capitulo 8

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Hoy era la última revisión de Stiles en el hospital. Sus costillas habían sufrido un daño considerable, pero gracias a los medicamentos, los cuidados de su papá y las visitas rutinarias al médico han dado sus frutos.

A pesar de ver la mejora de Stiles, la señora mccall, que era la encargada de todo el proceso de recuperación del muchacho, no se veía del todo contenta; y no era para menos, no ha sabido nada de su hijo en casi cuatro semanas. Básicamente lleva desaparecido el mismo tiempo desde que Stiles ingresó al hospital.

Melissa se levantó de su asiento y buscó una jeringa para darle el último medicamento a Stiles y poder retirarse. Llenó la inyección con la sustancia y acercó su mano temblorosa al brazo del pálido castaño.

Al darse cuenta que su pulso empeoraba, la señora respiró profundo e intentó relajar su cuerpo de la tensión, pero la angustia de una madre desesperada por saber el paradero de su hijo no se quita con un simple respiro.

Todos estos raros comportamientos no iban a pasar desapercibidos por Stiles, quien miró a Melissa con profundo pesar y tristeza. Tomó la mano de la enfermera y logró que esta dejara de temblar y lo mirase.

Melissa y Stilinski no necesitaban palabras para demostrar su apoyo incondicional hacia el otro. A la madre de scott se le llenaron los ojos de lágrimas que había estado guardando desde la desaparición de su hijo.

Aquellos individuos estuvieron así unos cuantos segundos antes de seguir con los tratamientos necesarios. Unos minutos más tarde; Stiles salió del hospital en compañía de su padre y ambos regresaron a casa

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Habían pasado tres días desde que Stiles finalizó sus tratamientos y se encontraba lo suficientemente recuperado para regresar a clases.

A pesar de no prestar atención a su entorno, Stiles podía sentir las miradas encima de él. Sabía que la gente murmuraba sobre su lesión o sobre la notable ausencia de Scott.

Se mantuvo a raya con eso y prefirió dejarlo de lado. Así transcurrió el día hasta que llegó la hora de Lacrosse. El entrenador tenía noción de la condición del castaño, por lo que lo dejó sentado en la banca y viera el entrenamiento desde ahí.

- ¡Muy bien, bola de ineptos! — habló el entrenador con su habitual carácter de siempre. — Como ya lo notaron, nos hemos quedado sin capitán. Y si alguien sabe algún dato que pueda servir de ayuda para encontrar a mccall, me ayudaría mucho. ¡Ahora! —segido, soltó un silbatazo. — El puesto de capitán está vacante, así que... ¡Muestrenme lo mejor que tienen!

Y así, los estudiantes corrieron al campo como una estampida de animales salvajes a meter una bola en una portería.

Todo ese discurso del entrenador dejó con un sentimiento singular a Stilinski. "¿Alguien mejor que Scott? Pff." Stiles río para si mismo.

Es decir; ¿Que oportunidad tendría alguien humano contra un sobrenatural como su amigo? Es más qué ridículo pensar que exista alguien capaz de superar las habilidades de un hombre lobo.

- ¡Rayos! ¡Si! ¡De eso estoy hablando! — un grito eufórico por parte del entrenador puso en duda lo que Stilinski pensaba.

Aquel escandaloso grito logró sacar de sus pensamientos al castaño y rápidamente miró con confusión al grupo de "adolescentes insignificantes" que se encontraban entrenando.

Toda la atención se centraban en un chico algo corto de estatura, suéter gris y un casco que impedía ver su rostro. A Stiles le picó la espina de la duda y se levantó inconscientemente de las bancas para saber quien era ese tipo.

ANIMAL - ScilesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora