El camino del dragón (dxd)

Capítulo 1: La tragedia

Issei Hyoudou, a ojos de cualquiera, era una persona completamente normal, apenas tenía amigos y no sobresalía en nada, siempre estaba en su mundo y era inusual que prestase atención a algo por más de 3 horas seguidas, completamente diferente a su hermano, Shin Hyoudou, el cual era considerado el segundo príncipe de Kouh debido a sus excelentes notas y su actitud amable hacia el resto de personas

A pesar de ser comparado diariamente con su hermano, Issei era feliz, él desistió de buscar amigos, pues siempre lo dejaban por o para acercarse a su hermano, intentó autoconvencerse de que solo tenía mala suerte, pero al decimo "amigo" que lo abandonó se rindió, con el tiempo, aprendió a ignorar a las personas y a desconectarse cuando algo no le interesaba, en la escuela hacía lo justo para que no le recriminaran y en la casa hablaba lo justo y necesario, pues el hecho de que sus padres preferían a su hermano mayor era bastante evidente

Sin embargo, la tranquila vida a la que Issei se había acostumbrado cambiaría cuando su hermano trajo a una chica pelirroja a su casa, él acababa de volver de un paseo nocturno cuando escuchó como una voz desconocida provenía de la cocina, al asomarse, todos se callaron de repente, viéndolo con una mirada extraña, cuando la chica iba a hablar, su hermano la interrumpió "Ella es la presidenta de mi club hermano" dijo, con un tono demasiado serio

"De acuerdo, estaré en mi habitación" dijo Issei, para acto seguido irse dela cocina, pero se quedó escuchando desde las escaleras, la chica siguió hablando "como les estaba diciendo, mi nombre es Rias Gremory y soy un demonio" dijo la ahora identificado como Rias, "he venido porque he notado que su hijo mayor tiene una fuerza oculta y me gustaría reclutarlo en mi grupo" continuó 

Su madre hablo, "Espera espera" dijo algo sorprendida por toda la información que le habían dicho de golpe "¿cómo que un demonio? ¿cómo que un poder? ¿de qué va todo esto?" preguntaba a Rias sin creerse nada de lo que decía, a lo que esta solo extendió sus alas de murciélago, sorprendiendo todavía más a los tres presentes en la sala "esto tomará un tiempo, así que esperen hasta que termine antes de preguntar sus dudas" dijo Rias antes de empezar a contar la verdadera historia del mundo, como Dios creó a los ángeles, como estos cayeron convirtiéndose en ángeles caídos y demonios, el como estos se declararon la guerra y el como esa guerra casi extingue a las tres razas, siendo pausada por la intromisión de dos dragones conocidos como Ddraig y Albion,

"Bueno, mañana me dirás tu respuesta Shin-kun", dijo Rias mirando al mencionado mientras se levantaba, "ya es tarde y debería dejaros procesar toda esta información".

"¡Espera!" exclamó la madre de Issei "dijiste que Shin tenía algo oculto, ¿Issei también tiene algo?" preguntó preocupada por que su hijo menor se quedara todavía más atrás de su hijo mayor

"Mmm, no" fue su única y simple respuesta, "en mi opinión, es mejor que él nunca se entere del mundo sobrenatural, le conté esto a ustedes por respeto, pues considero que antes de reencarnar a alguien se le debe pedir permiso" dijo con una sonrisa para luego irse de la casa

"mmm, creo que aceptaré" dijo Shin, para sorpresa de sus padres, "si lo que dijo es cierto, y no hay motivos para no creerla, tarde o temprano tendré que enfrentar a alguien, y quiero tener toda la ayuda posible en ese momento" debatió, teniendo una mirada comprensiva de sus padres

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El castaño estaba caminando hacia la academia Kuoh, sumido en sus pensamientos, como ya era habitual, "hmm, hace ya un año que mi hermano se metió al mundo sobrenatural, y todavía no me dijeron nada, menos mal que me quedé escuchando ese día" pensó el castaño ingresando al terreno de la academia, sin darse cuenta como a lo lejos un gran grupo de chicas armadas con espadas de madera perseguían a dos chicos, "ahora que lo pienso, nunca supe que es lo que hace mi hermano" pensó "desde que mi hermano se unió a ellos ha cambiado, aunque no lo demuestre a nadie yo puedo verlo, como ya no sonríe de verdad y como su mirada es distinta"