Siento el frío beso de la soledad por toda mi piel, pica, arde y me hace retorcerme en mi propia desesperación, me hacia gritar impotente y desear que el vacío se llenara, que mi mente reaccionara, y me hiciera salir de ese estado, que me sacudiera y me diera cuenta que todo estaba en mi mente,sabia que algo faltaba en mi, el único sufrimiento físico era provocado por mis uñas en mis muslos que marcaban en rojo mi piel, ardiendo en carne viva siendo abiertas por mi fría mano todos y cada uno de los dias.
Nada ayuda a calmar el dolor, solo el saber que algún dia todo acabara, que ya no sentiré ese peso, que todo pasara, el dulce consuelo de que un día mi cuerpo subirá a una estrella y nadie llorará amargo por eso, porque fue solo el destino, lo que tenía pasar, pues yo habré muerto.
