Era la mañana siguiente y Dong-Gyun le tocaba trabajar así que se arregló, despidió de su alfa y fue rumbo a su trabajo.
- Buenos días - saludó a su compañero una vez que llegó.
- Buenos días - contestó al cabo de un corto periodo de silencio, eso le extrañó al de hebras café.
- ¿Te pasa algo Chanwoo? - le preguntó preocupado pero al no recibir respuesta se fijó mejor en el mencionado notando que tenía unos auriculares bluetooth en su oreja derecha.
Se acercó a su concentrado amigo y le tocó el hombro asustando lo.
- ¡Dong-Gyun! - exclamó agarrándose el pecho - no, no tranquilo - esas últimas palabras desconcertaron aún más al omega.
- ¿Chanwoo?
- Lo siento Dong-Gyun estaba hablando con MD que a ido a ver a Seung - le explica con una pequeña sonrisa.
- ¿...MD fue a ver a Seung? - su expresión era una mueca y es que por lo que le dijo Jiwon, Seung estaba en celo y que un alfa fuera con él era peligroso.
- Sí, cuando está en su celo Myung-Dae suele ir a ayudarlo - dijo despreocupado - calla solo le explico a Dong-Gyun - suspiró - te manda saludos.
- Hola - dijo bajo, aún en su mente rondaba aquello de que un alfa iba ir a ver a su Seung.
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Pov Myung-Dae.
Escucho a Chanwoo seguir hablando con Dong-Gyun sobre Seung y lo susceptible que estaba en su celo.
Llegó a su departamento, saco las llaves que él mismo me dió con un adorable llavero de algún videojuego que solía jugar, abro la puerta recibiendome una gran cantidad de feromónas con olor a menta las cuales me llamaban demasiado.
- ¡Seung estoy en casa! - aviso cerrando la puerta detrás de mí.
Escucho una puerta abrirse y las feromónas se intensifican aún más haciendo mis rodillas flaquear.
-Alfa...- veo a Seung vestido con una de las tantas camisas de Chanwoo.
Caminó lentamente hacia mí conterneando sus caderas, mis ojos no se apartaban de estas eran tan hipnotizantes...
-¿Te has tomado la medicina? - le pregunto quitándome los zapatos.
- Sabes que eso desde hace tiempo no me hace nada... - su voz era demasiado meliodosa, como si de un canto de sirena se tratara.
- Lo sé - suelto una risita - solo una buena polla te calma - con mi dedo índice y medio aflojo mi corbata.
- Exacto...solo la polla de alfa puede calmarme...- se levantó un poco la camisa enseñando que no tenía nada debajo, pude ver también como su líquido bajaba por sus piernas y su miembro erecto pidiendo atención.
- ¿Entonces que esperamos?- preguntó enarcando una ceja.
- Cierto...arrodíllate - demandó, su mirada me hacía temblar de la excitación se veía tan sexy cuando me daba órdenes.
Me acerco a él y me arrodillo quedando a la altura de falo.
Me agarra de la barbilla levantando mi cabeza haciendo que nuestras miradas se cruzaran - lame - me ordena.
Felizmente acato esa orden, primero empiezo lamiendo su necesitada punta haciéndolo soltar un pequeño suspiró, luego mí lengua baja hasta su base y sube de manera tortuosa para luego meterlo en mí boca haciendo que soltara un gruñido. Empiezo con el vaivén lento, él era un manojo de suspiros el celo lo hacía estar aún más sensible de lo que ya era.
- A-ah... Myung-Dae...- gimió mi nombre seguido de un necesitado alfa y es que ha aguantado toda la noche los dolores y calenturas que le producen el celo.
Aumento mí velocidad haciéndolo gemir aún más y en menos de dos minutos tenía su dulce néctar en mí boca.
- Traga - me ordena aún agitado, le hago caso y luego de tragarlo abro mí boca sacando mí lengua enseñando que lo había echo - que buen perrito - acaricia mí mejilla - ¡Oh! - exclama haciendo que lo miré intrigado - se te a olvidado el collar, mal perrito. Ven - me levanto y lo sigo hasta su habitación en donde pude ver encima de la cama un nido echo de ropa, en ellas había de Chanwoo y mías haciendo que nuestras feromónas junto a la suya se mezclarán. Lo miré pudiendo ver que buscaba algo en el armario, la camisa se había levantado dándome una buen avista de su redondo y apetecible trasero - Ten, póntelo - dijo extendiéndome un collar de perros de color morado. Sin chistar me lo pongo - Y ahora extiende tus manos cariño - lo hice y de na nada me puso unas esposas - son nuevas no las rompas como la última vez- frunció el ceño mientras me lo decía.
- Sí amo - digo pasivo.
- Que buen perro - agarró el medio de las esposas, en donde se unían y tiró de ellas hasta la cama en donde la enganchó dejándome atado - hora de tú premio - sonrió lascivo.
Me empujó dejándome tumbado en la cama, se subió encima a horcajadas, se acercó a mis labios y me besó, era un beso necesitado cargado de lujuria. Mordió mí labio antes de separarse y continuar con besos por mí mandíbula hasta mí cuello en donde mordió.
-Auch...- me quejo.
- Shh, Shh...- lamió la herida en donde supongo salia sangre.
Luego de eso se separó para empezar a desabrochar mí camisa dejando mí pecho al descubierto.
- Se te verían tan bien unos piercings en los pezones...- murmuró acariciando mí pecho.
- Sabes que no me gusta el dolor - le recuerdo.
- Ya lo sé, te gusta infligirlo, oh gran alfa dominante te quién esperaría que sería sometido por un omega en celo - se mofó.
- Solo tú me sometes - le digo coqueto.
- Jmm...- sonrió de lado y empezó a mover sus caderas encima de mí entrepierna haciéndolas rozar - aaah...- gimió.
- Seung...- mis pantalones apretaban ya desde hace rato, desde que olí sus feromónas ya estaba poniéndome duro.
- Hoy no puedo esperar...- murmura el omega sacando mis pantalones junto a mí ropa interior y de un solo senton se introdujo mí dureza.
- Omega...- gimo.
- Alfa...- su voz era lasciva, demasiado caliente que solo con eso hacía que me pusiera aún más duro - creció...- alucinó tocando su bajo vientre para luego empezar a pegar saltos mientras gemía, sus gemidos eran agudos podía asegurará que los vecinos escucharían pero poco me importaba.
Meneo mis caderas haciendo que fuera más profundo. La habitación era un lío de gemidos, gruñidos, suspiros y choques de pieles.
Sus sentones se hicieron más rápidos hasta que llegó a su clímax apretándome en su interior haciendo que yo también me corriera inchandome en su interior.
- Aaah...me siento lleno...- y con esas últimas palabras calló en brazos de Morfeo.
- Hey, Seung no me dejes atado...- suspiro, solo me quedaba esperara a que se despertara y esperaba que fuera pronto.
Continuará...
Aquí tenemos un poco de MD sumiso, no es mucho pero espero que os haya gustado.
