NO RULES IN BREAKABLE HAVEN ! ━━ rafe cameron

OO1

( ONE ) part.

❛ Devils roll the dice,
angels roll their eyes

( . . . )

Ella sabía que hoy vendrían, aquellas camisas planchadas y palos de golf con inscripciones.

Al ver a Rafe y Topper venir desde el club de campo con sus padres detrás, Casey no pudo esconderse mucho más a la sombra del coche de golf.

Topper juntó las manos para llamarla, nunca eludió el hecho de que no debería tutear al personal.

Ni siquiera pareció importarle que su padre le lanzara una mirada asesina que la habría hecho llorar si la hubiera recibido ella.

Casey sujetaba las páginas de su libro entre los dedos, ya que había perdido su señalador hacía meses y aún no había podido encontrar uno que le gustara lo suficiente como para reemplazarlo.

— Eso es totalmente inapropiado, señor Thornton. Ella lo miró de arriba abajo antes de saltar del carrito de golf.

Hacía demasiado calor para hacer nada hoy, y ya empezaba a sentir el sol calentándola a través de su uniforme. 

 Casey tomó sus bolsas y miró a Rafe, preparándose.

— Ahora. Él le lanzó su bolsa, aunque sabía que ella tenía poca habilidad para coordinar sus manos y ojos.

— La última vez tuve un rasguño justo en mi palo favorito. Él atrajo toda su atención cuando inclinó la cabeza al sol, permitiendo que toda la luz del día mostrara lo bonito que era, fue casi suficiente para que Casey olvidara lo que él había dicho.

No tenía ni un rasguño y todos los presentes lo sabían.

— Lo siento mucho señor Cameron, no volverá a ocurrir. Ella esbozó su sonrisa más brillante y se obligó a no morderse físicamente la lengua.

Rafe siempre era así. Parecía encontrar placer en molestar a todos a su alrededor sólo lo suficiente para mantenerse satisfecho pero no lo suficiente para terminar alejando a todo el mundo.

— Mejor no. Ward palmeó a su hijo en la espalda perdiéndose la broma mientras Rafe miraba la hierba bajo sus pies.

Casey se preguntó si alguna vez él se había sentido culpable, pero cualquier esperanza de ello desapareció cuando él levantó la vista sonriendo.

Una sonrisa estúpida, a lo Rafe Cameron que hacía que cualquiera tuviera ganas de golpearlo.

— Sí, mejor no. Susurró al pasar junto a ella, acariciándole el hombro de la misma forma que su padre lo había hecho con él.

Casey en respuesta apretó los dientes sabiendo muy bien lo bien que se llevaban y sabiendo que en el fondo no le importaba que se metiera con ella, porque al menos significaba que se lo había pensado dos veces.

— Asegúrate de despistarlo un poco por mí. Lanzó una mirada suplicante a Topper. Una mirada que había perfeccionado con el tiempo y que parecía funcionar a la perfección con él.

Topper puso los ojos en blanco. — Si hace falta. Le guiñó un ojo antes de seguir a los demás.

Rafe estaba de un humor implacable ese día, haciéndola volver tres veces porque su bebida no parecía terminar de gustarle.

Eso ni siquiera fue lo más molesto que hizo.

Como la mayor parte de los días, él y Topper esperaron para llevarla de vuelta con ellos, pero cuando ella alcanzó el pomo de la puerta, él arrancó. Una vez, dos veces y una vez más por si acaso.