La Pesadilla Que Vive En Mi

MINI CAPÍTULO "Irresistible pero doloroso"

Elliot POV

Alguna vez pensaron en ¿Cómo sería enamorarse a primera vista?

Esa sensación en que todo te parece tan hermoso, cada simple gesto, cada pequeño detalle o característica de la persona logra ese cometido de llamar demasiado tu atención, al punto en que no puedes vivir sin verla, lo malo es que... a mí no me paso.

Lo que a mí me paso fue una de las peores situaciones en que el ser humano sufre más que en cualquier otra ocasión, me enamoré de la persona incorrecta en el momento incorrecto y eso era lo que más me dolía. Querer a alguien que no quiere ser amada por alguien como yo y no quiere permitirse ese lujo de querer a alguien de vuelta.

No quería conocer a nadie, no quería permitirme establecer una amistad, relación o compromiso en esta ciudad. Mi único propósito de estar en la casa de mi madre era poder ayudarla a conseguir más dinero y poder cuidar a Winnie. Solo quería volver a casa, a mi verdadero hogar junto a mi abuelo, pero lamentablemente estar aquí era una tortura, odiaba el simple hecho de volver a torturarme con Winnie y no poder recibir atención de mi madre.

Y para colmo, me enamoré de una chica que se notaba desde la distancia que no quería más que dejar de existir. Una chica que solo quería rehacer su vida, pero debía resolver los problemas que su familia le dejó.

Margaret, como describir a la chica que me provocaba insomnio cada noche y ocupaba mi cabeza con cada pensamiento que tenía. No tenía la respuesta a como me sentía cada vez que la tenía cerca, era difícil que cada minuto que estaba con ella, en donde ella era feliz, este no durara para siempre. Sus labios lucían tan besables, sus manos lucían tan tocables, su sonrisa tan aliviante y sus ojos tan irresistibles que no lograba sacar mi mirada de ellos. Es tan hermosa cada vez que lloraba, era tan extrañable cada vez que despedía de mí, que me destrozaba tenerla lejos. Me preguntaba si pensaba algo así de mí, me preguntaba si ella veía a otra persona, pero me pasaba todas las noches pensando en que solo quería estar con ella para poder protegerla de tanta miseria en su vida.

Cada segundo que miraba sus interminables heridas me daba cuenta que nunca terminaría de curar todas aquellas grietas abiertas que no hacían mas que agrandarse. Pero sé que debe haber una manera en que pueda ayudarla en que pueda cumplir mi cometido de verla feliz, aunque yo no estuviera dentro de esos planes.

Y ahí fue donde me di cuenta que me estaba enamorando muy profundamente de Margaret.

Y no fue que yo la amé desde el primer momento en que la vi, porque seamos honestos, si ves a alguien llena de lágrimas de preocupación y tratando de curar a una drogadicta tirada en el baño, pues eso no era muy atractivo. La primera vez que vi a Margaret no me gusto en lo absoluto, me vio en un momento vergonzoso, permitiendo que viera como Winnie se iba por las nubes de la droga que recorría su cuerpo. No me gustaba que la gente estuviera presente cada vez que Winnie tenía una sobredosis. Sentía que veían la parte más frágil de mi familia. Cuando la vi pensé que la paramédico la había enviado en su lugar, ya que había hecho un buen trabajo con mi hermana, pero cuando me dijo que venía a ver a Winnie por temas de Julieta, me di cuenta que era una extraña más. Pero mi intriga no se detuvo ahí, la convencí de acompañarme junto con Clementine por un helado al parque, quería saber quién era la desconocida que vio mi familia en su punto de debilidad.

Lamentablemente no faltaron las preguntas incomodas que nos hicieron sentir como un poco nerviosos y al mismo tiempo desesperados de poder olvidar aquella escena que presenció. Lo siento sé que soy muy repetitivo, pero la verdad odiaba todo lo que tenía droga involucrada en el medio. Sin más cuando el tiempo pasaba e iba convirtiéndome en parte de su vida, fue donde no quise irme más, más bien en ese preciso momento me di cuenta que quería estar con ella para poder protegerla. Para poder darle a entender que yo quería tomar su mano y nunca soltarla.