la ignorancia, el líquido fluye por mis venas como si fuera fuego ninguno de esos líquidos es lindo de sentir en las venas.

-Quieta - me aprieta el brazo

Luego de media hora terminan conmigo y que dotan al que ni siquiera me puedo levantar, veo mi cabello opaco necesito un baño pero hoy no me toca así que tendré que aguantar la hasta mañana, no sé ni a qué día estamos.

...

C

uándo despierto me rápidamente sigo en jaula y ahora estoy a oscuras así que ya no debe ser de día, guardias habrán hecho cambio de horario hoy.

Aquí tantos años se ha vuelto realmente mi tortura que odio más que a nada, podría escapar pero debería pensar bien mi situación no van a sacarme de aquí al menos que sea sedada y tampoco van a bajar la seguridad y yo sola no creo poder con más de cien guardias.

-Ravena despertaste - el doctor Fisher ingresa en el espacio con su típica tableta de anotaciones

-¿Cuánto Dormí?

EL CASO: RAVENA SOUX Donde viven las historias. Descúbrelo ahora