Parte 2: Se que te vas. No te importa si me quedo atrás.

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Noche de agosto.

—Cain, ¿Como estuvo el trabajo?

Caín y Yahwi están en su habitación. Yahwi, ha fingido, lo ha hecho bien... Sonríe cuando tiene que sonreír y habla cuando tiene que hablar, su rutina sigue siendo la misma y sus actitudes antes de enterarse de la infidelidad sigue igual.

Es obvio, Caín todavía no sabe.

Yahwi abrazo por detrás a Caín. "Por favor mírame y sonríeme, besame y por favor di que te importo al menos una vez. Una vez a la semana estaría bien o tal vez una ves al año. Solo he sido feliz contigo, por favor mírame. Por favor no me dejes".

Sus manos apretaban a Caín. Caín solo podía corresponder tocando los dedos de su "amado" mientras su cara reflejaba un dolor. Ya no le quería, Yahwi no había hecho nada malo, solo el amor se acabó. Todo se volvió una rutina y Yahwi era parte de esa rutina cansada. Dios, lo amaba, pero solo por sus hijas, estaba ahí por sus hijas. ¿Como les diría a Khalessi y Annie que ya no amaba a su Mamá-Papá? ¿Como les diría que ha estado encontrándose con otra persona mientras ellas creen que su papá está trabajando y haciendo dinero para darles sus estudios y alimento? No podía. Sabía que dañaría a sus hijas y a Yahwi.

Estar con Jooin era como estar con el rico verano, no había cabida para el frío. Yahwi era frío, Yahwi era la nieve de a mediados de diciembre, fría y si la tocas te congelas. El amaba ese frío lugar y le gustaba brindarle calor a ese frío hombre y el recibía ese frío cuando el calor era sofocante con todo gusto. Pero demasiado frío y sin protección se terminó congelando. Yahwi había cambiado y el sabe que fue por el, es solo que la naturalidad de Yahwi es fría, el antártico en humano.

Caín se dio la vuelta, tomo el rostro de su "gatito" no le ha dado cariño a ese "gatito", agachó un poco su rostro y beso esos labios que para ahora son fríos, dio paso a su lengua, bajo sus manos y tocó todo lo que antes amaba tocar —El trabajo ha ido bien, Honey. Ha ido bien

Sus labios volvieron a tener actividad. Ahora era más profundo, ahora era más apasionado, estaría bien este beso si no fuera porque en su cabeza estaba la imagen de Jooin sonriendo.

Yahwi, no pudo evitarlo y lloro.
¿Has visto a un gatito llorar?
Los pequeños mininos aveces aparentan ser fríos y que no quieren amor pero, si lo quieren, quieren ser mimados y mimar. El gatito estaba llorando y sus lágrimas eran calientes: "Se que estás pensando en él"

—Hey, ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?

Caín tardó pero se dio cuenta. El gatito estaba llorando, no lo había visto llorar desde hace mucho tiempo, "No sabes y lloras, ¿Te hizo alguien daño? Aunque ya no te ame siempre te cuidare".

—Nada. Es solo... Recordé el pasado

—No llores... Honey... No llores, estoy contigo —Tomo el rostro del gatito herido— estaré siempre contigo, recuerda

—No...

No podía decir "No me digas esto cuando se que te irás".

✨✨

Yahwi no durmió.
El ser que le daba calor, ya no le estaba brindando por que quería, era obligación.
Yahwi acerco su nariz al rostro de Caín, pasándola por todo su rostro y cuello, dejándola por un buen rato en lo último.

—No te vayas. No me dejes. Te lo suplico —murmuraba. Sus lagrimas volvían a caer— déjame estar contigo, no me quites está felicidad. No por favor.

"Se que te vas, que ya no te importa si me quedo atrás".

Yahwi lloró hasta que el sol salió. Caín se levantó y Yahwi no recibió su beso...

Caín no le quería pero no podía dejarlo.

ASI ES EL AMOR ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora