Capitulo 4

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Scott intentaba convencer a su paranoico amigo de ir con el a la escuela, que no volverá a pasar lo de ayer.

- No, Scott. Sea lo que sea que te haya ocurrido, fue por culpa de la escuela. -Stiles caminaba en círculos por su pieza.

- No exactamente. -scott confesó mirando al suelo.

El hiperactivo muchacho de lunares miró rápido a su amigo y se acercó a él.

- Osea, ¿Que recuerdas lo que pasó? -Stiles se hincó para quedar frente a Scott que estaba sentado en la cama.

- No mucho. De lo único que me puedo acordar es que estaba corriendo de alguien, y luego... -scott pausó su conversación para obligar a su cerebro a recordar. – Luego recuerdo estar peleando con alguien, pero su cuerpo es muy borroso.

Stiles supuso que se refería a cuando lo intentó atacar en el campo de Lacrosse, por lo que dedujo una vez más que el problema es la escuela.

- Escucha, amigo. No quiero que te preocupes y quiero que te quedes aquí, puedes ver la televisión, comer de mis chocolates que guardo en mi armario, jugar videojuegos; ALGO que te mantenga distraído y calmado. -Stiles se levantó y tomó su sudadera para salir.

- Stiles, hablas como si fuera un peligro para la gente. -scott miró con evidente confusión a su amigo.

Stiles pensaba abrir la boca y decirle que, efectivamente, ayer se comportó peligroso con él, pero se vio obligado a mantenerla cerrada y no meter más presión a su moreno amigo.

- Solo digo que no quiero que te vuelvas a lastimar tu solo. Scott, me preocupas. -Stiles miró a su amigo con ojos de súplica.

Mccall intentó no ceder ante esa mirada, pero fue derrotado. Sabía que su amigo no estaría tranquilo si no acata sus plegarias, por lo que suspiró agobiado y le sonrió al pálido chico que tenía enfrente.

- Está bien, me quedaré aquí. -scott se sentó nuevamente en la cama.

- Oh, gracias al cielo. Te quiero, amigo -Stiles abrazó al moreno. – Cualquier cosa que pase, recuerda que puedes llamarme y vendré lo más rápido que pueda. -se separa del abrazo y camina a la salida de su habitación.

El adolescente de tes morena solo asintió y Stiles pudo irse tranquilo sabiendo que deposita toda su confianza en su amigo. Tomó su mochila y salió como rayo hacia su camioneta ya que iba más tarde de lo habitual.

Scott escuchó desde la habitación de Stiles como este último arrancaba la Jeep y se marchaba de la casa. El muchacho se recostó sobre la cama y miró hacia el techo como si él fuera a darle las respuestas de lo que pasó ayer.

Por más que intentaba recordar, su mente nublada hacia eso una tarea imposible de hacer. Tapó su rostro con sus manos por la impotencia y frustración que le da no poder hacer nada más y se quejó.

Unos minutos pasaron antes de que el teléfono de mccall sonara entre el silencio del cuarto. Scott se enderezó, tomó su celular y miró la pantalla de este.

Era deaton. Sabía que su jefe lo llamaba únicamente para dos cosas: trabajar o algo sobrenatural. Contestó sin chistar sabiendo que era alguna de esas dos.

- ¿Scott? -alan habló preocupado desde el otro lado de la llamada.

- Si, ¿Pasa algo? -scott miró a la nada esperando una respuesta.

- Te necesito en la veterinaria, ¡Ya! -deaton se alteró ligeramente.

- Claro, solo dime, ¿Es para trabajar o es algo sobrenatural? -el adolescente se levantó listo para salir.

ANIMAL - ScilesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora