𝐌𝐈 𝐀𝐌𝐎𝐑𝐓𝐄𝐍𝐓𝐈𝐀 (ᴡᴏʟғsᴛᴀʀ)

PLAN 2/2

Ya habían pasado varios meses desde que el plan de Sirius había empezado.

Constantemente el ojigris acompañaba a su "mejor amigo" a la biblioteca con la excusa de ir a estudiar, al principio el de cicatrices lo miró raro pero no se negó.

Con el tiempo se fué haciendo costumbre, todos los días en las tardes noches ellos dos salían de su habilidad y se encaminaban a la biblioteca.

Al principio la rutina del ojigris era salir de la habitación y admirar al castaño mientras caminaban, luego sentarse en un lugar apartado y seguir admirando al otro chico mientras fingía leer y el camino de regreso a la habitación lo seguía admirando, y al final a la hora de dormir era el último para tener tiempo de observar por última vez en el día a su Moony.

Pero luego se dió cuenta de que sí quería ganarse a Remus no solo tenía que aparentar, tenía que esforzarse y lograr ser un buen partido para el.

Pero vamos es Sirius Black, obviamente nadie es mejor partido que el para Remus. Pero quería demostrar que el de verdad se esforzaba para ganarse el corazón del castaño.

Así que empezó a prestar atención a las clases, cumplir con sus tareas, hacer los proyectos estudiar para los exámenes, pero estamos hablando de Sirius Black, tenía sus espacios acomodados para entrenamientos de Quidditch, los partidos y obviamente bromas, bromas, bromas y más bromas, una que otra detención, y acompañar a su Moony a la biblioteca.

Se dedicaba a escuchar a Remus cuando hablaba de libros.

Veía cómo se le iluminaban los ojos cuando contaba toda la historia y cuando la trama le gustaba demasiado la contaba con tanta emoción cómo si estuviera viviendo todo por el mismo.

El escuchaba prestando total atención, a veces se perdía en su mirada dorada, esa que hacía que no pusieras dejar de verla, te atrapaba completamente en sus pequeños subtonos castaños.

Y en su boca, esa sonrisa que aparecía solo cuando hablaban de libros. Sus labios, esos labios rosados que hacían querer besarlos todo el tiempo.

Incluso había llegado a leer algunos de los libros que había escuchado que le gustaban mucho a su chico, para entender cuando el hablara de la historia.

Constantemente James se reía de su mejor amigo diciendo cosas cómo:

"No que muy alma libre" "Y me decías que estaba exagerando y quién sabe cuánta cosa cuando hablaba de Lily" "El amor te pone mal hermano" "El perrito libre se nos enamoró" a lo que siempre recibía un golpe en la cabeza por parte del ojigris.

Esa tarde estaba en la habitación viendo sus calificaciones.

Remus: Calificación perfecta cómo siempre

James:Una calificación sorprendentemente buena aún y con todo eso de que se saltaba las clases o llegaba tarde, no era de entregar muchas tareas y siempre estaba castigado por divertirse un rato molestando a los profesores

Peter:no reprobó pero se podía decir que casi lo hace.

Pero el único que no estaba era Sirius. La verdad es que estaban curiosos de sus calificaciones.

Sobre todo Remus que había sido testigo de cómo se mataba estudiando.

De la nada se abre la puerta de la habitación dando paso a un Sirius Black muy contento.

Llegó emocionado diciendo que había sacado una nota exelente en todas las materias. Dijo que los maestros lo habían felicitado por sus buenas notas, incluso que Minnie en vez de mirarlo severamente cómo siempre está vez le sonrió y juraría que vió una pizca de orgullo en su mirada.

Se sentía bien, se sentía jodidamente bien.

Los Merodeadores lo felicitaron pues era verdad que el chico se había empezado a aplicar por voluntad propia y le había ido bastante bien.

Sirius vió por un momento a Remus y vió en el, en su mirada en la sonrisa tan hermosa que le regalaba orgullo, vió lo orgulloso que estaba Moony de el y eso hizo que se sintiera mejor.

Por Merlín haría lo que fuera por que Moony estuviera orgulloso de él siempre.

Y pasó algo que hizo que en su estómago sintiera mil y un mariposas, y que hizo que su corazón fuera demasiado rápido.

Moony le había dado un beso en la mejilla y lo había abrazado.

A lo lejos Peter y James lo miraban sonrientes y con los pulgares en alto.

Y cómo si no tuviera control de lo que decía, le dijo algo que lo llevaría a la última parte del plan y si era sincero la que más le asustaba.

__Moony, tenemos que hablar...__